Hasta última hora estuvo en duda la participación de Gabriel Boric en la celebración de los cuatro años de su partido, Convergencia Social (CS), la tarde del sábado pasado en calle Esmeralda -frente a la casona patrimonial que será la nueva sede de esta colectividad y de Revolución Democrática (RD) y que por estos días se encuentra en proceso de amoblado-.

En medio de la crisis sanitaria por la explosiva alza del virus sincicial, la presencia del Presidente en el festejo -en el que participaron los cantantes Vicente Cifuentes y Zaturno y la comediante Paloma Salas- podía ser mal vista y criticada -señalan desde CS-, tal como lo haría esa misma noche José Antonio Kast en Twitter.

Pero el Mandatario tenía un mensaje importante que dar a los tres partidos que hoy conforman el Frente Amplio -CS, RD y Comunes- y ése era el momento y lugar oportuno para hacerlo.

Minutos antes de las 19 horas, Boric llegó al acto junto a Irina Karamanos -quien sería la encargada de soplar las velas de la torta- y recorrieron juntos -con sensación de felicidad y orgullo, cuentan quienes los acompañaron- el inmueble que albergará próximamente a las dos principales colectividades de su coalición original.

Cuando ya habían hablado Araceli Farías, secretaria general de RD; Irací Hassler, alcaldesa de Santiago; Paulina Vodanovic, presidenta del PS, la dirigenta comunista María Eugenia Puelma y la ministra Antonia Orellana -todas ellas llamando a la unidad de la izquierda para enfrentar el avance de la “ultraderecha”- el Jefe de Estado subió al escenario.

Irina Karamanos apagó esa noche las velas de la torta de Convergencia Social.

Tras leer el poema Misión de Cecilia Vicuña y en un tono más distendido que recordó al Boric candidato, llamó a su partido y al mundo frenteamplista a transitar hacia una sola fuerza política: “Los invitó a que, en este cuarto y ojalá último aniversario de Convergencia Social, les estoy adelantando, pensemos en grande, más allá de nuestra militancia”, provocando una extraña reacción del público, una mezcla de aplausos y un murmullo de sorpresa y rechazo.

“La rebeldía es la esencia de un militante de izquierda y da lo mismo cómo se llame el partido o cuáles sean los colores de sus banderas”, agregó en otro pasar de su discurso, en que reflejó su gran anhelo -señalan una fuente cercana a él- de unificar a toda la centroizquierda, más allá del FA, que sería un primer paso.

El Presidente reabría una discusión en el FA_que en el pasado ha estado marcada por desconfianzas mutuas y diferencias ideológicas, como la fractura que se produjo en noviembre de 2019 tras el apoyo de Boric al acuerdo por una nueva Constitución.

El sociológo Alberto Mayol –exprecandidato presidencial del FA- dice que resulta lógico una fusión para potenciar al bloque de cara a los próximos desafíos electorales, pero esto no resolverá el problema de fondo que, a su juicio, tiene hoy la coalición y que “es el desorden -y poca claridad- en la estructura y construcción de los pactos políticos que selló para llegar al gobierno (con el PC) y luego para gobernar (con el Socialismo Democrático)”.

Para Pierina Ferretti, directora de la Fundación Nodo XXI (originalmente ligada a Comunes), la unión no puede tratarse de una “suma mecánica” ni “meramente electoral”.

“El llamado del Presidente es una oportunidad para discutir el proyecto político que vamos ofrecer al país y analizar cómo estamos leyendo la sociedad chilena y a ese segmento popular que se ha expresado electoralmente en las últimas elecciones con voto obligatorio”, agrega la socióloga.

El académico Carlos Ruiz, ex mentor del FA, también dice que más allá de alianzas políticas para resolver temas concretos de este gobierno, que, a su juicio, son muy legítimas, el tema central debe ser “el contenido, sentido y proyección” del proyecto que irrumpió en nuestra política en 2017.

“La rebeldía es la esencia de un militante de izquierda y da lo mismo cómo se llame el partido o cuáles sean los colores de sus banderas”, dijo Boric en un discurso, en que reflejó su anhelo de unificar a la izquierda más allá del FA, que sería un primer paso.

Ruiz agrega que está pendiente un balance en el FA, que desde su nacimiento ha experimentado sucesivas modificaciones, las cuales no han sido analizadas. “Basta recordar -dice- que en el FA estuvo Pamela Jiles, Jorge Sharp, Vlado Mirosevic, por nombrar a algunos... El FA ha sido un sujeto político de geometría variable, por decirlo de algún modo, donde muchas cosas se han resuelto con calculadoras electorales”.

Qué dicen los tres partidos

En RD no cayó bien la invitación, en momentos que una parte de la tienda siente que Boric ha privilegiado a militantes del Socialismo Democrático por sobre los suyos.

