Hay una idea que el ministro de Ciencias y Tecnología, Andrés Couve, deja instalada desde el comienzo de esta entrevista –realizada remotamente, para respetar el distanciamiento social-: “Estamos frente a un escenario incierto y necesitamos tener más conocimiento”. Couve, quien está a cargo de una cartera creada hace 18 meses, agrega que hay muchas preguntas para las que aún no existen respuestas y advierte: “No es la primera ni será la última vez que enfrentemos algo así, por lo tanto tenemos que investigar más y desarrollar soluciones innovadoras a este tipo de pandemias”.

-Esta pandemia puso a prueba la capacidad del Estado de tomar decisiones en base a evidencia científica. ¿Cómo ha respondido a eso?

Esta pandemia es un desafío global, no sólo de Chile. Nosotros recibimos el primer contagio después de China y de Europa, por lo tanto, pudimos aprender y en esa línea hemos tomado medidas como cierre de colegios, distanciamiento social y cierre de fronteras. Las medidas se han tomado de manera oportuna, se van a seguir tomando y tendremos tiempo en un futuro cercano para ver cómo han impactado en la propagación de esta enfermedad.

-Ha habido señales confusas de parte de la autoridad, como en el uso de mascarillas, la suspensión de clases o la inmunidad de quienes se recuperan del virus. ¿Cuánta ciencia hay detrás de los anuncios y medidas del Gobierno?

Nosotros estamos trabajando permanentemente con el Ministerio de Salud, el Presidente está en permanente contacto con científicos y con expertos, y la ciencia está hoy en la mesa de toma de decisiones en Chile. Eso es una situación nueva. Hay un comité interministerial de emergencia y nosotros estamos sentados en esa mesa promoviendo las acciones que le son propias a un ministerio de ciencia y que son distintas a las del Ministerio de Salud, que es quien hoy está liderando.

-¿Es usted quien le hace llegar la evidencia científica al Presidente?

-Estamos trabajando con equipos dentro del ministerio, donde tenemos las tareas bien distribuidas. Algunos temas los estoy liderando yo; otros, la subsecretaria, y también trabajando con algunas de nuestras divisiones y oficinas para que esa información se canalice hacia la toma de decisiones.

-La comunidad científica está permanentemente pidiéndole a usted que el gobierno tome medidas más drásticas. ¿Ha transmitido esa urgencia al Presidente?

-Nosotros hemos tomado medidas oportunamente. En relación al brote de la enfermedad en cada país, cerramos las fronteras y los colegios antes que los países a los europeos, hemos decretado (el miércoles) el Estado de Excepción que amplía las facultades del Presidente y que se van a orientar a cuidar a la población. Estamos diagnosticando y aislando a los pacientes que están diagnosticados positivamente, y esas son las dos medidas que más efectivamente han combatido esta pandemia.

¿Qué respuesta le ha dado usted a la comunidad científica?

Que esas medidas se han tomado a tiempo y que siempre hay espacios para tener nuevas medidas.

¿Y los científicos se quedan tranquilos con eso?

Yo creo que estamos haciendo todo lo posible desde el gobierno para poder implementar medidas que sean efectivas. Necesitamos que no sólo la comunidad científica, sino que la ciudadanía en general también contribuya con responsabilidad y compromiso para poder complementar estas medidas con las conductas de cada uno de nosotros.

¿Cómo se ha dado la tensión entre la evidencia científica y la postura más economicista dentro del gobierno en la toma de decisiones?

Primero, hay que entender que esta es una crisis global y, segundo, que va a durar bastante tiempo. Hemos hablado que el brote puede durar 8 o 12 semanas, pero vamos a tener que estar muy atentos por el coronavirus todo el año. Por lo tanto, las medidas que tomemos tienen que ser sostenibles y cuando uno habla de medidas sostenibles entran en juego una serie de cosas que tienen que ver con cómo vamos a hacer que las ciudades funcionen, con abastecimiento y con trabajo. Una crisis de esta naturaleza y dimensiones necesita soluciones integrales y eso estamos tratando de impulsar desde el gobierno.

-¿Usted se siente escuchado, ministro?

-Estamos sentados en la mesa donde se toman las decisiones. Hemos llevado información muy relevante. Hoy estamos complementando las capacidades diagnósticas que tiene el ISP, porque estamos seguros de que aumentar esa capacidad y aislar a las personas que están contagiadas es una forma efectiva de combatir esta crisis, y esa es una iniciativa del Ministerio de Ciencias que estamos llevando adelante con el Ministerio de Salud, y son el tipo de cosas que hemos planteado en ese comité interministerial de emergencia y que han sido escuchadas.

-Tratándose de una pandemia desconocida, que genera incertidumbre, fake news y que requiere certeza científica para transmitir tranquilidad, ¿debería tener usted un rol más protagónico?

