Ana María vivió 20 años de violencia en manos de su pareja. Calvario que se agudizó dramáticamente hace tres meses tras atreverse a denunciarlo por violencia intrafamiliar, proceso que la mantiene atrapada en su casa junto a sus seis hijos bajo una amenaza constante. De paso, la terrible historia de esta mujer, da cuenta de lo burocrático, engorroso e ineficiente que es el sistema a la hora de denunciar, y cómo la cadena de políticas públicas pensadas para las mujeres son insuficientes cuando se busca abordar y dar una real solución a estos casos de violencia.