Se trata de la primera recesión registrada en la economía de la zona euro desde que el PIB se contrajera consecutivamente en el primer y el segundo trimestre de 2020.
Europapress
8 jun 2023 10:43 AM
Se trata de la primera recesión registrada en la economía de la zona euro desde que el PIB se contrajera consecutivamente en el primer y el segundo trimestre de 2020.
Los precios al consumidor en la eurozona bajaron respectó al 8,5% registrado en febrero, de acuerdo con datos publicados el viernes por parte de la Eurostat, la agencia de estadísticas de la Unión Europea.
Los precios al consumidor en los 19 países que utilizan el euro subieron un 0,1% intermensual en julio.
Para Alemania, la economía más grande de Europa, la esperanza de evitar una recesión disminuye día a día, mientras que el país depende más que la mayoría del gas natural ruso.
La inflación se ha disparado en el último año, primero por los cuellos de botella de la oferta tras la crisis del COVID y después por las repercusiones de la guerra de Rusia en Ucrania.
El Producto Interior Bruto (PIB) de la zona euro subió 2% en el segundo trimestre del año con respecto al anterior trimestre. Unos 14,9 millones de personas estaban desempleadas en la UE en junio, de las cuales 12,5 millones en la zona euro.
Como resultado de los sobreesfuerzos realizados para abonar la factura de la pandemia.
La actividad se contrajo 6,8% en el ejercicio marcado por el coronavirus y las cuarentenas para frenarlo.
Con las tasas de infección en aumento en toda la región, los países han tomado medidas drásticas que limitan la vida pública.
Los fabricantes informaron de un fuerte crecimiento, impulsado por el aumento de las exportaciones, con un comportamiento especialmente favorable en Alemania.
La economía del bloque está en camino de su primera recesión con recaída en casi una década.
El índice final de directivos de compras (PMI, por sus siglas en inglés) del sector manufacturero de IHS Markit subió a 54,8 puntos en octubre.
Las renovadas restricciones para controlar la pandemia obligaron a muchas empresas del dominante sector servicios del bloque a limitar sus operaciones.
Mientras la pandemia amenaza a Europa, la pronta certeza sobre las elecciones presidenciales favorecería a los estadounidenses.