Columna de Paul D’Anieri: Putin, un negociador astuto

Por Paul D’Anieri, experto en la URSS y académico de la U. de California Riverside.

Ucrania y Rusia siguen lejos de un alto el fuego, y mucho menos de un verdadero acuerdo de paz. La política de Donald Trump de debilitar a Ucrania y a su Presidente ha tenido consecuencias tanto positivas como negativas para las posibilidades de un acuerdo.

Al recortar el apoyo militar a Ucrania, Trump ha aumentado la probabilidad de una derrota aplastante. Esto ha hecho que Ucrania esté dispuesta a aceptar un alto el fuego. Pero al dar a Rusia una posibilidad real de ganar la guerra, Trump ha eliminado cualquier incentivo para que Rusia acepte un acuerdo.

Ambas partes temen dos cosas de un alto el fuego. Primero, que los aspectos desfavorables de cese de hostilidades (como la división del territorio) se vuelvan permanentes. Segundo, que la otra parte aproveche la oportunidad para rearmarse y así poder combatir con mayor eficacia cuando finalice el alto el fuego.

Hasta hace poco, Ucrania se oponía a un alto el fuego porque dejaría gran parte de su territorio en manos de Rusia y le daría tiempo para reclutar, entrenar y armar a más soldados. Pero con Trump recortando el apoyo y Rusia avanzando lentamente, el peligro de que continúen los combates ahora parece mayor que el peligro que puede conllevar un alto el fuego.

Por las mismas razones, Rusia ahora tiene menos que ganar con un alto el fuego. La mayoría de sus objetivos bélicos siguen sin alcanzarse. Y, crucialmente, Ucrania controla una pequeña porción de territorio ruso en la región de Kursk, lo cual resulta muy embarazoso para Putin.

El Presidente ruso es un negociador astuto. Sabe que tanto Trump como Ucrania desean un alto el fuego. Por lo tanto, se demorará mientras busca obtener mejor información sobre el terreno y presionará a ucranianos y estadounidenses para que hagan más concesiones. Al obligar a Ucrania a negociar, Trump ha eliminado cualquier incentivo para que Rusia acepte. Tendremos que esperar para ver si Trump está dispuesto a ejercer más presión sobre Rusia.