Disciplina, coraje y trabajo en equipo: los consejos de un maestro en artes marciales para impulsar tu negocio

Demian Maia, el luchador brasileño conocido por su destacada carrera en el jiu-jitsu no solo ha desarrollado extraordinarias habilidades físicas con la práctica de artes marciales. Al mismo tiempo ha forjado una interesante visión respecto de cómo afrontar la vida y también los negocios, gracias a los valores que le ha proporcionado el deporte.

Esa mirada, que le ha permitido dar charlas y dictar seminarios sobre aprendizaje, entrenamiento y jiu-jitsu ahora que está más alejado del cuadrilátero, fue lo que lo trajo de visita a Chile para impartir el conversatorio titulado “Logra los objetivos”, donde participaron cerca de 300 colaboradores y colaboradoras de Transbank de manera presencial y remota.

“En compañías tan grandes como Transbank, y que tienen un liderazgo en el mercado, es importante inculcar a los colaboradores que el ímpetu siempre varía, por lo que se vuelve sumamente importante generar hábitos”, comenta Demian Maia.

El deportista explica que la motivación no siempre va a ser lineal, se viven altos y bajos. Además, no suele ser eterna. “Pero si tienes el hábito de continuar con consistencia y disciplina, puedes lograr tus objetivos. También se mantiene viva la pasión por lo que hacemos y la capacidad permanente de transformarse e innovar, valores que pude ver en Transbank”, añade.

“Aprendimos que en el jiu-jitsu la técnica es más relevante que la fuerza o la altura del oponente, y en este sentido toma mucha relevancia el rol y preparación del equipo, la planificación y eficiencia para afrontar los desafíos. Esta es la principal enseñanza que nos deja Demian Maia tras su visita a Transbank”, afirma Isabel De Gregorio, gerenta de la División de Personas, Asuntos Corporativos y Sostenibilidad de Transbank.

El propósito de la cita era compartir y traspasar los valores que se aplican en el deporte a los equipos de cualquier empresa. “Creo que la disciplina, el coraje y el trabajo en equipo son claves para el desarrollo de una compañía. Lo más difícil es armar un buen team, porque todos pueden ser excelentes trabajadores y grandes aportes; sin embargo, si no trabajan en conjunto con estos valores, no funciona, por más que sean un “10″”, explica Maia.

En primer lugar, destaca la disciplina como aquello que permite hacer foco en los propósitos. “Te lleva a la acción diaria por conseguir algo sin salirte de los márgenes y desviar la atención necesaria para lograr los objetivos. Sin perseverancia y volver a intentarlo, a pesar de los traspiés que puedan haber en el camino, los equipos pierden su propia capacidad de innovar”, señala el luchador.

Por otra parte, el valor o coraje es parte fundamental al momento de tomar decisiones. “Porque cuando estás desarrollando proyectos, por ejemplo, necesitas confiar en las propuestas, y en ese sentido, se necesita coraje para determinar algo y hacer lo necesario para llevarlo a cabo”, indica Maia.

Ninguna de las anteriores sería posible si no se mira desde una perspectiva grupal, en equipo. “Cada una de las piezas debe tener claro su rol, sus tareas y, en conjunto, ir a buscar lo mejor para el bien común”, asegura.

“En mi experiencia, prefiero trabajar con diversos profesionales todos cohesionados bajo el mismo propósito. Si somos capaces de dejar de lado los objetivos individuales por uno en común podemos llegar al éxito”, señala el deportista para relevar la importancia de este objetivo común.

Según Maia, una vez que defines el propósito, trazas una línea más clara a seguir. Esto es fundamental a la hora de liderar equipos, porque todos trabajan hacia el mismo objetivo. Cuando los equipos están cohesionados, esto se vuelve casi un resultado inmediato.

“Lo comparo con hacer deporte, ya sea colectivo o individual. Estoy seguro que si te pones un propósito, aprenderás lecciones, desarrollarás la resiliencia, todo lo que vas a aprender lo puedes traer para hacer este cruce que va ser muy útil para la vida fuera del deporte, para la vida en el trabajo, en la empresa, etc.”, sentencia el luchador.

Todo esto va en línea con la gestión estratégica empresarial, donde se necesita planificación, templanza y eficiencia para afrontar dificultades, explica Demian Maia. “Esto lo aprendí con el deporte, donde el uso del apalancamiento con las técnicas adecuadas te permiten seguir el rumbo en situaciones que son altamente competitivas, hacer frente a diversas dificultades y tomar ventaja frente a diferentes oponentes”.

Finalmente, respecto del rol de los líderes de las compañías, Maia sostiene que “es muy enriquecedor para los colaboradores que los líderes de la compañía enseñen con el ejemplo. La vida me ha enseñado que el liderazgo se transforma en una señal de humildad constante de la que no se debe olvidar jamás alguien que está a la cabeza de un equipo, porque es lo que mantiene aterrizado y enfocado en los objetivos”.