Nacido como un minijuego incluido dentro de un juego principal de la saga de Kirby, la idea de Kirby Fighters en realidad no es tan mala. Debutando en el año 2014 como parte de los modos de juegos del Kirby Triple Deluxe, Fighters se unió a la gran lista de actividades recreativas que adornan a la serie del héroe rosado y rápidamente se convirtió en una de las más populares.

En esencia, se trataba de una versión reducida de un brawler estilo Super Smash Bros., en donde podías elegir alguno de los poderes de Kirby para luchar contra otros oponentes, ya sea controlados por la computadora o en multijugador. Todo un lujo sobre todo cuando el Smash Bros. 4 aun no llegaba a la 3DS.

Al minijuego le fue tan bien -o Nintendo lo evaluó positivamente- que meses más tarde aparecería Kirby Fighters Deluxe como un título descargable y en solitario para 3DS. Lo mismo, pero por separado. Y la idea, como decenas de otros minijuegos que alguna vez han aparecido dentro de un Kirby quedó ahí, confinado a su consola.

6 años después, Nintendo decide levantar prácticamente de la nada a este experimento y lanzar una secuela completa para la Nintendo Switch llamado Kirby Fighters 2, que en realidad podría considerarse como la primera vez en que esta idea se convierte en un juego robusto y no solo un minijuego, a pesar de que, en su esencia, el juego es lo mismo.

Kirby Fighters 2 mejora en todo lo que uno podría exigirle a una secuela: tiene más modos de juego, escenarios nuevos, gráficas acordes al salto generacional y por supuesto nuevos personajes. Aunque más que personajes, deberíamos hablar de variantes, ya que como sabemos, Kirby Fighters es en realidad un duelo entre habilidades de Kirby más que de personajes únicos.

Para los que no lo conozcan, Kirby Fighters opera de manera similar a lo que podría ser un Smash Bros: peleas de hasta 4 jugadores en escenarios con plataformas, llenos de peligros, ítems y locuras. Pero, a diferencia de su hermano mayor, acá los personajes tienen una barra de vida que va disminuyendo con cada golpe y al llegar a cero, significa en Game Over. Bueno, como el modo HP del Smash en realidad.

En total son 17 habilidades las que podrás escoger para engalanar a tu Kirby llevarlo a la pelea. Las habilidades son estáticas, es decir, no puedes cambiarlas durante la partida, lo cual es un desperdicio considerando, por un lado, la gran cantidad que hoy y por otro, que no todas las habilidades son muy entretenidas de usar en un contexto de un juego de peleas.

El principal problema de Kirby Fighters como concepto -ni siquiera solo de esta secuela- es que utiliza poderes y ataques pensados en el contexto de un juego de plataformas a uno de peleas donde se requiere mucha más variedad en lo que se realiza. Piensa en el Kirby de Smash Bros: uno puede identificar que su lista de movimientos proviene de diferentes habilidades presentes dentro de su juego, pero con la variedad suficiente para poder encadenarlas y adaptarse a situaciones.

Porque sí, es muy entretenido lanzar bombas en un escenario de Kirby, pero para vencer enemigos o abrir caminos ocultos. Para pelear en una arena y que más encima sea tu único movimiento posible, no lo es tanto. Lo mismo me pasó con el Rayo o con la Sombrilla: ni siquiera se dieron el tiempo de crear movimientos nuevos basados en estas habilidades, uno al final termina haciendo spam con lo que es más efectivo.

Ese problema no ocurre con otras habilidades, sobre todo con el Bastón, que es la habilidad nueva incluida en este título y que, de verdad, se nota que fue pensada para funcionar dentro de un juego de peleas. Tiene grandes opciones para hacer combos, antiaéreos, movimientos de corto y largo alcance y es quizás el más entretenido de usar en ese sentido. Por supuesto otras habilidades ya probadas como Espada y Luchador funcionan bien, así como los personajes nuevos.

Porque además de poder usar a Kirby, hay personajes nuevos como Gooey o Bandana Dee, que si poseen movimientos mucho más variados e inspirados. Gooey sobre todo es el más entretenido ya que sus movimientos son prácticamente los mismos que tiene Kirby en Smash Bros, lo que lo hace ya el mejor de todos en cuanto a su diseño de peleas.

Pero más allá de su variedad de personajes -que pueden o no resultar ser un éxito- el principal problema de Kirby Fighters 2 es la poca variedad de modos de juego que trae. O bien, que todos los modos son prácticamente hacer lo mismo una y otra vez.

Está Combates, que es el modo de peleas normal, donde eliges personajes, escenario, algunas reglas y listo. El problema de este modo es que solo permite tener configuraciones de 4 peleadores a la vez. Siempre. No puedes hacer un 1 v 1 o 1 v 2. No, nada, son cuatro o no pasa nada. Esto cobra importancia sobre todo en el Modo Online, ya que si el lobby no se llena con 4 combatientes, simplemente la pelea no se realiza. En serio. Por lo mismo, nunca pude probar el modo online ya que nunca se llenaba la lista por completo. Terrible.

También está el Modo de Historia y el Modo Solitario, que en realidad son dos maneras diferentes de seguir haciendo lo mismo. En el modo de historia la gracia es que cada cierto tiempo tendrás que ir enfrentando jefes y que tendrás que hacerlo de manera cooperativa, ya sea con un amigo o con una CPU. Lo interesante también de este modo es que después de cada pelea podrás agregar ítems que pueden aumentar tu ataque, tu defensa, tu experiencia o recuperar tu energía, lo que muchas veces suele ser una opción bastante compleja, ya que tu vida no se recarga de escenario en escenario.

El Modo Solitario en tanto, es una especie de modo arcade, donde jugando solo tendrás que derrotar a una serie de enemigos, pudiendo dejar grabado tu mejor tiempo en tres dificultades diferentes.

Independiente del modo de juego en el que estés, cada pelea avanzará tu rango de luchador, el cual es el encargado de ir desbloqueando el contenido extra, ya sean las habilidades, escenarios y hasta personajes extra, lo cual es quizás el único incentivo real para jugar repetidamente este juego, ya que por el resto la verdad, no llama mucho la atención.

Habiendo otros juegos similares a Smash en la tienda de las Switch como Brawlout o Rivals of Aether, me resulta imposible recomendar este juego por sobre esas opciones, salvo que seas demasiado fanático de Kirby. Porque el trabajo de recuperación de la música, de escenarios clásicos y nuevos y la simplicidad de jugar se mantienen en un alto nivel, pero ese es quizás el único fuerte del juego.

Sin una propuesta interesante que agregar más allá de ser una expansión de un minjuego, Kirby Fighters 2 sigue la senda de los otros dos juegos de Kirby para la Switch: hechos para jugarlos en multijugador, muy coloridos y simples de jugar pero sin la chispa de la experimentación que ha adornado la serie desde sus inicios.