Por Álvaro Peralta Sáinz, cronista gastronómico

Para refugiarme aunque fuese un rato de una calurosa y bulliciosa Plaza de Armas -gentileza de unos imitadores de Illapu-, fue que hace unos días decidí almorzar en la bien resguardada terraza de este restaurante peruano del Portal Bulnes. La verdad es que el comienzo no fue fácil, porque tenía en la memoria unas almejas a la chalaca que más de una vez probé en este lugar y -lamentablemente- ya no estaban en la carta. Me tenté entonces por unos pejerreyes. Sin embargo, no había disponibles en cebiche ni enrollados a la chalaca. Finalmente opté por unos choritos a la chalaca ($7.990) y un schop Cusqueña ($3.200), el que llegó rápidamente y acompañado de un poquito de cancha (maíz tostado) para picar y hacer sed.

Aunque los choritos se tomaron algo de tiempo en llegar debo decir que valió la pena, porque se trataba de una budinera enlozada llena de hielo sobre el cual había unas hojas de cilantro, alguna alga comestible, trozos de limón y -lo más importante- seis conchas de choritos, cada una en su interior con dos choritos de buen tamaño y coronados por una mezcla de tomate en cubos, cebolla morada, cilantro y choclo sancochado. Todo muy bien aliñado, bien acidito, bien fresco y bien sabroso. Un platazo. Por lo mismo, a pesar de la contundencia, el plato se fue rápido y se disfrutó mucho. Y no requirió de aliño extra alguno. La verdad que con eso ya uno podría dar por finalizado el almuerzo, pero como este trabajo es duro había que seguir. Y para sacarme el empacho de los pejerreyes pedí unos arrebozados ($8.990). Otra vez, hubo que esperar un poco, pero lo que llegó siguió al buen nivel del primero plato. Es que se trataba de una verdadera torre de pejerreyes fritos con un batido delgado pero firme y todo coronado con salsa criolla bien alimonada. Para acompañar, unas pocas yuquitas fritas y un pocillo con una sabrosa salsa tártara. El resto, jugar con los sabores y las mezclas de pescado, tártara, yuca y vegetales. Simplemente delicioso. Una vez más, la sazón venía perfecta y no hubo nada que corregir.

A todo lo anterior hay que agregar una atención de primera, con un mozo bien informado y atento a los requerimientos de los clientes. Y claro, una exquisita sazón que hace rato no encontraba en otros restaurantes peruanos. La verdad es que uno esperaría más sabor en los pequeños restaurantes peruanos de la ciudad y no en una cadena como Barra Chalaca. Pero bueno, así están las cosas y no queda otro que felicitar a unos y tirarle las orejas a otros.

CONSUMO TOTAL:

$22.198

DIRECCIÓN:

Portal Bulnes, locales 433-435-439, teléfono 226170861, Santiago.

HORARIO:

Lunes a domingo 12 a 21:30 hrs.

ESTACIONAMIENTO:

En la calle 21 de mayo (pagado).

PÚBLICO:

Apto para todas las edades.

EVALUACIÓN:

✮✮✮✮

Calificaciones:

✮✮✮✮✮ Sobresaliente / ✮✮✮✮ Excelente / ✮✮✮ Satisfactorio / ✮✮ Mucho que mejorar / ✮ Para no volver