-Estoy trabajando con todo el compromiso, no sólo yo, todo el equipo en el Ministerio de Ciencias, porque la oportunidad que tenemos hoy de participar en una mesa interministerial donde se toman las decisiones es inédito en Chile, no se había hecho nunca porque no existía un Ministerio de Ciencias. Estamos utilizando esa oportunidad para poner la ciencia en la toma de decisiones.

-Desde el mundo científico se le critica que, siendo un excelente científico, le falta hacer más política. ¿Comparte esta crítica?

-La ciencia acaba de llegar a la política en Chile, estamos en un proceso de aprendizaje donde tenemos que incorporar evidencia científica en la toma de decisiones políticas. A eso estamos dedicados. Estamos integrando un nuevo elemento en el Estado. Por supuesto que van a haber periodos de aprendizaje, pero estamos trabajando para lograr el objetivo de llevar la evidencia científica a la toma de decisiones políticas, que acá lo consideramos un objetivo central.

-¿Se ha sentido cómodo en los consejos de gabinete?

-Es una situación nueva para todos, no solo para mí, y no solo en el gabinete presidencial con todos los ministros. Esto también se replica a nivel de regiones donde por primera vez tenemos a una seremi sentada en un gabinete regional. Tenemos que instalar un ministerio pero además se tienen que generar las capacidades en el entorno para que ese Ministerio de Ciencias pueda llevar adelante su tarea y eso es un periodo de ajuste donde cambian las conversaciones, las relaciones y ese es el momento que estamos viviendo hoy en Chile.

-¿Han cambiado las conversaciones?

-En la COP25, el Presidente nos encomendó que la ciencia estuviera al centro del debate. Eso lo logramos con un comité científico que trabajó durante todo el año informando a los ministerios de Ciencias y de Medio Ambiente, que entregó recomendaciones de política pública y que se va a incorporar en la nueva ley marco de cambio climático, estableciendo una instancia permanente de asesoría científica. Ahí hay un ejemplo concreto de cómo durante este año esas conversaciones han cambiado.

Instalar la ciencia en el Estado

Uno de los pilares en el plan para impulsar el uso de evidencia científica en la toma de decisiones en política pública es la creación de la oficina Ciencia y Gobierno, que está en etapa de instalación y que liderará el geógrafo Leonardo Muñoz. Couve explica que la idea de esta oficina es tomar temas de relevancia, articularlos con la comunidad científica para obtener recomendaciones y luego que esas sugerencias se transformen en política pública. El modelo consiste en replicar el trabajo y el funcionamiento del Comité Científico COP25, en otras materias y con otros ministerios.

-¿Quién definirá en qué temas se involucrará esta nueva oficina?

-Ese es un tema importante. La investigación en Chile ha tenido un déficit de orientaciones estratégicas, por eso estamos trabajando en cómo podemos priorizar algunas opciones estratégicas. Tenemos que desarrollar algunas metodologías para que nos permitan trazar rutas de largo plazo. Para eso también estamos montando esta oficina complementaria, que la llamamos “oficina Futuro”, que tiene como objetivo anticipar y priorizar cómo vamos a abordar ciertas opciones estratégicas y no otras.

-¿Como cuáles?

-Como inteligencia artificial, por ejemplo.

-¿Las recomendaciones serán vinculantes?

-Las recomendaciones científicas las dará la comunidad científica y lo que hará esta oficina es transformarlas en política pública. Nosotros estamos totalmente convencidos de que la mejor manera de que esa participación sea vinculante es a través de procesos transparentes y que sean colaborativos con la comunidad. Ese es el mecanismo para darle legitimidad y proyectarla en el largo plazo porque generan adhesión.

-¿Esta oficina significa que la ciencia se instala taxativamente en la política pública?

-Estamos frente a una gran oportunidad que es incorporar la evidencia en la toma de decisiones, ese es el objetivo más estratégico del Ministerio de Ciencias.

-¿Tenemos hoy una economía del conocimiento?

-Tenemos una muy buena capacidad científica, una comunidad pequeña pero que es productiva y que produce de gran calidad. Sin embargo, está distanciada del sector productivo. Uno de los objetivos de este ministerio es acercar esa investigación científica al sector productivo para que nuestro conocimiento agregue valor a la economía. Eso implica que tenemos que trabajar para acercar el mundo de la ciencia al mundo de la innovación, del emprendimiento, de la gran empresa y a la pequeña empresa.

-¿Al sector productivo hoy le interesa la ciencia?

-Nuestra economía es globalizada. Somos un país pequeño, pero es que está abierto al mundo, y nuestras empresas están compitiendo globalmente. Y en esa competencia global el conocimiento es el aspecto distintivo. Las empresas que hoy invierten en I+D son empresas más competitivas; las empresas que no invierten en I+D están perdiendo competitividad, por tanto se transforma esto en un elemento central de nuestro sector productivo al hacerlo más competitivo globalmente.