Cuba se come cruda, sin sal y sin condimentos. Hay que llamar a los dictadores dictadores. Está bueno ya de intelectualizar el tema de Cuba. Hay que asumirlo de una vez como el final de la utopía.
Wendy Guerra
16 jul 2021 09:23 PM
Cuba se come cruda, sin sal y sin condimentos. Hay que llamar a los dictadores dictadores. Está bueno ya de intelectualizar el tema de Cuba. Hay que asumirlo de una vez como el final de la utopía.
La autora de Todos se van y Domingo de Revolución habla sobre las manifestaciones que remecieron a la isla el fin de semana, así como de la crisis sanitaria, económica y política que atraviesa el país. “Los mercados están vacíos; la gente muere de coronavirus en el suelo de los hospitales, no hay medicamentos, no hay aspirinas. El pueblo se cansó: da lo mismo quedarse callado, te vas a morir igual”, cuenta.
La escritora cubana conversó con Culto sobre El mercenario que coleccionaba obras de arte (Alfaguara), su nueva novela que aborda la vida de Adrián Falcón, la chapa de un hombre que ha ejecutado y visto ejecutar "lo peor de ambas partes". Su autora sentencia: "En un mundo donde Maduro y Trump son los cánones, debemos asumir que se trata del desgaste ideológico más grande de la historia contemporánea".