A una semana de que se realicen las elecciones municipales y autonómicas en España, el próximo 28 de mayo, la batalla política en el país se encuentra en un punto álgido. Así, los ciudadanos de 12 comunidades autónomas no solo tendrán que escoger la papeleta para elegir a su alcalde, sino que tendrán que decidir qué partido quieren que gobierne en su región. Las encuestas vaticinan un retroceso de la izquierda en todo el país, mientras que el Partido Popular (PP) necesitará contar con Vox si quiere recuperar o mantener algunos gobiernos autonómicos.

Además, en el país se llevarán a cabo elecciones municipales en un total de 8.131 ayuntamientos, que dibujarán el nuevo mapa electoral en España. Están llamados a votar 35,1 millones de electores para el 28M.

Si bien se trata de comicios locales, para los partidos la votación es una suerte de termómetro para las elecciones generales de diciembre, por lo que las colectividades deben conseguir una buena posición de cara a la pelea de fin de año, que se espera determine un nuevo tablero político.

El 28M será la primera vez que se enfrentarán el presidente español y secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez, y el presidente del PP y líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo.

El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, habla con los periodistas después de reunirse con Joe Biden en la Casa Blanca, en Washington, el 12 de mayo de 2023. Foto: Reuters

Previo al inicio de la campaña a mediados de mes, Sánchez hizo de la vivienda una “causa nacional” y puso al centro de su objetivo al voto joven. Feijóo, por su parte, ha criticado los constantes anuncios del presidente y se plantea como objetivo principal “derogar el sanchismo”.

A continuación, las claves para entender estos comicios.

El 28M y las generales

El voto de las municipales suele ser un buen termómetro sobre las preferencias electorales de un país y, aunque no siempre supone un giro en la tendencia, casi siempre coincide, indicó el portal de RTVE. Desde el año 1995 quien gana los comicios locales consiguió el triunfo en las generales, con excepción de 2007, cuando el PP superó en número de votos al PSOE (pero no de concejales) y posteriormente, en las generales de 2008, el PSOE de José Luis Rodríguez Zapatero obtuvo el triunfo. En las últimas elecciones de 2011, 2015 y 2019 sí se ha cumplido el patrón y quien ha ganado los comicios municipales ha llegado a la victoria en las posteriores generales.

Lo que se juega el PSOE

Respecto a las elecciones autonómicas, el PSOE debe defender nueve de las 12 comunidades. Actualmente gobiernan solo en Asturias, Castilla-La Mancha y Extremadura y están en coalición en seis gobiernos regionales, como Aragón, Canarias, Comunidad Valenciana, Baleares, Navarra y La Rioja. También es el partido con mayor poder local, porque tienen 22.341 concejales repartidos por el país, frente a los 20.336 del PP.

Pedro Sánchez, Nadia Calvino y Yolanda Díaz reaccionan durante una sesión del Parlamento en Madrid, España. Foto: Reuters

El objetivo del PSOE es volver a ser el partido más votado en municipales y mantener grandes alcaldías, como Sevilla o Valencia, y lograr alguna más, como la de Barcelona, donde cerrará Sánchez la campaña.

El diario El País explicó que el partido diseñó una campaña de anuncios constantes, centrada en la economía y en la gestión del gobierno. En temas de contenido real: vivienda, educación, salud, agricultura, pensiones.

Según el promedio de encuestas elaborado por RTVE, el PSOE ganaría de nuevo en las autonómicas de Asturias, Canarias, Castilla-La Mancha y Extremadura, pero ya no sería, según estos sondeos, la fuerza más votada en Aragón, Baleares, Comunidad Valenciana y La Rioja, que le arrebataría el PP como partido más votado.

Las perspectivas para el PP

El objetivo del partido es revertir los resultados de 2019, cuando el PSOE sacó al PP 1,5 millones de votos en los comicios locales. Los populares también aspiran a gobernar en solitario en Madrid y Murcia y a lograr otras autonomías, como La Rioja, Aragón, Extremadura o Castilla-La Mancha.

Aunque su principal meta es recuperar el gobierno en la región de Valencia, que se ha transformado en una suerte de joya de la corona. Tanto Feijóo como Sánchez realizaron actos en la región y las encuestas dicen que hay un empate técnico entre el PP y el PSOE.

Alberto Núñez Feijóo, presidente del Partido Popular, en una sesión del Congreso.

En cuanto al mensaje, los populares apuestan por “derogar el sanchismo” y han recuperado la economía como eje central de la campaña. Usarán el alza de las hipotecas y la inflación como principales argumentos para desmontar el “triunfalismo” económico del gobierno. Las encuestas solo le auguran una mayoría absoluta a Isabel Díaz Ayuso en el principal bastión del PP, la Comunidad de Madrid.

