Las marcas Alfa Romeo, Chrysler, Dodge, Fiat y Jeep, pertenecientes al grupo Stellantis y representadas en Chile por Astara, han debido sortear en los últimos años la escasez de productos y el retraso de renovación de parte de su portafolio, principalmente, debido a los problemas que trajo la pandemia. Sin embargo, a pesar de estos inconvenientes, que vivieron la mayoría de las marcas automotrices del orbe, el balance de 2022 es positivo.
Para este año se espera que las ventas totales entre las cinco marcas italo-norteamericanas en el mercado local asciendan a 17 mil unidades, muy por encima de las 11.800 conseguidas en 2021. Para Derek Fox, gerente general de ellas, la explicación es porque van en línea con el crecimiento que ha tenido el mercado este año (+16,2%), por la llegada de modelos que llegaron a complementar los portafolios de algunas.
“Para nuestras cinco marcas, este ha sido un muy buen año y eso nos pone contentos, pues veníamos de años muy complejos, pero hoy retomamos la ruta. La RAM 700 ha sido nuestro mejor producto. Es un modelo diferenciador y eso se ha notado en los números”, señala Fox.
¿Cómo cree que terminará el mercado nacional este año?
El mercado va a ser muy bueno, sobre las 400 mil unidades, pero un poco por la inercia de los primeros siete meses, pues ya vemos que los últimos cuatro meses de este 2022 serán más complejo, el crecimiento será decreciente.
¿Cómo evalúa las estrategias de sus marcas, están conforme o siente que con alguna hay que hacer cambios?
Nosotros estamos super tranquilos con RAM, Jeep y Alfa Romeo, cada uno con lo suyo en el momento en el que viven. RAM hemos tenido una gran recepción de nuestras camionetas, con el lanzamiento del Jeep Grand Cherokee, sentimos que estamos llegando a un nuevo nicho y Alfa Romeo está viviendo su momento de despegue, a pesar que hemos tenido muy pocas unidades, la evaluación que hacemos de los productos a través de los comentarios de nuestros clientes es simplemente espectacular.
Donde tenemos el desafío es en Fiat, es ahí donde debemos ser capaces de crecer y mejorar el market share. Básicamente hoy tenemos el Pulse, y en menor medida el Argo. La llegada de nuevos productos que nos complementen la gama nos hará bien.
¿Qué modelos podrían llegar en Fiat para fortalecer esa gama?
Esperamos tener a fin de año el Fasback de Fiat, el nuevo SUV de la marca hecho y pensado para la región. Es un modelo muy interesante para nuestro mercado. Si no es diciembre, esperamos tenerlo para comienzos del próximo año, solo espero que no sea más allá de marzo, pero dependerá de la demanda interna que tenga ese producto en Brasil.
Y para fines de 2023 esperamos tener en Chile el 500e y la versión enchufable del 500X, algo que nos hace mucha falta en nuestro portafolio y que creemos que tendrá una gran aceptación.
En esa línea, ¿hay más novedades?
En este momento estamos a la espera de la liberación de la versión híbrida enchufable del Jeep Grand Cherokee, el que también esperamos tenerla en Chile durante el próximo año. Pero ahí pesa mucho el potencial del mercado, porque todo hay que justificar en término de volumen. A medida que Chile siga creciendo en la venta vamos a tener mayor posibilidad de tener autos eléctricos de nuestras marcas.
A esos modelos eléctrificados se sumará antes de que termine el año el nuevo Jeep renegade, que llegará con el motor 1.3 turbo y la RAM 1000 con el mismo motor, para nosotros son dos modelos muy importantes por el volumen de venta que pueden generar.
A fin de año también esperamos que el Alfa Romeo Tonale sea lanzado y ese esperamos tenerlo durante el primer cuatrimestre de 2023.
¿Qué pasa con Dodge?
Estamos en conversaciones, seguimos vigentes con Durango, pero no es mucho lo que estamos trayendo. Para nosotros es un signo de interrogación aún. Le quieren dar un nuevo aire, lo que es una tremenda noticia, pero no tenemos certeza de qué productos podrían llegar en el futuro a nuestro país.
