Mientras el nuevo gabinete del Presidente Gabriel Boric se ubicaba en la Plaza de la Constitución para tomarse su primera foto oficial, la vocera Camila Vallejo entregaba -y ponía en las solapas de blazers y chaquetas- a las 12 ministras y 12 hombres una chapita con la bandera chilena y el nuevo eslogan estrenado ayer por el gobierno -”Presentes por un mejor futuro”- que estará a partir de mañana en la gráfica del gobierno.

Eran la 9 am. Y así comenzaba la conmemoración del primer año de Boric en La Moneda, marcado por el rechazo de la reforma tributaria -el miércoles en la Cámara de Diputados- con que el gobierno pretendía obtener los recursos para concretar sus promesas de campaña, y por el difícil cambio de gabinete realizado la tarde del viernes.

La bandera chilena, el escudo nacional y paisajes del norte y sur de Chile fueron protagonistas ayer de una cuidada puesta en escena en Palacio, que acompañará el nuevo relato identitario que se busca imponer en este segundo año y que ayer expuso detalladamente -apoyada en estudios de opinión pública- a ministros y subsecretarios.

Cercado por problemas de gestión en sus equipos frenteamplistas y el fracaso de su diseño inicial sustentado en una “nueva generación” que llegaba al poder, el nuevo relato busca mostrar a un “Presidente distinto” al que asumió hace un año, mucho más maduro, dialogante y consciente de las dificultades que implica gobernar el país.

De ahí que la palabra “aprendizaje” haya sido una de las más utilizadas por Boric en su discurso el viernes en el ajuste ministerial, y en el de ayer ante sus ministros y subsecretarios en el Salón Montt Varas.

Y también usado en estos días por dirigentes del Socialismo Democrático y Apruebo Dignidad.

“Fue un primer año de aprendizaje duro”, confesó el presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier -en una entrevista en El Siglo-, quien después de varias semanas de hospitalización regresó ayer su casa.

“El tema generacional dejará de estar presente a partir de ahora”, sentencia un personero de La Moneda, quien agrega que se pondrá énfasis en la experiencia y en la buena gestión del aparato del Estado.

De aquí que Boric señalara a sus 24 ministros dónde poner el foco y pedirles que ayer expusieran las prioridades de sus carteras para 2023, junto con “apretar” más a sus respectivos secretarios regionales ministeriales (seremis).

Boric y Camila Vallejo saludan a los adherentes del gobierno que llegaron ayer a la Plaza de la Constitución para celebrar el primer año de gobierno.

Los tres ejes del nuevo relato

Justamente la gestión y la mejor administración de recursos, es uno de los tres conceptos principales del nuevo relato que tendrá el gobierno.

“Necesitamos equipos con conocimiento del Estado, con energía nueva y con la experiencia necesaria para poder responder sin dilaciones ni excusas las demandas urgentes de la ciudadanía”, dijo el Mandatario en su discurso del cambio de gabinete, en el cual adelantó los ejes de esta nueva etapa, aprovechando la expectación que había con este ajuste y la transmisión en directo de los canales de televisión y radios.

Un experimentado dirigente de la ex Concertación señala que tanto ellos como los antiguos dirigentes comunistas supieron desde el inicio del gobierno que, más temprano que tarde, Boric tendría que recurrir “a las canas” para sacar adelante su gobierno.

“Se comentaba que la juventud, la falta de experiencia en el Estado y la soberbia de algunos dirigentes frenteamplistas le iba pasar la cuenta al Presidente en algún momento. Y así fue”, agrega.

“Una de las características que tuve a la vista al realizar este cambio fue combinar una mejor gestión con gente probada, con experiencia y que conoce el Estado, en los ministerios, y cuadros jóvenes con vocación de servicio público en las subsecretarías”, dijo ayer el Jefe de Estado.

El segundo eje es el “Estado de bienestar” (que por estos días también buscan hacer suyo dirigentes de Renovación Nacional en medio de la discusión constituyente) con él que se busca unificar “a toda la izquierda”, desde el PC y los movimientos más radicales del Frente Amplio, hasta el centro y los sectores “socialdemócratas” representados en el PPD y ojalá también la Democracia Cristiana, en un año marcado por la redacción de una propuesta de nueva Constitución.

