“La mayoría de las preguntas que recibo son: ¿Puedo dispararles?”, dijo entre risas el pasado 27 de febrero Jeff Walther, jefe de la policía de la ciudad de Scottsdale, en Arizona, Estados Unidos, ante una audiencia compuesta principalmente por vecinos del sector de Desert Highlands, uno de los barrios más exclusivos de la ciudad, donde hoy se venden mansiones que pueden llegar a costar US$ 7 millones.

Allí la policía buscaba hacer frente a la creciente preocupación que, tanto en Arizona como en otros lugares de Estados Unidos, están generando lo que se ha bautizado como losdinner-time burglaries (robos a la hora de la cena), en referencia a los robos a casas que ocurren al final del día en vecindarios de lujo y que son perpetrados por lo que denominaron como “lanzas internacionales” chilenos.

“Si tienes un intruso en tu casa y hay una posibilidad de peligro en la que, a menos que actúes, resultarás herido o muerto, puedes usar tu arma”, fue el consejo del jefe policial de una zona que históricamente se ha inclinado por los republicanos, pero que tanto en la elección presidencial de 2020 como en la de gobernadores de 2022 eligió a candidatos demócratas.

Luego, otros miembros de la policía explicaron en detalle cómo estos “turistas del robo” llegan al país desde 2014 gracias al programa Visa Waiver, del que Chile es la única nación sudamericana adscrita, y que permite obtener sin mayores trámites un permiso para estar durante 90 días en suelo norteamericano. “No se involucran en delitos violentos y no usan armas de fuego. Son como ninjas, rápidos, escurridizos y profesionales”, relató la policía de Scottsdale.

Catorce días después, el 12 de marzo pasado, el jefe de la policía, Jeff Walther, compareció nuevamente ante los medios locales. Allí dio cuenta de que cerca de las 20 horas de ese domingo recibieron una alerta de personas desconocidas en el complejo Desert Highlands. “Uno de nuestros detectives identificó un vehículo sospechoso, le hizo un control y la conductora presentó un pasaporte chileno. Eso se convirtió en una pista”, anunció el policía.

“Al interrogarla, ella admitió que había ido a dejar a dos compatriotas para entrar a robar en casas del sector”, complementó el jefe policial sobre Grecia Romanduski Gaete Castillo (32), originaria de la Villa Pehuén de Maipú. Tuvo que salir el sol de la mañana para que a las 6.30 horas del día siguiente un helicóptero pudiera hallar a los sospechosos escondidos en un árbol. Se trataba de los chilenos Sebastián Jesús Parraguez Soto (23), también de Maipú, y un menor de 17 años, un fenómeno que se ha repetido en las últimas detenciones de connacionales.

A la izquierda, Grecia Gaete Castillo. A la derecha, Sebastián Parraguez Soto. Ambos esperan ser enjuiciados en Estados Unidos.

“En base a arrestos que hicimos en 2019 y en 2022 creemos que están tomando sus ganancias ilícitas, las empacan y las envían a Chile”, concluyó la policía. Los detenidos en Scottsdale son parte de los más de 40 chilenos que durante el último año han sido detenidos y juzgados en Estados Unidos por robar cajas fuertes, dinero, joyas y productos de lujo.

Se trata del resurgimiento de un fenómeno que comenzó hace más de cinco años en Los Ángeles, en la costa oeste de ese país, pero que ahora se ha esparcido a lo largo y ancho del territorio norteamericano. En julio pasado, los gobiernos de Chile y Estados Unidos firmaron un convenio para mejorar la entrega de antecedentes criminales de chilenos que quieran viajar a Estados Unidos. Pese a ello, en suelo norteamericano siguen cuestionando la mantención de nuestro país dentro del programa Visa Waiver.

“Disfrutando de lo bueno”

“Irónicamente, al menor de edad se le encontraron documentos judiciales por los otros delitos que había cometido en California antes de venir a Arizona”, comentó en la misma conferencia el jefe de la policía de Scottsdale, Jeff Walther, en referencia al chileno de 17 años aprehendido en marzo pasado, quien luego fue encarcelado en un centro de detención de menores del condado de Maricopa, en Arizona.

El policía agregó que el menor de edad y Grecia Gaete estaban en Estados Unidos dentro del periodo legal de estadía otorgado por la Visa Waiver. Distinto era el caso de Sebastián Parraguez, quien había sobrepasado los 90 días permitidos por el programa. Tanto Gaete como Parraguez, a quienes se investiga por otros robos en la zona, están hoy presos en Maricopa a la espera de un juicio por el que arriesgan más de 10 años de prisión.

En sus redes sociales, en las que abundan amistades con jóvenes chilenos que se muestran con joyas, fajos de dólares y autos de lujo en diferentes puntos de Estados Unidos, Parraguez alardeó con fotos y videos de un recorrido que hizo por Las Vegas en diciembre de 2023. “Disfrutando lo bueno”, comentó en la publicación.

En sus redes sociales, Sebastián Parraguez se ha mostrado disfrutando de sectores como Las Vegas en Estados Unidos.

