El martes 8 de junio fue un día histórico para el fútbol inglés. Debbie Hewitt quedaba a formalidades de transformarse en la presidenta de la Football Asociation, la entidad rectora del fútbol inglés. La junta directiva de la organización la propuso como la nueva jerarca, un nombramiento que debe ratificarse el 22 de julio. Si todo marcha de acuerdo a la intención inicial, desde enero, y por primera vez en 157 años de historia, el balompié isleño estará al mando de una mujer. Se abre un nuevo ciclo en la historia del fútbol mundial. La era del poder femenino.
Hewitt llega a ordenar las finanzas del fútbol inglés, severamente golpeadas por la pandemia. Hasta 2024, las pérdidas se estiman en casi US$ 424 millones. Mujer de negocios, cuenta con amplia confianza de parte del pleno de la entidad para asumir la titánica tarea del rescate económico. “El panel estuvo totalmente de acuerdo en que ella tiene la experiencia sobresaliente de la presidencia y la gobernanza, en una amplia gama de sectores comerciales, así como las cualidades de liderazgo comprobadas y el carácter requeridos para el puesto”, expresó la FA, a través de un comunicado. Las miradas del mundo se pusieron de inmediato en el país más flemático del Viejo Continente.
En Chile miran el ejemplo a distancia, pero con cierta disposición a la apertura. ¿Será posible ver a una mujer encabezando a la ANFP en el corto plazo? La pregunta surge de modo natural y tiene respuestas variadas. El espectro se reduce, eso sí, al advertir que las normas de la matriz del fútbol chileno exigen haber integrado el directorio de algún club para postular al cargo. Y ahí, casi de inmediato, la opciones se reducen. En los clubes de Primera División, cuyos votos valen doble en la asamblea, hay apenas cuatro directoras: Tamara Agnic y Carolina Coppo en Azul Azul, que administra a Universidad de Chile; Fresia Ramírez, quien integra la mesa de Curicó Unido, y Carolina Compte, en Audax Italiano. En Primera B, en tanto, Rangers se anota con la presencia más nutrida, con tres de siete sillas ocupadas por mujeres. Los otros clubes que las consideran son Temuco, Barnechea y Santiago Morning, con dos, además de San Felipe y Magallanes, con una. El resto de los cargos siguen siendo ocupados por varones.
Lorena Medel ha sido la mujer que ha estado más cerca de un cargo de poder en el fútbol chileno. A fines de enero de 2020, Sebastián Moreno, quien entonces presidía al balompié nacional, tenía pensado incluirla en su directorio. Su experiencia en Santiago Wanderers constituía una razón suficiente para confiar en su capacidad. La idea estaba a punto de materializarse, pero los clubes opositores a la gestión del ex presidente de Cobresal derribaron el nombramiento. “Hubo un nivel de hostilidad hacia Sebastián Moreno tremendo. Después lo sacaron. Me quedé más con la idea de que era una oposición a Sebastián que a mí. Nunca entendí por qué. Nunca vi nada. No les gustaba, lo querían sacar. Aceptar mi presencia era aceptarlo a él”, rebobina respecto de su fallida llegada a la sede de Peñalolén. Eso sí, descarta el sexismo como variable para explicar la decisión. “No me pareció machismo, aunque no los conocí a todos, pero en varios me di cuenta de que no votarían por mí. No por mí, sino por no aceptar una propuesta de Sebastián”, repasa.
Igualmente, ve poco probable, al menos en el mediano plazo que una mujer encabece al fútbol chileno. “No lo veo cercano, más allá de que el fútbol femenino está creciendo. Quizás eso lleve a sumar directoras a los clubes. Las mujeres tenemos harto que aportar. A lo mejor, somos menos hinchas. Somos más reposadas, pero en los temas más técnicos nos iría fantástico. Mi idea era esa, desarrollar un proyecto que modernizara la industria, incorporar tecnología y mejoras en incidencia. Lamentablemente, no se pudo llevar a cabo”, recuerda. “He visto que clubes grandes, como la U, las han ido sumando. Eso es importante. En la medida en que los equipos las incorporen, habrá más posibilidades de que una de nosotras llegue a liderar al fútbol chileno. Aunque, insisto, habrá que esperar un tiempo para que se materialice algo así”, añade. A modo de conclusión, aporta un dato: “El cupo que dejé en el directorio de Santiago Wanderers no lo llenó una mujer, sino un hombre”. En la escuadra de Valparaíso, hoy hay 10 varones en la dirección.
Carolina Coppo observa el síntoma inglés como algo positivo. “Lo tomo como una noticia súper buena. La circunstancia de que la FA sea dirigida por primera vez por una mujer no es solo buena para la inclusión en el fútbol sino que, además, porque allá también es la primera vez”, evalúa. Como Medel, considera que en Chile habrá que esperar pacientemente una noticia similar. “En Chile esa circunstancia puede producirse en la medida en que los clubes incluyan a mujeres en los directorios. Me preocupa la poca presencia. Eso debe mejorar y da cuenta de que el fútbol sí es una actividad que excluye a las mujeres. Para ser director en la ANFP se requiere haber estado un periodo de tiempo en un club. Por ende, es muy importante que los clubes incluyan mujeres. Es un proceso lento”, diagnostica.
