Recién cerca de las 16 horas del viernes 2 de febrero, la Corporación Nacional Forestal (Conaf) trató de tomar contacto con el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) para evaluar la evacuación de diferentes sectores de Viña del Mar que estaban siendo amenazados por las llamas del incendio que comenzó a las 12:50 de esa tarde. Pero la misión falló.
Según reconocen en el Ministerio de Agricultura (Minagri, encargado de Conaf) la caída de distintas antenas telefónicas durante la emergencia bloqueó la comunicación entre ambos servicios por al menos una hora y media. Mientras tanto, el fuego avanzó hasta consumir 500 hectáreas. Cientos de familias de los sectores El Olivar, Independencia, Villa Dulce, Villa Hermosa, Jardín Botánico y Canal Beagle intentaron escapar de las llamas. Pero no todos lo lograron.
La alerta de evacuación del Sistema de Alerta de Emergencia (SAE) llegó recién a las 18:41 para esas zonas. Para algunos fue demasiado tarde y hoy las autoridades lamentan 132 muertes y más de 8.651 hectáreas afectadas.
Las posibles fallas del Plan de Emergencias a cargo del gobierno es una de las aristas que se abrió en la investigación reservada que inició el Ministerio Público y que está a cargo del fiscal Osvaldo Ossandón, quien además indaga la eventual intencionalidad de los siniestros.
En el gobierno saben que lo que sigue es la reconstrucción paso a paso de las decisiones tomadas por las autoridades ese día, que recuerdan el desenlace que tuvo el terremoto del 27 de febrero de 2010 que derivó en una investigación judicial y con una seguidilla de autoridades declarando en tribunales.
Las dudas están en torno a la actuación de Conaf y Senapred, dirigidos por Christian Little y Álvaro Hormazábal, respectivamente. En ambos organismos ya se han instruido auditorias ministeriales.
Y es que la ley 21.364 establece responsabilidades claras para cada organismo. El reglamento sostiene que Conaf es el órgano técnico responsable de comunicar a Senapred a través de un informe el estado de la amenaza para que este tome decisiones. Hay dudas de que eso haya ocurrido.
La versión en La Moneda es que la alerta SAE se emitió sin el informe oficial de Conaf, organismo que al ser consultado respondió que “los detalles y datos sobre lo que ocurrió ese día serán aportados” en el contexto de la investigación judicial en ese contexto e instancias, “de modo de no entorpecer el adecuado análisis e investigación”.
Por su lado, desde Senapred, dependiente del Ministerio del Interior, señalan estar abocados a las investigaciones en curso “para hacer un análisis a los procesos ejecutados durante los días de la emergencia. Es importante esperar los resultados de estos reportes, eso es lo responsable frente a la catástrofe y no adelantar conjeturas”.
El minuto a minuto
Las versiones puertas adentro y afuera de ambos organismos sobre cómo se construyó la activación de la alerta SAE han sido difusas y esos flancos abiertos llevaron a que el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, solicitara “investigaciones rigurosas”.
Según los hechos, las primeras alertas del siniestro vinieron de la comunidad el viernes en la tarde, pasado el mediodía. A través de redes sociales, el sitio Alerta Noticias Valparaíso publicó un mensaje junto a un video de una humareda captada desde un auto en movimiento en el sector de Las Tablas con Camino a Melosilla, Valparaíso. Eso fue a las 12:50 horas.
Cuarenta minutos más tarde, a las 13:29, Conaf alertó en la red social X una “alerta roja para el sector, además del combate del siniestro de comportamiento extremo”. Lo anterior llevó a Carabineros a cortar de manera parcial la Ruta 68 -que fue cruzada por el fuego- camino Valparaíso a las 14 horas. Hasta esta hora aun no existía comunicación oficial entre Conaf y Senapred.
Las alarmas se extendieron con el pasar de las horas, sobre todo al momento en que el incendio tomó un rumbo diferente debido a la fuerza del viento que alcanzó los 46 kilómetros por hora y los desvió hacia el Jardín Botánico. A las 17:00 el fuego ya alcanzaba las primeras casas ubicadas en las quebradas de Canal Beagle. Una hora más tarde, en su muro de X, Senapred pedía evacuar los sectores de Quilpué por la amenaza inminente.
Según reseñan conocedores de esos momentos, Conaf no logró concretar la solicitud de la activación de alerta SAE sino hasta las 18:23 de la tarde para zonas de Quilpué y Viña del Mar. Pedidos por el registro oficial de esos minutos, desde la corporación declinaron de hacerlo.
En paralelo, ante la falta de un mensaje desde Conaf y frente a lo inminente del peligro, Senapred decidió la evacuación en otro sector, el de Quebrada Escobares y Fundo El Rincón en Villa Alemana. Así lo comunicaba través de X a las 16:40, dos horas antes de que Conaf le enviara la alerta formal por las otras zonas afectadas.
Dentro del Ministerio de Agricultura se sostiene que pese a las compeljidades se hizo todo lo posible para frenar la emergencia, pero también se ha analizado que nunca es posible prever la magnitud de la emergencia y qué giro puede dar.
Sin contacto con Bomberos
Al igual que Senapred y Conaf, distintas compañías de bomberos de la región de Valparaíso se activaron para combatir la emergencia, aunque, aseguran, todo fue por su cuenta.
En medio de la emergencia, el comandante del cuerpo de bomberos de Viña del Mar, Patricio Brito, recuerda que las alertas dentro del organismo comenzaron a activarse alrededor de las 17:00 horas, cuando el fuego se esparcía por el Jardín Botánico.
Fue ahí cuando a través de las radios y centrales de comunicación de bomberos solicitó minutos después declarar internamente en Bomberos la emergencia. La acción permitió la llegada de distintas brigadas de la región, provenientes de Maitencillo, San Felipe, Llay Llay, Quintero y Quillota. También desde Santiago. Asimismo, se solicitó la reubicación de carros bomba y aljibes de sectores de Quilpué y Villa Alemana.
Una vez reunidos en la cancha del Valparaiso Sporting Club Viña del Mar, el comandante señala que en solitario y por iniciativa propia iniciaron la coordinación y llegada a las poblaciones. De Conaf o Senapred no supieron hasta el sábado por la noche.
“Ese día la comunicación fue malísima, tanto por radio como celular. Los otros servicios (Conaf-Senapred) estaban ubicados en otras zonas. No supimos de ellos, al menos no nuestra compañía”.
Para el comandante la explicación puede ser que ambos organismos son independientes y tienen diferentes formas de actuar ante la emergencia, lo que explicaría la falta de coordinación. En parte, cierra.