Con dos balazos, en 2013, su expareja quiso callarla para siempre. Sobrevivió, pero las secuelas fueron terribles: fue diagnosticada de tetraplejia. Desde entonces, Katherine Medel comenzó una lucha para acabar con la violencia de género. Sueña también con recuperarse: "Quiero volver a abrazar a mi hija", dice.
Eduardo Ortega
10 nov 2018 02:05 PM