Si bien no da por hecho que ganará en las elecciones de este domingo, el actual gobernador de Valparaíso, Rodrigo Mundaca, confía en que reúne cualidades que su contendora, María José Hoffmann (UDI), no. Entre ellas, dice, vivir en la región y respaldar sin peros la descentralización.
Aunque compite en un cupo del Frente Amplio, el partido del Presidente Gabriel Boric, él reafirma su independencia y aclara que es capaz de alzar la voz cuando considera que existe un maltrato por parte del gobierno central. En esa línea, reconoce que la reconstrucción tras los incendios de febrero ha sido un fracaso.
¿Esta elección puede entenderse como un plebiscito al gobierno? Compite en un cupo del partido del Presidente.
Esta elección dice relación con quién tiene las mejores condiciones habilitantes para conducir la Región de Valparaíso. Eso significa quién conoce las necesidades del territorio, el que vive en el territorio, el que comprende la importancia de la descentralización.
En los últimos días ha sido crítico del gobierno por la reconstrucción. ¿Eso responde a una estrategia electoral?
No, no responde a ninguna estrategia. Yo estuve desde el primer minuto, desde la madrugada del 3 de febrero de 2024, dedicado en cuerpo y alma a ayudar a las personas que lo perdieron todo. Es el incendio más letal de los últimos 20 años: más de 8.800 casas destruidas, más de nueve mil hectáreas arrasadas, 137 personas que perdieron la vida. He sido muy crítico porque tenemos un Estado fallido: la entrega de casas de emergencia se dio sin conexión a servicios básicos. La reconstrucción ha sido un fracaso, sin duda, y no solo lo digo yo, también las alcaldesas. Ha sido extraordinariamente lenta.
¿El gobierno no estuvo a la altura de la emergencia?
No, no estuvo la altura. Y lo he dicho muchas veces.
La exalcaldesa Hassler sugirió que hay factores externos que pueden afectar un resultado electoral. ¿Eso podría aplicar? En consideración de los incendios o del caso Monsalve.
O sea, yo soy independiente. Soy apoyado por el pacto Por un Chile Mejor, pero soy independiente, no milito en ningún partido. Y estamos extraordinariamente lejos, en las antípodas de Monsalve. Hemos sido extraordinariamente críticos. Él hoy día está en prisión preventiva y esperemos que le apliquen el máximo rigor de la ley.
¿Pero no es confuso para los vecinos de Valparaíso ver que lo apoyan los partidos de gobierno?
Yo creo que no. Situaciones de esta naturaleza, a estas alturas del partido, no inciden porque la población de la Región de Valparaíso es lo suficientemente inteligente para saber que nosotros, respecto a Monsalve, estamos en las antípodas de él. Todo el mundo conoce que somos independientes y que tenemos una visión crítica de la gestión del gobierno en algunas áreas.
¿La independencia da una ventaja como gobernador? Se podría pensar que da más libertad para ser crítico del gobierno.
Hay 38 alcaldes en la región, 38 comunas. Y fuimos a las puertas de La Moneda con 32, de todos los signos, a reclamar más presupuesto. Soy el primer gobernador electo democráticamente en la historia de Valparaíso, y mi compromiso es la región. Cada vez que nos sentimos agraviados o maltratados, hemos alzado la voz con toda la fuerza.
¿Pero es una ventaja?
Es que la pregunta tiene cierta torsión, porque los gobernadores regionales ya no somos los intendentes, que eran designados por el gobierno y obedecían a sus dictados. Nosotros actuamos con completa independencia.
¿Cuáles son los principales proyectos que consideran necesario implementar o darles continuidad?
Hay muchos desafíos. De partida, el tema de la condición oceánica y el desarrollo portuario es fundamental. También el desarrollo del puerto terrestre más grande de América, el puerto de Los Andes. Como gobierno regional estamos en un estudio para un tren de doble propósito: de pasajeros y carga, para transformar el puerto terrestre de Los Andes no solamente en un sitio de inspección, sino que también en uno de transferencia de carga. La electromovilidad también es un desafío gigantesco. Y, por cierto, seguir trabajando en materia de seguridad y salud. Darle interoperabilidad al sistema de cámaras, construir a lo menos siete centros de control y comando, además de materializar el sistema automatizado de identificación biométrica.
¿Confía en qué va a ser reelecto?
No. Jamás. Los que me conocen saben que no somos jamás de actuar de esa manera. Trabajamos con muchísima sencillez y humildad, y tendrá que ser la soberanía popular la que dirima.
¿Ha pensado en un plan B? ¿Continuará en política si no es reelecto?
En la primera vuelta, y no lo digo peyorativamente, sacamos casi 400 mil votos, ganamos en 36 de 38 comunas. Por tanto, tenemos una opción cierta de poder continuar en la vida política, y así va a ser. Sea donde sea, desde la posición que ocupemos.
¿Qué puede ofrecer como gobernador que Hoffmann no?
Yo vivo en la región, la conozco, soy el primer gobernador electo de la historia democrática de nuestra región. Yo no voté en contra de la elección democrática de los gobernadores, porque confío en la importancia que tiene la descentralización.
¿Le habría gustado que el Presidente Boric concretara la promesa de eliminar a los delegados presidenciales?
Absolutamente. Fue una promesa de campaña y es una deuda que está pendiente.