Por Álvaro Peralta Sáinz, cronista gastronómico

Debo reconocer que las pocas veces que ando por el sector de Plaza Ñuñoa suelo terminar comiendo algo en fuentes de soda como Las Lanzas, El Dante o La Fuente Suiza. Sin embargo, hace algunas semanas y por insistencia de un amigo, paramos a comer y beber algo en este bar de vinos que ya lleva una buena cantidad de años instalado a pasos de esta tradicional plaza.

Aunque era un día de semana y relativamente temprano, antes de las ocho de la noche, la verdad es que el amplio local de La Vinocracia lucía con bastante gente. Por lo mismo, tras buscar un poco nos pudimos ubicar en una mesa pequeña con vista a Avenida Irarrázaval. Ambos teníamos compromisos posteriores esa noche, así que la idea era comer algo liviano y por supuesto tomar algo de vino. Así las cosas, partimos pidiendo dos copas de Juan Segura Carignan ($3.600 cada una) y unas Olivas Fritas ($6.900). El vino llegó casi de inmediato y las aceitunas bastante rápido. Se trataba de una porción de cien gramos de aceitunas verdes apanadas y fritas. Muy ricas y muy recomendables para disfrutar junto al Carignan. Después nos entusiasmamos con el Tártaro de Res ($13.900) y otra ronda de Carignan. Tampoco se demoró mucho en llegar el tártaro, que venía aliñado con un poco de mostaza antigua, ají verde, cebolla perla, pepinillo, perejil y aceite de oliva. La verdad es que estaba bastante bueno, aunque siempre prefiero que lo llamen tártaro de vacuno. Para continuar nos tentamos con un Barros Luco ($10.900) y para acompañar nuestra elección optamos ahora por dos Schop Mestra ($4.500 cada uno). Obviamente llegaron primero los líquidos aunque el Barros Luco, que decidimos compartir, también lo hizo pronto. Ojo que en La Vinocracia a este sándwich le llaman Don Ramón Barros Luco y viene en una marraqueta bien buena con el agregado de cebolla caramelizada. ¿La verdad? Se podía prescindir de la cebolla, todo lo demás estaba muy bien. Además, el sándwich venía acompañado de unas papas fritas bastante decentes.

Al final, la parada en este restaurante fue satisfactoria. Bebimos bien, comimos bien y fuimos atendidos de muy buena forma. El local es cómodo y hay buen ambiente. Además, los precios son convenientes y la carta es medianamente extensa. En resumen, fue un acierto decidir pasa un rato a La Vinocracia a probar algunas buenas cosas y aprovechar de ponerme al día con mi amigo.

CONSUMO TOTAL: $55.100

DIRECCIÓN: Irarrázaval 3470, teléfono 227699276, Ñuñoa.

HORARIO: Lunes a jueves 18:30 a 12:30 hrs. Viernes y sábado 18:30 a 1:30 hrs.

ESTACIONAMIENTO: Bajo Plaza Ñuñoa (pagado).

PÚBLICO: Adultos.

CALIFICACIÓN: ✮✮✮

Calificaciones: ✮✮✮✮✮ Sobresaliente / ✮✮✮✮ Excelente / ✮✮✮ Satisfactorio / ✮✮ Mucho que mejorar / ✮ Para no volver