El funcionamiento de los autos mediante electricidad no es una idea nueva. Porsche ya experimentaba con este tipo de propulsión en 1898, y con los años varios otros fabricantes probaron con otros métodos para hacer que los motores funcionaran con electricidad, aunque sin mucho éxito por el tema de la recarga de los motores y la disponibilidad de tecnología de almacenamiento. Finalmente, una de las ideas que cobró más fuerza y logró hacerse realidad fue la de los híbridos. Motores eléctricos que asisten al de combustión, todo pensando en una conducción más eficiente, pero sin miedo a quedarse sin carga.
Eso fuera de nuestras fronteras, porque al ser un país que solo se limita a importar autos, Chile debe someterse a variables más complejas, como el precio del dólar, la disponibilidad de fábrica y el stock, que siempre se hace poco.
Por eso, en mayo de 2011, cuando recibíamos con los brazos abiertos al Mitsubishi i-MiEV, creíamos que todo sería diferente, que era el momento de iniciar definitivamente la revolución eléctrica. Alerta de spoiler: no sucedió.
150 km de autonomía tenía la primera generación del Mitsubishi i-MiEV, el primer auto eléctrico de producción masiva y que se lanzó en 2006 en Japón.
Bueno, no es que no haya pasado, el tema es que todo ha sido más lento de lo esperado. Los modelos han llegado por goteo y los precios suelen ser poco accesibles. Es cosa de mirar al i-MiEV y su precio, que en 2011 ya bordeaba los $ 28 millones.
“Esta es una industria que se ha ido desarrollando de manera importante en todo el mundo y en Chile también, pese a las necesidades de infraestructura que aún se requieren para que sea más accesible para las personas. Aunque hay avances, todavía se requieren en Chile mayores políticas que incentiven la incorporación de estas tecnologías para tener resultados exitosos y la penetración de este tipo de vehículos pueda alcanzar cifras importantes, como en algunos países europeos”, asegura Ignacio Bengoechea, gerente general de Mitsubishi en Chile.
Con el paso de los años, los híbridos se fueron multiplicando, pero los eléctricos tardaban en llegar. Los modelos de la submarca i de BMW hicieron su arribo, pero sus ventas no fueron tan significativas (nuevamente el tema de los precios), y de a poco comenzamos a ver la llegada de marcas generalistas al juego de los enchufes.
Sacando chispas
En Nissan apostaron fuerte por el desarrollo de los eléctricos, y con el Leaf se convirtieron en los primeros en masificar un auto eléctrico en el mundo, uno cuya primera generación llegó a Chile solo para flota de pruebas, y que recién el año pasado se puso a la venta en nuestro país, en su segunda generación.
500.000 Nissan Leaf se han vendido en el mundo. La primera generación contaba con una autonomía máxima (NEDC) de 160 km, hoy este rango supera los 400 km en promedio, según medición WLTP.
Con más autonomía, un diseño más moderno y tecnológico, el Leaf es uno de los autos que hoy en día se consideran sinónimo de movilidad eléctrica. Pero para los japoneses no solo basta con ser un modelo eléctrico más en la calle.
“Chile ha alcanzado el liderazgo en esta materia en Latinoamérica, consolidándose a través de alianzas que han impulsado este desarrollo desde el 2017, cuando se firmó el primer acuerdo público-privado de electromovilidad, hasta ahora, donde está aumentando la oferta de vehículos eléctricos, contamos con la red de carga pública más grande de Latinoamérica y somos la segunda ciudad con mayor número de buses eléctricos en transporte público a nivel mundial. Tenemos normativas respecto de la infraestructura de carga y una clara visión desde el punto de vista gubernamental, con objetivos específicos de electrificación y reducción de emisiones hacia el 2050”, destaca Francisco Medina, gerente de vehículos eléctricos Nissan Chile
Mientras esperábamos al Leaf, Renault hacía historia en 2014 al traer una completa flota de modelos eléctricos al país. Desde compactos urbanos como el Zoe, sedanes familiares como el Fluence, hasta comerciales como el Kangoo, la firma francesa fue una de las pocas que apostó por ofrecer este tipo de propulsión en diferentes formatos.
217 unidades de vehículos eléctricos se vendieron en Chile durante 2019.
En 2016, el Hyundai Ioniq llegaba de manera oficial al país, potenciando el área de innovación de Hyundai. Y si bien no es un auto que pueda considerarse 100% masivo, sí es posible ver varias unidades en la calle en un día habitual, muchas de ellas como parte de flotas.
De acuerdo con Máximo Morel, gerente de división automotriz del Grupo Gildemeister, representantes de Hyundai en Chile, “somos la marca N° 1 en venta de vehículos eléctricos, con un 37% de las comercializaciones acumuladas desde el 2016 a la fecha”.
Para seguir esa racha es que en la marca coreana apuntan a continuar en el camino de la electricidad. “Creemos que es un segmento que crecerá de manera exponencial en Chile, incorporando nuevas tecnologías y fuentes de energía más eficientes y verdes”, puntualiza el ejecutivo.
También el año pasado pudimos tener en Chile el primer SUV totalmente eléctrico, de la mano de MG llegaba el ZS, modelo que presentaba una nueva alternativa en cuanto a espacio y tecnología, apuntando a la evolución de la marca en este mismo ámbito. Y es que para MG la electricidad no es novedad, y en China ya cuentan con otros modelos propulsados a baterías, y ya se está trabajando para seguir evolucionando.
“De acá al 2040 se estima que el 40% del parque automotriz será eléctrico, y hay varias marcas que están impulsando productos con energías renovables. En el campo de los autos, se espera que de corto a mediano plazo las marcas y modelos incrementarán la tecnología, además serán mucho más interactivos e inteligentes”, destaca Enzo Altamirano, gerente comercial de MG Motor Chile.
En 2019 se vendieron 217 vehículos eléctricos, y para este año se estima una cifra similar, o ligeramente más alta, principalmente porque la oferta no ha variado mucho desde el año pasado, eso en la parte más mundana del catálogo nacional, ya que hace algunas semanas Porsche por fin pudo lanzar su esperado Taycan, un deportivo eléctrico que es algo así como un profeta de lo que serán los autos eléctricos en el futuro.
761 Hp es la potencia máxima que puede entregar el Porsche Taycan Turbo S, el cual posee una autonomía promedio de 450 km (WLTP).
Fuera de Chile podemos ver que firmas como Tesla suelen hacer noticia, al igual que otras como Peugeot, Volkswagen, Seat o Chevrolet, todos con más de algún compacto eléctrico que podría (o no) llegar a Chile, pero el riesgo en un mercado tan pequeño y competitivo como el nuestro siempre es alto, por lo que los fabricantes prefieren esperar.
En Porsche, en cambio, se arriesgaron y desataron al esperado Taycan en las calles nacionales, demostrando que un auto eléctrico no solo puede ser bonito y ecológico, también puede ser muy emocionante de manejar.