El PP quiere mantener la Comunidad de Madrid y Región de Murcia y ganar terreno al PSOE. Los sondeos dicen que podría ser la lista más votada en Aragón, Baleares, Comunidad Valenciana y La Rioja y también en Cantabria, donde podría arrebatarle la primera posición al PRC.

El factor EH Bildu

A comienzos de mayo, el Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) denunció que 44 candidatos que figuran en las más de 300 listas de la coalición independentista EH Bildu en el País Vasco y Navarra para las elecciones, tanto de las autonomías como de las alcaldías, fueron condenados por pertenencia y colaboración con ETA. Siete de ellos fueron condenados por asesinato. En un artículo, el diario El País señaló que este hecho rompió la campaña de cara a las elecciones en dos. Esto porque “la campaña de la derecha ya solo tiene a Bildu como único protagonista. La de la izquierda trata de volver a su carril, el de la economía”.

“No hay ninguna duda de que el PP estirará el tema Bildu porque cree que con él puede lograr unificar y movilizar el voto conservador, pero también desgastar al PSOE en el voto más centrado, el más limítrofe”, escribió el periódico.

El factor Bildu abrió una herida al interior del PP, debido a que tensó la relación entre la presidenta de la Comunidad de Madrid, Díaz Ayuso, y el líder del partido, Feijóo, ya que la dirigenta regional ha reclamado en público que se inste la ilegalización de la coalición vasca, una propuesta similar que ha hecho Vox. Algo que el liderazgo del partido se niega a hacer, según dijeron fuentes al portal El Diario.

El rol de Vox

El partido de Santiago Abascal concurre a estos comicios como un partido consolidado, debido a que en 2019 consiguió 45 diputados autonómicos en ocho parlamentos (Aragón, Asturias, Islas Baleares, Cantabria, Comunidad de Madrid, Comunidad Valenciana, Región de Murcia y Castilla y León), además de en Ceuta y Melilla. Así, busca aumentar su representación en alcaldías y parlamentos autonómicos y ser determinante para desbancar a la izquierda del poder y formar gobiernos conjuntos con el PP, aunque ya advirtieron a los populares que sus votos no saldrán gratis.

Santiago Abascal, líder del partido de extrema derecha Vox, habla durante una sesión en el Parlamento en Madrid, España, el 30 de junio de 2021. Foto: Reuters

El partido de extrema derecha consiguió además el año pasado su mayor hito, entrar en su primer gobierno de coalición con el PP en Castilla y León, y su mayor éxito en cuanto a número de escaños en un parlamento autonómico, los 14 de Andalucía.

El objetivo de Podemos

Podemos e IU van unidos en coalición electoral en todas las comunidades, menos en Aragón y Asturias. El partido de Ione Belarra defiende en estas elecciones gobiernos conjuntos con el PSOE en Aragón, la Comunidad Valenciana, Navarra, La Rioja y en las islas Baleares y Canarias. Su objetivo es mantener o aumentar ese poder territorial y obtener representación en algunas regiones donde no la tiene, como Cantabria, Castilla-La Mancha y en Ceuta y Melilla.

Según los sondeos, Unidas Podemos perdería escaños en todas las comunidades, menos en Extremadura, la Región de Murcia y Navarra, donde se mantendría estable o ganaría algún escaño.

Sobrevivencia de Ciudadanos

Estos comicios pueden marcar el fin de la colectividad de centroderecha. En 2019, Ciudadanos consiguió representación en todas las comunidades y solo se quedó fuera del parlamento en Ceuta. Las malas perspectivas que dan los sondeos al partido fundado por Albert Rivera pueden cambiar la correlación de fuerzas, ya que buena parte de su voto sería absorbido por el PP.

El rol de las mujeres

Menos de cuatro de cada 10 cabezas de lista en las elecciones autonómicas que se celebrarán el próximo 28 de mayo son mujeres, indicó el portal 20 Minutos. Los candidatos propuestos por los partidos en las 12 comunidades y las dos ciudades autónomas en las que sus ciudadanos serán llamados a las urnas son, en su mayoría, hombres. Apenas cuatro comunidades -Canarias, Navarra, Cantabria y Murcia- reflejan cierta paridad en sus listas, mientras hay otros territorios en los que la representación femenina no supera siquiera el 30%.

Isabel Díaz Ayuso, la candidata del PP a la reelección en la Comunidad de Madrid, participa en la ceremonia de apertura de la campaña del partido, el 11 de mayo pasado.

Entre las candidatas más destacadas está la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que se presenta a la reelección por el PP.

Mientras que la vicepresidenta segunda del gobierno, Yolanda Díaz, del partido Sumar -que no participa en estos comicios autonómicos y municipales- ha dicho que “ayudará en todo lo que está en su mano” a la izquierda alternativa al PSOE en la campaña, es decir a Podemos y a los aliados de su colectividad. En esta línea, la alcaldesa de Barcelona y candidata a la reelección por BComú, Ada Colau, será la candidata a la que más apoye Díaz, en la búsqueda de respaldo a la izquierda del PSOE.