Unidad Constituyente: Golpeados por el límite a la reelección y otra vez contra el tiempo
Tras varias horas negociando, con almuerzo incluido, el viernes a las 16.30, los secretarios generales de Unidad Constituyente, el bloque político integrado por el PS, PPD, PR, DC, PRO y Ciudadanos, abandonaron la sede del Partido Socialista, en calle París, con rostros de cierta satisfacción.
Esta vez la reunión fue diferente a las anteriores. En la semana se había despejado que la candidatura presidencial del bloque (Paula Narváez, Yasna Provoste y Carlos Maldonado) se resolvería a través de una consulta ciudadana el sábado 21 de agosto y, con ese punto ya despejado, los partidos pudieron entrar de lleno a la negociación de cupos parlamentarios, cuya fecha límite para la inscripción de candidaturas es el lunes 23.
“Avanzamos harto en acercarnos a la meta, que son 183 cupos de candidaturas a diputados para 28 distritos y 36 candidaturas a senadores para la mitad de las regiones del país”, señaló uno de los negociadores, quien precisó que aún no se ponen nombres sobre la mesa, pese a que ya hay varios haciendo campaña y desplegados en terreno para ganar tiempo.
“Estamos trabajando sobre tres propósitos: candidata/o común, plataforma programática y lista parlamentaria única, ahí están puestos los esfuerzos del PS y de los demás partidos”, dice Andrés Santander, secretario general del PS.
A raíz de la reforma constitucional que establece límites a la reelección, aprobada el año pasado, hay 20 diputados históricos de la ex Concertación que no podrán repostular, entre ellos, Rodrigo González y Tucapel Jiménez, del PPD; Manuel Monsalve y Marcelo Schilling, del PS, y José Miguel Ortiz y Víctor Torres, de la DC, entre otros.
Por ello, varios legisladores socialistas buscan saltar al Senado, como Juan Luis Castro (PS) en la VI Región y Fidel Espinoza (PS) en la X Región. Otros tantos socialistas se retiran de la política.
En tanto, pese a que podrían seguir como diputados, Maya Fernández y Leonardo Soto se inscribieron como precandidatos senatoriales para reemplazar a Carlos Montes en la Región Metropolitana.
En el PPD, en el cupo senatorial que deja Guido Girardi en la RM suena fuerte Francisco Vidal, ya que Heraldo Muñoz, aún golpeado por su retiro de las primarias, no tiene planes electorales.
Hay dos exministros de Michelle Bachelet: Rodrigo Peñailillo busca competir al Senado por la VIII Región en un cupo del PPD y Helia Molina quiere ocupar el asiento que deja Cristina Girardi en la Cámara Baja.
Sin embargo, la lógica con que asume hoy la nueva presidenta del partido, Natalia Piergentili, es renovar a la colectividad con rostros frescos.
El domingo pasado la DC cerró el plazo para la inscripción de precandidaturas, ahora ellas deben ser definidas por el consejo nacional y luego ratificadas por la junta nacional del sábado 21.
Entre los postulantes se repiten exministros como Laura Albornoz y Alberto Undurraga (Maipú), que buscan ser diputados.
Una de las sorpresas es la inscripción de Eugenio Ortega Frei como precandidato senatorial en la RM. Y, al igual que los socialistas, hay varios diputados que buscan pasar a la Cámara Alta, entre ellos, Gabriel Silber y Jorge Sabag en el Bíobío, Matías Walker en el cupo que dejará Jorge Pizarro en Coquimbo e Iván Flores en la Región de Los Ríos.
El PR, en tanto, entre el tesón de Carlos Maldonado por ser candidato presidencial, para algunos radicales, el timonel se ha olvidado del objetivo central del partido: lograr un 5% de votos o cuatro parlamentarios en ocho regiones o tres contiguas para seguir como partido legal.
“Nuestro propósito es mantener en la Cámara el buen resultado del 2017 (ocho diputados) y recuperar presencia en el Senado, donde nunca debimos ausentarnos”, señala Maldonado.
Las alternativas radicales para volver al Senado serían Marcela Hernando (Antofagasta), José Antonio Gómez (O’Higgins), José Pérez (Biobío) y Karim Bianchi (Magallanes).
El PRO partió pidiendo cupos a senadores en la II, IV y VII; mientras Ciudadanos sólo algunos cupos para diputados.
Camilo Lagos, presidente del PRO, en tanto, señala que en “el el partido apuesta a mantener sus dos representantes actuales en el Senado, con la reelección del senador Alejandro Guillier y una segunda carta competitiva”.
En la Cámara, agrega Lagos, esperan al menos elegir cuatro diputados. “Se está conformando una lista con 28 precandidaturas, entre ellas, Jaime Coloma, Tamara Casado, Alex Matute, Jonatan Díaz, Mónica Sánchez, Christian Pino y Rodrigo Sepúlveda”.