“En Inglaterra se da una situación distinta. (Hewitt) Es una mujer súper profesional, muy preparada. Ella no viene del mundo del fútbol. Está ahí por su experiencia, su destreza en los negocios”, puntualiza. Y prosigue: “Inglaterra es la cuna del fútbol y puede ser un ejemplo para todos los países. Veo a Chile preparado culturalmente para tener una presidenta en la ANFP. Si tuvimos una Presidenta de la República no existe ningún cargo que no pueda desarrollar una mujer”, enfatiza. Coppo reconoce que ha sido invitada a integrar el directorio de Quilín. “¿Quién era el presidente? Da lo mismo. Siempre fui bien recibida, bien evaluada. Tenía que renunciar a la U para ser directora de la ANFP. No era el momento adecuado”. recuerda. Incluso abre la puerta a una hipotética asunción al cargo más alto del balompié nacional. “No es algo que esté pensando en este momento, pero no me niego a ser presidenta algún día. Tengo las ganas y la experiencia de hacer cosas buenas por el fútbol. Tampoco descarto trabajar en la Conmebol o en la FIFA”, reluce.
Coppo observa una evolución cultural favorable a la irrupción femenina. “Desde que asumí, se ha ido avanzando bastante. Las mujeres antes no se podían acercar a los jugadores porque éramos consideradas ‘yeta’, símbolo de la mala suerte, una cosa bien rara. Los jugadores son súper superticiosos y cabaleros. Yo misma me vi expuesta a eso, Recién cuando sentí que los jugadores no se incomodaban, empecé a acercarme un poco más”, repasa.
Como la wanderina Medel, la dirigenta de los estudiantiles descarta alguna conducta machista en su experiencia en el fútbol, aunque, quizás insconscientemente, la deja entrever. “Con los dirigentes nunca he vivido algún acto machista. Pero cuando me designaron hubo más de una persona que me preguntó si yo sabía de fútbol. Presumo que a un hombre no le harían esa pregunta. Con es un hombre se da por hecho que sabe. De la mujer se duda”, confiesa.
La curicana Fresia Ramírez reconoce el buen trato que ha recibido desde que fue invitada a trabajar por el club de sus amores. “Somos ocho directores y he tenido muy buena aceptación. Fueron ellos los que me invitaron a ser directora. Como iba a todas las reuniones y partidos y seguía al equipo a todos lados, me pidieron serlo, hace dos o tres años. Después me encargaron el fútbol femenino. Ahí trabajo con Marcelo Cisternas, Gisselle Muñoz y Eugenio Lecaros- Hemos conformado un buen equipo y la idea inicial es hacer crecer la rama”, dice la funcionaria pública, madre de dos hijos y abuela de dos nietas.
La mención familiar no es casual. Es esa faceta la que Ramírez intenta trasladar a s función dirigencial. “Los trato con mucho cariño y recibo lo mismo. Respeto mucho el género. Con los futbolistas estuve presente cuando pasó lo del Covid. Hablé mucho con ellos y lo sigo haciendo. Cuando voy a los entrenamientos son muy amables conmigo. Todos me dicen tía. También hablo bastante con Martín Palermo. Tenemos una relación bien cordial. Jamás me han he0cho sentir extraña. Todos felices con que esté en el club”, revela.
Sin embargo, en su opinión, aún queda bastante camino por recorrer para que una mujer pueda hacerse cargo del fútbol chileno, como sucederá en Inglaterra. “Es posible, pero noto que puede haber una cierta reticencia de parte de los presidentes. Ahora, por ejemplo, no hay ninguna presidenta de un club. El hombre lo hace bien, pero la mujer aportaría mucho conocimiento también. Y una mirada distinta, con una sensibilidad diferente. Sería muy bueno, pero lo veo lejano”, sostiene. Esa ruta, cree, implica un aprendizaje más profundo. “Yo, en lo personal, no me sentiría preparada para llevar un cargo tan importante, pero es muy bueno que vayamos ocupando espacios, de forma paulatina”, dice.
Los hombres, en tanto, abren la puerta a una irrupción que les parece inevitable y natural. “Sí, ¿por qué no? Es perfectamente posible. Las mujeres han ido tomando roles importantes en el fútbol. Hay directorios que las incluyen. Nuestra gerenta general es mujer, Natalia, mi hermana. Ha habido presidentas de clubes también. No sería extraño. Es la evolución natural que irá teniendo la participación de las mujeres en el fútbol”, sostiene Lorenzo Antillo, presidente de Audax Italiano. En su club hay una directora: Carolina Compte.
El timonel floridano da fe de que en la fallida nominación de Lorena Medel como directora de la ANFP influyeron factores políticos. “Moreno nunca le avisó nada a nadie. Ahí estuvo el problema. Lorena es una persona muy capacitada, que trabajó con Nicolás Ibáñez en Santiago Wanderers. Nunca fue nada contra ella. Hubiera sido un aporte”, establece. “Ojalá se nombren más, capacidad tienen de sobra”, declara.