La semana pasada gran parte de la zona centro sur del país vivió estragos debido al sistema de mal tiempo. Las imágenes fueron elocuentes y mostraron cómo infraestructura pública, caminos y casa eran arrasados por las crecidas de los ríos y las torrenciales lluvias. Más allá de buscar las causas de estas inundaciones por encima del agua caída -falta de embalses, ausencia de áreas verdes, acumulación de basura, falta de prevención y una infraestructura cada vez más superada en algunos casos-, no fueron pocos los que perdieron bienes preciados, los que quedaron todos bajo el agua, y entre esos sus vehículos, los que podrían presentar algunas fallas mecánicas o, incluso, ser declarados pérdida total, dependiendo del tipo de seguro con el que cuenta.
En este artículo queremos explicarte cuales son los daños que pueden provocar una lluvia torrencial o si su vehículo queda inundado y qué hacer en cada uno de los casos.
Lo primero y más importante, al igual que en otras condiciones extremas como si te ves enfrentado a un incendio, mantén la calma y prioriza tu seguridad. Y es que, si te encuentras conduciendo y el agua comience a inundar la carretera, nunca intentes atravesar una inundación profunda, ya que las corrientes pueden ser engañosas, desconoces la profundidad que puede tener el caudal y tu vehículo puede verse arrastrado. En lugar de ello, busca rutas alternativas o espera a que las condiciones mejoren.
“Nuestra recomendación como técnicos e ingenieros automotrices, es evitar circular en rutas muy inundadas por mucho tiempo, si se ingresa a una ruta inundada y tu vehículo se detiene lo mejor es no insistir en el arranque ya que se puede dañar aún más el automóvil, no realizar conexiones eléctricas alguna en el compartimiento motor ya que se puede dañar tu integridad al exponerte a los sistemas de corriente y siempre contar en tu agenda de contactos una grúa de traslado para casos como estos”, señala Francisco Inglés, de la Escuela de Ingeniería y Recursos Naturales de DUOC US sede Maipú.
El docente explica, además que “Siempre debemos considerar que un vehículo sedán o city car pueden verse más afectados que una camioneta pick-up o todo terreno 4x4. La altura es un punto a tener en cuenta, además del tema que ingrese agua al habitáculo del usuario, en estos casos el problema va más relacionado a los daños que puede sufrir el mando motriz y eléctrico, destacando que gran parte de los automóviles que transitan en nuestras calles utilizan motores a combustión interna, eléctricos e híbridos.
Para Inglés, hay que tener varias consideraciones en caso de que un vehículo se inunde y dependerá de qué tipo de motor tenga. Por ejemplo, advierte que “Teniendo como referencia a los vehículos que montan motores a combustión hay que considerar que estos trabajan constantemente con altas temperaturas, con piezas metálicas fijas y en movimiento, donde la exposición al agua externa puede generar un cambio abrupto de temperatura deformando los metales calientes, destacando además que si ingresa agua al sistema de succión por el porta filtro de aire, el daño será más grave aún, en primera instancia, obstruyendo el flujo de aire, cortando el ciclo de combustión, pero lo más complicado es cuando el agua en estado líquido hace ingreso al interior de los cilindros del motor, donde se expondrá a la compresión de los pistones a una fuerza mayor, ya que las bielas no serán capaces de resistir la fuerza de compresión hidráulica, deformándose y generando golpes constantes en su funcionamiento”.
Distinto es el caso de los autos eléctricos, pues para el docente de DUOC UC Maipú, a este tipo de vehículos el agua los dañará sin lugar a duda, debido a ser un compuesto conductor de corriente. “Por ejemplo, el alternador encargado de cargar la batería y hacer circular la corriente por el sistema eléctrico del motor y vehículo, se verá afectado con cortocircuitos que fundirán a los fusibles o dañarán algún repuesto eléctrico o electrónico que hoy en día los sistemas operativos de los vehículos intentarán proteger dejando en modo de protección, para no sufrir más daños al respecto. Muchas veces cuando uno se expone a circular varios kilómetros a un sobre nivel de agua en la ruta, se puede dañar el motor generando un alto costo de reparación, tan alto puede ser el daño que incluso se han visto casos donde es necesario la sustitución completa del ensamble motor por falta de repuestos en el mercado”.
Las precauciones que hay que tomar
Entonces, ¿qué hacer si nos vemos enfrentados a una posible inundación de nuestros vehículos?
· Si te ves atrapado en una inundación y el agua comienza a ingresar en el habitáculo de tu auto, se debe apagar el motor de inmediato. Mantenerlo encendido puede causar daños graves al sistema eléctrico y mecánico de tu vehículo.
· Si el auto está estacionado y se inunda, no pongas en marcha el motor, ni siquiera la llave de contacto. Esto afectaría el sistema electrónico y podría provocar un cortocircuito y causar daños adicionales a los componentes internos del motor y empeorar la situación.
· Si aún estás dentro del auto y el agua comienza a subir es evidente que no podrás salvar tu auto y es hora de abandonarlo. Debes tener precaución y asegurarte que no existan peligros alrededor. Si es posible, lleva contigo documentos importantes y objetos de valor.
· Una vez que haya pasado la emergencia, contacta a un servicio de remolque para que retire el vehículo del agua. Evita intentar moverlo por ti mismo, ya que esto puede provocar más daños.
· Si no hay posibilidad de contar con la grúa en lo inmediato, te recomendamos que comiences a sacar el agua con precaución del interior del auto lo más pronto posible. Con eso podrás evitar que aparezca el óxido y que se estropeen los componentes electrónicos.
· Ahora, si la inundación es leve, pero te ves expuesto a barro, los daños también pueden ser graves, ya que este puede llegar al radiador y provocar una obstrucción. Si es así, el aire no podría atravesar sus celdas, provocando un sobrecalentamiento del motor y, además, el barro también puede llegar al interior del vehículo y a los desagües de la carrocería que sirve para evacuar el agua.
· Desconecta la batería para evitar cualquier riesgo de daño.
· Retira las bujías para que salga el agua de los cilindros.
· Comprueba que el combustible no se ha mezclado con el agua y, por tanto, se haya contaminado. Como consejo, extraer dos litros del depósito para verificarlo. Si hay mezcla, deberás extraer todo el combustible y luego reponerlo.
· También deberá fijarse que el aceite no se ha visto afectado. Si el nivel de aceite está por encima del máximo y presenta un color marrón claro, querrá decir que tienes que cambiarlo por uno nuevo.
· Vaciar el tubo de escape si se ha llenado de agua. Se puede hacer levantando el auto por la parte delantera, si fuera posible, o desmontando el tubo de escape.
· Los ductos del sistema de refrigeramiento y aire acondicionado del vehículo también podrían haber sufrido filtraciones de agua.
· Por último, lavar y desinfectar el interior del auto, nunca se sabe con qué tipo de agua fue inundado el vehículo. No olvides que el agua contaminada puede podrir la tapicería, por lo que el lavado y secado debe ser a la brevedad posible.
Una vez que se determine el alcance de los daños causados por inundación de tu vehículo, y si tienes seguro, te recomendamos hacer el denuncio para que tu compañía de seguros compare los costos de reparación del vehículo o, dependiendo de la póliza, contra los costos de reemplazarlo.