Chile Vamos: A salvar la estantería, tratar de fichar nombres “nuevos” y enmendar errores
La derecha oficialista tiene hoy 74 diputados entre militantes y renunciados y 19 senadores. De los primeros, 11 no pueden repostular (ocho UDI, tres RN) por la ley que impide repetirse el plato por tercera vez consecutiva. Eso les deja con un forado de -al menos- igual número de escaños por defender. Sus partidos bregan por cerrar un scouting que ya pintaba difícil hace meses y más después de tanta elección.
El temor a sufrir bajas en la próxima versión de la Cámara persiste tras la serie de dolorosas pero -dicen- aleccionadoras derrotas.
Chile Vamos también defiende en esta vuelta siete cupos senatoriales, en territorios distintos y más complejos que la pasada. La Región Metropolitana ahora es una sola circunscripción, más vasta y con campañas mucho más costosas de financiar.
Hay en el sector cierta convicción de que para salvar la estantería parlamentaria deben cambiar drásticamente el armado de plantillas. Casi nadie cree que se termine con el cuoteo, el “quien tiene un distrito, lo mantiene” y otras prácticas. Pero sí -afirman- que ya no sirve “postular a hijos o parientes de” (varios fueron vencidos en la megaelección del 15 y 16 de junio), a “los mismos de siempre”, o el viejo diseño de inscribir a cabezas de serie y otros nombres de relleno en los listados.
“Tienen que competir todos nomás y que tengan posibilidades de verdad”, insisten en el bloque. Hay voces que, además, piden dar más espacio a candidaturas independientes (para amortiguar el efecto castigo a los partidos), de buscar en “los territorios, organizaciones sociales”, o incluso tratar de replicar -guardando las proporciones- lo que hizo la Lista del Pueblo en la Constituyente. Pablo Longueira, por ejemplo, pidió “armar la Lista de Clase Media” en una columna.
A la coalición que se acostumbra a su candidato presidencial único (Sebastián Sichel le quiere cambiar el nombre) le queda -como a todos- 22 días para resolver su versión de este quebradero de cabeza.
“Está la voluntad de renovar caras..., pero queda muy poco tiempo”, observan varios dirigentes. Otros -en RN y la UDI- hacen ver que ese trabajo debió comenzar mucho antes. Siguen buscando nombres “nuevos” y nada hay cerrado aún, porque, como siempre, se seguirá hasta última hora.
Y está el lío con José Antonio Kast. Lo de ir en una sola lista parlamentaria se da casi por desahuciado -pero ir en dos arriesga que el bloque pierda escaños- y más la idea de que él se baje de la presidencial (en los próximos días lanzaría su programa de campaña).
También cuesta dar con nombres y convencerlos. Crítica es la senatorial por Santiago, que elige cinco senadores y donde el bloque ha de matricular seis nombres. RN (que hoy tiene dos escaños ahí) repostulará a Manuel José Ossandón -su cuadro judicial no le ha hecho gran mella, leen en los otros partidos- y también lo haría Marcela Sabat, defendiendo el cupo que le legó el canciller Andrés Allamand.
El drama del casting metropolitano lo tiene la UDI, que fue desalojada de ahí la última vez. Sus dirigentes buscan y encuestan a “varios nombres” y que -ojalá, dicen- sean de un perfil “fuera de la caja”. También han tratado infructuosamente de convencer (y Evópoli) a Jaime Mañalich; el exministro dijo que no y ha sugerido probar con jóvenes.
Se ha hablado de la vicepresidenta María José Hoffmann, quien no puede ir de nuevo a diputada. Otra carta que han medido es el diputado Jorge Alessandri; aún no lo ha decidido. Pero para la plantilla UDI le falta una acompañante y quieren una mujer independiente. Republicanos llevaría a Rojo Edwards (fue a gobernador y la derecha quedó fuera del balotaje).
Hasta hace poco, Evópoli tenía a Luciano Cruz-Coke -uno de sus seis diputados- postulando por la RM al Senado. Pero ahora mira también a Ñuble, circunscripción que debuta en esta elección (antes era parte de Biobío) y donde se eligen solo dos escaños.
Ahí habrá pugna interna UDI. Su exjefa Jacqueline van Rysselberghe ya está haciendo campaña por Ñuble, pero en la mesa de Javier Macaya (bando rival de ella) hablan de dirimir con encuestas entre JVR y el vicepresidente Gustavo Sanhueza. Por RN aspira el diputado Frank Sauerbaum.
Macaya va al Senado por O’Higgins (elige tres), pero sus rivales internos -Sichel arrasó ahí con Joaquín Lavín- quieren que también vaya el saliente diputado Ramón Barros.
En Los Ríos (tres senadores) la UDI teme que Ena von Baer encare peligro si se inscribe la RN María José Gatica, quien quedó instalada tras perder la segunda vuelta de gobernadores en esa zona.
En Los Lagos (elige tres) el UDI Iván Moreira se las vería con el diputado RN Alejandro Santana, quien iría en collera con Carlos Ignacio Kuschel.
Sichel algo dirá sobre esta plantilla y ya avisó que apoyará campañas según cómo voten el cuarto retiro. Su comando aún no abre juego. En los partidos dicen que le abrirán cupos sin trabas, pero los que les queden disponibles.