Un dato de la causa, indican, es que ni Giorgio Jackson -el líder natural de la colectividad inscrita en el Servel en 2016- ni otros de sus ministros figuran hoy con la proyección de Camila Vallejo, (PC) y Carolina Tohá (PPD) ni con el protagonismo de “Toti” Orellana y Jeannette Jara (PC).

El presidente de RD, Juan Ignacio Latorre, confiesa que le sorprendió el momento y lugar del llamado de Boric y explica que su partido acordó en marzo -en su congreso estratégico-no abrir esta discusión por ahora y poner todas las energías en gobernar.

“Probablemente el Presidente siente un sentido de urgencia en que se desarrolle este proceso, pero esto es algo que debemos resolver los partidos y no es una decisión que se pueda tomar de la noche a la mañana”, dice el senador.

El presidente de CS, Diego Ibáñez, en cambio, cree que sí es el momento para debatir las diferencias originales, sintetizar la experiencia obtenida estos años y redefinir el “carácter popular” de la coalición (2024 y 2025 estarán marcados por las elecciones municipales, parlamentarias y presidenciales).

“Como Convergencia Social queremos liderar el progresismo en Chile codo a codo con otros partidos más tradicionales y para ello debemos cohesionar al FA”, afirma el diputado, quien cuenta que el 15 y 16 de julio culminarán su congreso con una propuesta para iniciar el camino a la unificación.

Diego Ibáñez, presidente de CS: “Queremos liderar el progresismo en Chile".

Marco Velarde, presidente de Comunes -tercera fuerza del FA- cuenta que este debate siempre ha estado sobre la mesa, pero que hoy toma fuerza porque los tres partidos se han ido “homogenizando cada vez más” al ser parte del gobierno.

“Hoy son más las cosas que nos unen, que las que nos separan y es mucho mejor procesar desde una sola casa política las diferencias e identidades que tenemos”, dice el líder del partido de las diputadas Claudia Mix y Camila Rojas.

El trasfondo del llamado

La solicitud de Boric se da en momentos en que su coalición le ha planteado internamente que debería tomar una postura más comprometida con el programa y más jugada en los gastos, como el cumplimiento de la condonación del CAE.

La respuesta implícita en el llamado del exdiputado -interpretan sus cercanos- es que el FA necesita más fuerza ciudadana para defender el programa y no sólo declaraciones.

El ministro de Educación, Marco Antonio Ávila –presente esa noche en el barrio Bellas Artes junto a sus pares Álvaro Elizalde, Antonia Orellana y Nicolás Grau- dice que es urgente “dar un salto a la unidad” para aumentar la base de apoyo que hoy tiene el FA y que a su juicio ha demostrado ser una fuerza articulada en los territorios, el Parlamento y el gobierno. “Este proceso debe darse de manera reflexiva, pero atendiendo la urgencia de enfrentar unidos la amenaza que se cierne sobre los triunfos conseguidos”, agrega el ministro de RD.

La solicitud de Boric a sumar fuerzas también coincide con la decisión de la Comisión Experta que elaboró el anteproyecto constitucional de fijar un umbral del 5% para que un partido pueda tener representación parlamentaria. Ello y la decisión de hacer en conjunto las elecciones parlamentarias y la segunda vuelta presidencial propician, en teoría, la unión para optimizar resultados.

El PPD, el PR y la DC también analizan formar una federación de partidos.

¿Le estamos hablando a los cabros?

Quienes estuvieron la fría noche del sábado pasado cuentan que el Presidente igualmente buscó remecer las bases frenteamplistas un poco adormecidas tras un año y algunos meses en el poder “movilizando” el debate en torno a un solo partido de la forma lo más transparente posible.

De ahí que esa noche externalizara otra de sus inquietudes -agregan las mismas fuentes-: la pérdida de apoyo entre los jóvenes (ver infografía), grupo etario que fue clave en su triunfo ante Kast en 2021.

El exdirigente estudiantil contó que la noche anterior (viernes 9 de junio), al salir de La Moneda, a eso de las 21:30 horas, se fue caminando por el bandejón central de la Alameda a su casa.

A la altura de Av. República -continuó relatando- se detuvo a conversar con un grupo de estudiantes de Técnico en Mecánica, quienes le comentaron lo cuesta arriba que se les estaba haciendo la vida. “Me quedé pensando camino a mi casa en el barrio Yungay, si es que le estamos hablando a esos cabros que están peleando por salir adelante, que la tienen difícil, que han vivido los embates por la falta de lucas y de protección social y que ven que a sus abuelos que no les alcanza para vivir”. Y remató con un llamado a recuperar el sentido original de la coalición.

Ximena Peralta -vicepresidente de CS- propone mirar hacia atrás y reencantar a los movimientos –feministas, ecologistas, autonomistas, libertarios...- que dieron vida a esta la alianza, para mucho la más exitosa en la historia de Chile

“Los orígenes diversos que tuvimos en el FA explican hoy cómo llegamos hasta acá, mucho más que un sentido de hacia dónde caminamos como proyecto político”.