Alejandro Weber: “Los futuros ingenieros comerciales deben generar transformaciones para un desarrollo con equidad”

Entre deberes universitarios y atento a la contingencia pasa sus días Alejandro Weber. Quien fue subsecretario de Hacienda, hoy es decano de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad San Sebastián (USS); un rol marcado por imprimir un nuevo sello a la carrera de Ingeniería Comercial. Afirma que los desafíos de la profesión deben priorizar una mirada social y ética.

-¿Cómo define el momento económico?

-Atravesamos una situación económica difícil y compleja en sus soluciones. Esta mezcla entre alta inflación y estancamiento de la economía es un hecho. No estamos creciendo, llevamos 6 meses consecutivos de contracción y una inflación que en 12 meses acumula un 14,1%, sumado a la disminución de los empleos. Tenemos más desocupados que al inicio de la pandemia. El próximo año la inversión caerá en torno al 4% y recién hacia el 2024 convergeremos hacia la meta de inflación del Banco Central. Hay factores externos que conocemos, pero, en mi opinión, el proceso constituyente generó una incertidumbre brutal que contrajo la inversión, la creación de empleos y depreció el peso. A esto hay que agregar la reforma tributaria, que añade un segundo frenazo para la inversión y el crecimiento.

-¿El gobierno debería postergar la reforma tributaria?

-Tiene que modificarse significativamente para que, al menos, la mitad de los recursos que pretende recaudar provengan de un mejor gasto público, reduciendo burocracia e ineficiencias del Estado. Hemos conocido retrasos en la ejecución del presupuesto 2022, por eso, antes de pedirle un mayor esfuerzo a las personas, el Estado tiene que poner de su parte y gastar bien. La mejor forma de recaudar es a través de mayor crecimiento económico. Este año el Estado recaudará 7 mil millones de dólares más de lo previsto, no porque hayamos tenido un incremento en los tributos, sino debido al mayor crecimiento. La experiencia reciente también lo ratifica: la reforma de la expresidenta Bachelet, que pretendía recolectar 3 puntos del PIB, solo generó nuevos ingresos por la mitad, precisamente porque frenó el crecimiento.

-¿Qué medidas propone ante este escenario complejo?

-El gobierno debe crear un ambiente propicio para el crecimiento, lo que implica un giro radical en sus actuales políticas. Esto incluye generar incentivos fuertes a la inversión y el empleo, profundizar agresivamente la capitalización individual, con fondos previsionales de propiedad de los trabajadores y heredables, avanzar en la formalización de 2,4 millones de trabajadores informales, impulsar con decisión la aprobación del TPP11 en el Senado, y avanzar hacia un gran acuerdo para combatir el crimen organiza￾do y el terrorismo. Se vienen años difíciles, necesitamos más acuerdos y liderazgo de nuestras autoridades.

-Ante este escenario, ¿cuál debe ser el rol de los nuevos ingenieros comerciales?

-Enfrentamos la creación de un nuevo y necesario pacto social en el país, en un contexto de una crisis de confianza general en las instituciones, altas expectativas de la población, crisis económica y desafíos globales debido al cambio climático. Todos estos son temas determinantes para el desarrollo económico. Cuando las naciones y las organizaciones son conducidas por liderazgos que respetan las diferencias, cuando las reglas del juego se cumplen de forma permanente y sin discriminación, y cuando las instituciones funcionan rindiendo cuentas las economías se desarrollan. En este contexto, estudiar ingeniería comercial es una herramienta invaluable para accionar transformaciones con una perspectiva amplia y una mirada estratégica, tanto en el mundo privado como público.

-¿Cómo se preparan los estudiantes para un mundo incierto?

-Somos una universidad privada ejerciendo un rol público y, como tal, estamos comprometidos con incrementar el capital cultural y la formación valórica de nuestros estudiantes. El amor por el trabajo bien hecho, buscar la justicia, ejercer la libertad, hacer lo correcto, respetar las instituciones y la solidaridad son principios intransables de nuestro proyecto humanista cristiano. Por eso, les entregamos una formación integral, con un plan de estudios moderno, para que se desplieguen profesionalmente con una visión transformadora de la sociedad. Así, los formamos en un vínculo permanente con la industria, confrontados a desafíos reales, con herramientas técnicas de vanguardia en sostenibilidad empresarial, transformación digital y finanzas verdes, y con un enfoque de desarrollo de capacidades complejas de análisis, decisión y acción, que son, finalmente, las que hacen la diferencia en un mundo tan incierto y cambiante.