PC y Frente Amplio: La prueba de fuego del pacto que tambalea y el acecho de la Lista del Pueblo
Aún golpeados por el nocaut propinado por Gabriel Boric a Daniel Jadue en las primarias, el Partido Comunista se encuentra en plenas negociaciones con el Frente Amplio (Revolución Democrática, Convergencia Social y Comunes) para definir si enfrentan juntos –o separados- las elecciones parlamentarias del domingo 21 de noviembre.
Los comunistas están divididos entre quienes son partidarios de llevar una sola lista parlamentaria, que incluya a Chile Digno (coalición conformada por el PC, la Federación Regionalista Verde Social y el Partido Igualdad, entre otros movimientos) al Frente Amplio, y si es posible abrir las puertas a la Lista del Pueblo, que se encuentra en pleno proceso de búsqueda de candidatos en todo Chile y le respira en el oído al PC.
Por ir en una sola lista está todo el FA (ya adoptaron esa resolución), y en el PC su presidente, Guillermo Teillier, y dirigentes históricos como Juan Andrés Lagos.
Pero al otro lado hay un grupo no menor de dirigentes del ala más dura del PC, que suman fuerzas con Igualdad y otros movimientos que no simpatizan con la candidatura de Boric y son partidarios de ir separados del FA para tener la posibilidad de sumarse a una eventual candidatura presidencial de la Lista del Pueblo.
El FRVS también se inclina por dos listas, pero siempre que ambas comprometan su respaldo a Boric. Uno de sus integrantes señala que yendo a dos bandas tienen más espacio para sobrevivir legalmente. Hoy existen en 12 regiones y en 2017 eligieron cuatro diputados, pero ahora postularían al Senado los diputados Alejandra Sepúlveda y Esteban Velásquez.
Las tratativas parlamentarias se tensionaron esta semana a raíz del impasse que hubo entre el PC y el FA en el marco de la elección de las vicepresidencias de la Convención Constituyente.
La convencional constituyente Bárbara Sepúlveda (PC), quien no logró todos los patrocinios del FA, advirtió que había que “tener este antecedente” a la hora de analizar “una lista parlamentaria única”.
“Hay un traspié en las relaciones con el Frente Amplio… No nos deja muy bien parados en cuanto a cómo seguir adelante las conversaciones”, reconoció Teillier en el diario El Siglo.
“No es el momento de cálculos electorales individuales”, advierte Alondra Arellano, presidenta de Convergencia Social, quien afirma que llevar una sola lista será “una señal potente” al país. “Como Frente Amplio tenemos la responsabilidad de conquistar un gobierno y, a través de una sola lista parlamentaria, tener un Congreso que nos permita implementar las transformaciones que el país necesita”.
Sebastián Depolo, dirigente de RD, agrega: “Lo importante es conjugar la unidad política de Apruebo Dignidad como bancada que dé soporte consistente a un gobierno de transformaciones liderado por Gabriel. Por eso estamos por una lista única del bloque. Creemos que, además, da mayor electividad tanto en diputaciones como en senadores”.
Aparte de este nudo, el PC tiene una serie de otros problemas que resolver en las próximas semanas, por de pronto, mantener o superar sus actuales nueve diputados.
Teillier y Carmen Hertz buscarían llegar al Senado, Camila Vallejo -quien en 2017 logró una gran votación- ha señalado que no repostulará y Hugo Gutiérrez renunció para ser constituyente. El problema para el partido de la hoz y el martillo es que la nueva camada de dirigentes jóvenes, en su mayoría mujeres, optó por ir en las municipales y constituyentes. Por ello, están en plena búsqueda de rostros nuevos, ojalá independientes, que representen al partido.
La otra gran incógnita es si abrirán o no las puertas a los candidatos de la Lista del Pueblo que, por ahora, necesitan el patrocinio de un partido. El grupo, que irrumpió en las elecciones constituyentes, se encuentra en pleno proceso de inscripción de candidatos en todo el país a través de una plataforma digital y con una fuerte campaña en redes sociales para que se dé celeridad al proyecto de ley que permite la conformación de listas de independientes y que define una composición paritaria y con escaños reservados para pueblos indígenas, de cara al próximo ciclo parlamentario.
En la Lista del Pueblo señalan que irán informando los nombre de los postulantes en la medida que éstos sean ratificados por sus bases, tal como lo hicieron esta semana con Fabiola Campillai, una de las víctimas emblemáticas del estallido social, quien busca ser candidata al Senado por la RM. Y que el viernes 20 anunciarán a sus seleccionados.
La mayoría de los parlamentarios del FA irán a la reelección, salvo Giorgio Jackson, y ya hay varias cartas corriendo con altas probabilidades de ser ratificadas, como Karina Oliva, quien busca repetir la buena votación (más de 700 mil sufragios) obtenida como candidata a gobernadora metropolitana, pero esta vez como candidata a senadora.
En RD también se evalúa la posibilidad de que Miguel Crispi esta vez compita al Senado.