“Son fantasmas, porque cuando llegan a Estados Unidos una de las primeras cosas que hacen es conseguir una identidad falsa de otros países o estados. No sabemos quiénes son. No conocemos a su familia. No sabemos si han cometido algún delito en su país”, explicó luego el teniente Jeffrey Hawkins, por lo que acusó es una falta de información y de registro de antecedentes criminales de los chilenos que están viajando a Norteamérica.

El caso de Sebastián Parraguez es un ejemplo de esa situación. En febrero de 2019, con 18 años de edad y estudios medios incompletos, tuvo en Chile su primer encuentro con la justicia al tratar de robar $ 51 mil en especies desde las bodegas de una tienda Sodimac en Cerrillos, donde era trabajador, tras lo cual obtuvo el beneficio de la suspensión condicional del procedimiento.

El 25 de febrero de 2021 no correría la misma suerte. Ese día, cerca de las 17.25 horas, en las esquinas de Carlos Gardel con Pasaje Tango, en plena Villa San Luis de Maipú, Carabineros divisó “un automóvil marca Volkswagen, modelo Voyage, que circulaba sin sus placas patentes delanteras ni traseras, que era conducido por Sebastián Parraguez Soto” junto a un acompañante, según la acusación de la Fiscalía.

Tras revisar el vehículo, los policías encontraron en el asiento trasero una pistola de fogueo marca Brunni y, entre las pertenencias de los ocupantes del auto, $ 161 mil en efectivo y una variedad de drogas a la carta: 180 gramos de marihuana Cripy, 3,1 gramos de ketamina, 2,2 gramos de cocaína y 14 pastillas equivalentes a cinco gramos de MDMA mezclado con éxtasis. La conclusión fue que estaban traficando droga.

Esta es la última fotografía que Sebastián Parraguez subió a sus redes sociales en febrero pasado, antes de ser detenido.

El proceso llevó a que ambos jóvenes quedaran sólo con arresto domiciliario nocturno. Tras la investigación, en diciembre de 2021, Parraguez fue condenado a 120 días de presidio con el beneficio de la remisión condicional por un año bajo la vigilancia mensual de Gendarmería. En marzo de 2023, cumplida su pena, Parraguez quedó sin una medida cautelar que le impidiera salir de Chile, tras lo cual emprendió rumbo a Estados Unidos.

Desde la embajada de Estados Unidos en Chile señalaron que “es muy lamentable que algunos ciudadanos chilenos hayan abusado de la posibilidad de viajar a los Estados Unidos sin una visa con la finalidad de cometer delitos”. Sin embargo, agregaron que son más de 350 mil los connacionales que viajan a ese país al año. “Para la embajada de los Estados Unidos es importante que los ciudadanos chilenos puedan viajar fácilmente a los Estados Unidos para realizar negocios y turismo”, concluyeron.

Los ladrones de Palo Alto

Tenemos que estar vigilantes, porque hay más de ellos. Si desafías a cualquier persona a hacer una simple búsqueda en Google sobre ‘ladrones chilenos’ o ‘grupos de ladrones sudamericanos’, verás en todo el país estos grupos afectando a muchas comunidades”, fueron parte de las recomendaciones que el jefe de la Policía de Scottsdale, Jeff Walther, entregó en marzo pasado.

Análisis de inteligencia dados a conocer por distintas policías de ese país hablan de que existirían cerca de 100 grupos de chilenos activos atacando viviendas de lujo en todo Estados Unidos, un dato que ha sido puesto en duda por autoridades en Chile.

Los últimos de ellos cayeron la noche del pasado 15 de junio, a eso de las 21.29 horas en la localidad de Palo Alto, en California, cuando una llamada de emergencia llegó a la central de operaciones de la policía local, en la costa oeste de Estados Unidos. “La residente, una mujer de 60 años que estaba en el extranjero en ese momento, recibió una notificación del sistema de seguridad de su hogar y pudo ver a varios desconocidos entrando a su casa”, relató la policía.

Según reportes oficiales, los sospechosos ingresaron tras romper una ventana del segundo piso, al que accedieron tras escalar el balcón, una de las técnicas más usadas en estos robos. “En el interior registraron los dos dormitorios y cargaron objetos de valor en dos bolsos, pero la llegada de la policía los interrumpió”, comentaron desde la entidad de Palo Alto.

A la izquierda, Christian Cervera. A la derecha, Jorge Pacheco. Ambos fueron detenidos en Palo Alto, California.

La justicia estadounidense estableció que se trataba de los chilenos Christian Cervera (23) y Jorge Pacheco (18). El tercero que trató de escapar también era un chileno de 17 años de edad. Un cuarto sujeto chileno, también de 17 años, fue aprehendido mientras los esperaba en una camioneta Chevrolet Tahoe en las cercanías. LT Domingo no pudo verificar de manera independiente la identidad de los dos adultos en Chile o si contaban con antecedentes penales.