“Nos necesitamos juntos, nos necesitamos unidos y necesitamos ampliar nuestra base de apoyo. Para eso están siendo convocados”, reiteró ayer Boric.

El salir a terreno es la otra idea fuerza que cierra el triángulo con que el Ejecutivo busca recuperar el apoyo de la ciudadanía.

Como han indicado diversas encuestas, se evaluó positivamente la gestión del gobierno en los incendios que arrasaron con miles de hectáreas en el sur del país, a inicios de febrero, y que se caracterizó por el despliegue de los ministros en las tres regiones afectadas por el fuego.

Era la primera crisis nacional que enfrentaba Boric y en La Moneda señalan que salió airoso. De ahí que el nuevo diseño de trabajo busque replicar esta experiencia reciente más allá de la magnitud de los problemas.

El Mandatario pidió ayer a su nuevo gabinete más calle y “enfrentar en terreno las urgencias y emergencias del país”, según cuenta uno de los personeros presentes en la reunión en Palacio.

Ministros saludan ayer a las personas que llegaron a celebrar a La Moneda el primer aniversario de gobierno.

“Dialogar hasta que duela”

Fuentes de La Moneda que participaron en la construcción del nuevo relato señalan que el rechazo a la idea de legislar de la reforma tributaria fue un “balde de agua fría” para todo el gobierno, que no se lo esperaban (ya que confiaban en los votos de izquierda que se restaron) y que si bien no les cambió “la estructura” del nuevo diseño para lo que vine, sí “el análisis y la lectura del momento país”, que debió ser ajustada entre miércoles y viernes.

La estrategia para pararse de este nocaut -transmitió Boric ayer a su gabinete- es salir a subrayar que el bloqueo de la reforma tributaria “es darle la espalda a Chile” y que se buscarán nuevos caminos para avanzar en ella.

Por ello, “dialogar hasta que duela” fue otra de las ideas fuerza transmitidas por el Mandatario para estos segundo año, que para muchos es en el que realmente se puede avanzar en un gobierno de cuatro años (el próximo hay elecciones municipales y en 2025, parlamentarias y presidenciales).

“Para alcanzar nuestras prioridades y nuestros anhelos vamos a tener que trabajar con más unidad, con más solidaridad, con más empatía, escuchando más a quien piensa distinto para poder construir mayorías que permitan viabilizar estos cambios”, dijo Boric el viernes y reiteró ayer a sus ministros, tras una semana en que el rechazo de la idea de legislar la reforma tributaria fue un balde de agua fría para el gobierno.

En un break durante el encuentro de ayer, en el que Boric y sus ministros salieron a saludar a sus adherentes -que llegaron a celebrar el primer año a la Plaza de la Constitución-, el Presidente dijo que están disponibles para “conversar” con la derecha, argumentando que sin esta reformar es “muy difícil” financiar una reforma de pensiones, otro de los proyectos emblemáticos de su gobierno.

“El Presidente me pidió seguir luchando por la reforma de pensiones, y eso lo haremos con diálogo, que es el sello que ha tenido nuestro gobierno. También nos esforzaremos en construir acuerdos y generar mayorías amplias para que las personas puedan ver mejoradas sus pensiones de forma sustantiva”, señaló la ministra del Trabajo, Jeanette Jara (PC), al fin de la jornada.

Para el exsenador del PPD Guido Girardi, el rechazo de la reforma tributaria puede ser una “oportunidad” para ir a buscar recursos en otras áreas, como el desarrollo del negocio del litio, hidrógeno verde y otros recursos naturales -para electromovilidad- que generen riqueza con valor agregado.

“El gobierno debería abrir ahora una licitación internacional del litio a todos los privados que quieran participar con dos condiciones: que aporten al tiro al menos 10 mil millones de dólares al Fisco y que suscriban compromisos a futuro”.

"Vamos a insistir con la reforma tributaria con una estrategia que estamos conversando con el ministro Marcel", señaló ayer el Presidente Boric.