La tragedia que puso en el foco las batallas migratorias de Joe Biden

Dos de los temas más divisivos entre demócratas y republicanos volvieron a la palestra en las últimas semanas. Por un lado, el aborto, con la derogación de la histórica sentencia de Roe vs Wade, y por el otro, la migración, luego de que se descubriera en la ciudad de San Antonio, Texas, un camión abandonado con 53 inmigrantes muertos, provenientes la mayoría de Centroamérica.

Esta tragedia sucede en medio de un flujo creciente de migrantes: las entradas ilegales a EE.UU. el mes de mayo llevaron a 239 mil arrestos en la frontera. La mayoría de estos accesos ocurren en la frontera del estado de Texas con México, donde muchos ingresan escondidos en camiones, como el encontrado esta semana.

Durante su campaña, el Presidente Joe Biden había prometido hacer “más humano” el sistema de migración. Ahora, a poco más de 17 meses desde su llegada a la Casa Blanca, puede decirse que lo ha intentado, aunque distintos obstrucciones no le han permitido llevar adelante todo lo que ha propuesto en ese ámbito.

El dramático hallazgo de los inmigrantes muertos dentro del tráiler de un camión en Texas este lunes no solo conmocionó a EE.UU., también recordó que el drama de la migración proveniente de Centroamérica no se ha detenido.

Respecto a los responsables de la tragedia, Biden declaró: “Explotar a personas vulnerables para obtener beneficios es vergonzoso, al igual que la grandilocuencia política en torno a la tragedia, y mi administración seguirá haciendo todo lo posible para impedir que los contrabandistas y traficantes de personas se aprovechen de quienes buscan ingresar a Estados Unidos”. La persona que conducía el camión ya está detenida, junto con otros sospechosos responsables.

Esta tragedia se enmarca dentro de la ya complicada situación en la frontera sur de Estados Unidos: ayer, la Organización Internacional para las Migraciones declaró que se trataba del”cruce terrestre más mortal del mundo”. Según la institución, la crisis migratoria en el continente provocó, solo en 2021, 1.238 muertes, de las cuales 728 ocurrieron en la frontera entre México y Estados Unidos.

En general, la respuesta que ha dado Biden a la situación migratoria en la frontera sur ha tenido más que ver con las razones que la originan: durante este tiempo ha aprobado una serie de asistencias económicas a los países centroamericanos, cosa que había sido suspendida por el gobierno de Donald Trump. Además, reanudó un programa que emitía visas a menores de edad, para así reencontrarse con sus familiares en Estados Unidos.

Sin embargo, según una encuesta de The Associated Press, solo el 35% de los norteamericanos aprueba la gestión del presidente en el tema migratorio, e incluso entre quienes se declaran demócratas, este es uno de los temas con menor aprobación: apenas un 60%.

Precisamente este jueves, la Corte Suprema permitió a Biden poner fin a una controvertida política migratoria, que había sido impuesta durante el gobierno de Trump, y que llevaba por nombre “Remain in Mexico” (Quedarse en México). Esta política establecía que cualquier solicitante de asilo, incluyendo los no mexicanos, tuvieran que permanecer al otro lado de la frontera mientras su proceso judicial se desarrollaba.

Muchos defensores de derechos humanos criticaban esta normativa, ya que exponía a los solicitantes de asilo a condiciones peligrosas. En distintas ocasiones, el presidente había declarado que esa política estaba “en contra de todo lo que defendemos como nación de inmigrantes”.

Desde su llegada a la Casa Blanca, Biden había intentado terminar con esta política, pero una coalición de estados liderados por republicanos, como Texas, detuvieron esas intenciones, señalando que eran contrarias a la ley. Por esto mismo, el caso termino en la Corte Suprema, donde recién este jueves se le dio la razón al presidente del país. Sin embargo, ya habían pasado 18 meses desde que el “Remain in Mexico” estaba vigente.

Pero con esta victoria, un tanto tardía, aún le queda otra batalla importante a Biden: el Título 42. Esta normativa, también activada por Trump con la excusa de la pandemia del Covid 19, reforzaba fuertemente las restricciones para ingresar a Estados Unidos.

Asimismo, aquellos inmigrantes detenidos bajo esta normativa, no eran retenidos para ser procesados, sino que inmediatamente eran expulsados del país. Si provenían de México o Centroamérica, se les expulsaba a México. En cambio, quienes venían de otro país, eran trasladados en avión, situación que pasó con muchos venezolanos que intentaron entrar a Estados Unidos estos últimos años.

Contra todo esto, Biden había intentado tumbar el Título 42 en mayo, pero una corte federal declaró que esta normativa continuara como está. Según datos de la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras de EE.UU., hasta mayo de 2022 se habían deportado a 1,7 millones de personas.