Junto con una linterna y herramientas para romper las ventanas, los policías recuperaron dos relojes de lujo desde las muñecas de los sospechosos. Mientras que dentro del calcetín de uno de los sujetos había escondido un costoso anillo de diamantes. Se trata de los objetos más buscados por estos grupos delictivos, de acuerdo al perfil entregado por las autoridades estadounidenses.

También en California, pero en el condado de Orange, el fiscal del distrito, Todd Spitzer (republicano), ha sido uno de los más férreos críticos al mantenimiento de la Visa Waiver con Chile. “Esto es crimen organizado. Es un trámite online que sólo cuesta US$ 21. Usan interruptores de señales wifi, por lo que si tienes un sistema de cámaras wifi se bloquea completamente”, aseguró el fiscal en entrevista con Fox News en marzo pasado.

“No puedo comprender por qué el gobierno de Estados Unidos está tratando de proteger a los chilenos que están viniendo a irrumpir en nuestros hogares”, concluyó la autoridad. En Chile, la embajada de Estados Unidos expresó bajo el nuevo acuerdo firmado con Chile en julio pasado que “el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) está ahora realizando chequeos en tiempo real de los viajeros chilenos que utilizan el programa Visa Waiver, cotejando sus antecedentes criminales en Chile, en tanto que DHS y Chile están en las etapas finales de la implementación del mecanismo para añadir chequeos adicionales”.

El ladrón que no usó la Visa Waiver

Al otro lado del territorio norteamericano, en la costa este, los casos de chilenos robando casas de lujo también se han multiplicado. Pero uno de los hechos pone en evidencia que no sólo los connacionales que han llegado a Estados Unidos con la Visa Waiver están entre los principales responsables.

Si bien estaba identificado y había una orden de arresto en su contra desde agosto de 2023, recién en enero pasado el chileno Stefano Roberto Cortés Muñoz (30) fue detenido por la policía de la ciudad de Greenwich, en el estado de Connecticut. Según las autoridades norteamericanas, su peligrosidad era tal, que se fijó una fianza de US$ 2,5 millones en caso de que quisiera recuperar su libertad.

“Diferentes grupos, separados y sin conexiones el uno con el otro, usan las mismas tácticas para cometer sus crímenes. Desde octubre de 2021 (hasta agosto de 2023), la ciudad de Greenwich ha tenido sobre 70 robos a viviendas”, acusó la policía local. Uno de ellos terminó sellando la caída de Stefano Cortés y ocurrió el 18 de mayo de 2022 en el club de yates “Indian Harbour” de la ciudad.

En gran parte de los robos a casas cometidos por chilenos, los ladrones buscan cajas fuertes ubicadas en los segundos pisos y se las llevan.

El robo fue probablemente uno de los mayores golpes para Cortés y el grupo que lo acompañó: en la caja fuerte que robaron desde un segundo piso había US$ 1,65 millones sólo en joyas de lujo. Sin embargo, el trozo de una placa patente de Florida y restos de huellas dactilares en un vidrio del dormitorio principal permitieron al FBI identificarlo.

De paso, las autoridades descubrieron que no sólo era buscado en Greenwich: tenía otra orden de arresto por drogas en Tulsa, Oklahoma, mientras que las policías de Panama City Beach y Escambria, en Florida, lo buscaban por fraude, hurto mayor y uso fraudulento de tarjetas de crédito.

Lo que más sorprendió a los investigadores, de acuerdo con la orden de arresto emitida en contra de Stefano Cortés en Greenwich, fue que, según información del Departamento de Estado norteamericano, no existe registro alguno de su ingreso al país por una vía legal ni menos mediante el programa Visa Waiver.

En Chile, esos antecedentes lo tenían en la mira de la justicia como un experto ladrón con el método de “salidas de bancos”. Uno de esos hechos ocurrió el 11 de agosto de 2020, en San José de la Mariquina, en la Región de los Ríos, hacia donde Cortés y un grupo viajaron desde Santiago en busca de víctimas.

Stefano Cortés fue detenido en Estados Unidos y se le acusa de haber robado una caja fuerte con US$ 1,65 millones en joyas.

Según el relato de la Fiscalía, que pidió interceptar los teléfonos de Cortés durante la investigación, en tres vehículos los ladrones marcaron a una mujer que había salido con $ 15.500.000 en efectivo desde una sucursal bancaria en Valdivia. Luego, la siguieron por kilómetros hasta San José de la Mariquina, donde le pincharon un neumático para obligarla a detenerse.

“Uno de los miembros de la banda abrió la puerta delantera derecha y con sus manos tomó la mochila que había quedado sobre el asiento”, estableció la PDI, junto con determinar que el mismo vehículo que participó del asalto había sido controlado horas antes más al norte con Stefano Cortés como conductor.

Los investigadores en Chile presumen que luego de ese robo, Cortés viajó a Estados Unidos en octubre de 2020. Tras ello regresó a Chile e intentó volver legalmente a EE.UU. en noviembre de 2022, pero se le impidió renovar su pasaporte por tener una orden de arraigo y una orden de detención vigente por el caso de San José de la Mariquina. Nadie sabe cómo, Stefano Cortés salió de Chile e ingresó como ilegal a suelo norteamericano.