Crítica gastronómica de Don Tinto: Chilenazo, a la antigua
Por Álvaro Peralta Saínz, cronista gastronómico.
Mucho antes de conocer los bifes de chorizo, los tomahawks y las “achuras”, los chilenos ya íbamos a comer carne a las brasas a restaurantes. Y aunque en esos lugares siempre hubo en sus cartas diferentes cortes servidos al plato, lo que mandó durante décadas fue la parrillada con carnes, interiores, embutidos y un par de papas cocidas; todo servido en un brasero metálico (con brasas) que se instalaba al medio de la mesa.
Esa era la norma hasta hace unos veinte años o poco más. Sin embargo, ahora es casi un recuerdo. Casi, porque aún existen lugares como el restaurante Chilenazo, donde todavía se puede comer carne a la parrilla old style. Eso fue justamente lo que hicimos hace algún tiempo con unos amigos cuando nos instalamos en su local de Avenida Apoquindo -donde alguna vez funcionó el restaurante Linfa, de comida china- y pedimos una Parrillada Tradicional ($55.990) más una porción de papas fritas ($4.999) y una ensalada surtida ($5.499). Para beber pedimos un Cabernet Sauvignon Latitud Sur Reserva ($7.899) y para la espera cuatro piscos sour ($3.699 c/u) que llegaron junto a una panera que amenizó la espera. Los sours no estaban mal, aunque un tanto dulces para mi gusto.
Tras un rato llegaron primero las papas y la ensalada y casi inmediatamente la parrillada. Y claro, había hambre, así que atacamos. Aunque probé de todo debo decir que los cortes de vacuno y chancho -ambos correctos- casi los pasé por alto, ya que me concentré primero en los cortes de interiores como ubre y chunchules, que estaban increíbles: sabrosos, tiernos y con el punto justo de dorado. Para el final dejé los chorizos, butifarras y prietas que traía la parrillada. Todos realmente exquisitos, con el mismo sabor que recordaba de visitas anteriores a este mismo Chilenazo e incluso a los Buenos Aires de Paine, local donde partió la historia de esta actual cadena. Las papas fritas y la ensalada estaban bien, aunque confieso que no les di mucha bola. No puedo decir lo mismo de una papa cocida, que dorada en la grasita que se había juntado en el fondo del brasero resultó ser un postre exquisito.
Los expertos dicen que servir la carne en un brasero es un pésimo hábito, porque los jugos y sabores de los diferentes cortes se traspasan entre si y -lo peor- el punto de cocción se pasa producto del calor. Y deben tener razón. Aún así, ir de tanto en tanto a un lugar como Chilenazo y compartir una parrillada ahí en la mesa tiene su cuento y por supuesto su sabor. Si a eso le sumamos precios razonables y una excelente atención, queda claro que vale la pena.
CONSUMO TOTAL: $89.174
DIRECCIÓN: Apoquindo 6226, teléfono 222017162, Las Condes.
HORARIO: Martes a sábado 12 a 22:30 hrs. Domingo y lunes 12 a 18 hrs.
ESTACIONAMIENTO: No tiene.
PÚBLICO: Todo público.
EVALUACIÓN: ✮✮✮✮
Calificaciones: ✮✮✮✮✮ Sobresaliente / ✮✮✮✮ Excelente / ✮✮✮ Satisfactorio / ✮✮ Mucho que mejorar / ✮ Para no volver