Una muerte cada cuatro minutos. Esa es la cifra que tiene en alerta a las autoridades sanitarias de Irán, ante el aumento de casos por coronavirus, en la que sería según los expertos la “tercera ola” de la pandemia en el país de Medio Oriente. Este domingo, se registraron 6.191 nuevos casos de Covid-19, el mayor número de contagios diarios desde el inicio de la pandemia. La cifra de muertes también ha llegado a un récord por sobre las 330 la semana pasada.

La situación es crítica. Según informó a la televisión estatal el jefe del grupo de trabajo nacional sobre el coronavirus, Alireza Zali, algunos hospitales se ya se han quedado sin camas para tratar a nuevos pacientes. “Nuestros médicos y enfermeras están cansados. Insto a todos a respetar los protocolos”, dijo Zali. En total, Irán registra 574.856 casos y 32.953 fallecidos.

Por eso, este lunes Irán extendió las restricciones en Teherán y en todo el país, lo que significará que el cierre de escuelas, mezquitas, tiendas, restaurantes y otras instituciones públicas, que debía finalizar hoy, se extenderá hasta el 20 de noviembre. Se impondrán “medidas y limitaciones extremas” durante una semana en al menos 43 condados donde las tasas de infección han sido alarmantes, y se informó que 21 de las 31 provincias de Irán estaban en alerta roja por coronavirus.

El pueblo iraní se reúne en un paseo marítimo, en medio de un aumento de infecciones por coronavirus, al oeste de Teherán, el 23 de octubre.

Y es que el escenario actual pareciera ser el más grave desde que el virus se instaló en esta nación de casi 82 millones de habitantes. ″La situación es catastrófica ", advirtió el especialista iraní en enfermedades infecciosas Minoo Mohraz, miembro del Centro Nacional de Lucha contra el Coronavirus (CNLC). “Nunca habíamos tenido tantas personas infectadas, ni tantas muertes”, indicó.

Sanciones estadounidenses

Y en medio de esta “tercera ola”, luego de las del invierno y el verano, el Estado se ha quedado con escasos recursos para hacerle frente. Las autoridades han culpado de la grave situación económica a las sanciones impuestas por Estados Unidos. Pero también la mala gestión y la corrupción en el país se suman a los factores que vuelven prácticamente inviable que Irán declare un reconfinamiento general para hacer frente a la pandemia.

“El coronavirus ha demostrado ser mortal, cruel y brutal en todas partes, pero es peor en Irán, ya que tiene un colaborador cruel: el régimen de EE. UU. Estados Unidos ha elevado la presión máxima sobre el terrorismo sanitario y ha atacado a las personas iraníes con sanciones inhumanas mientras luchan contra la pandemia. Superaremos pero NUNCA olvidaremos”, tuiteó hoy el Ministerio de Relaciones Exteriores.

Los expertos de Naciones Unidas han confirmado que las sanciones de Estados Unidos han afectado la capacidad de muchos países para combatir la pandemia de Covid-19. “Las personas en países sometidos a sanciones no pueden protegerse contra el Covid-19 ni recibir un tratamiento que les salve la vida si enferman porque las exenciones humanitarias a las sanciones no funcionan”, dijeron expertos en derechos humanos de la ONU en un informe el 7 de agosto de 2020.

Médicos atienden a un paciente con Covid-19 en el Hospital Shohadaye Tajrish en Teherán, el 14 de octubre.

Por otro lado, los propios especialistas hablan de que la cifra oficial de casos y fallecidos por Covid-19 está subestimada. El martes 20 de octubre, Massoud Mardani, miembro de CNLC señaló a la agencia iraní ISNA que “el número real de muertos por el coronavirus en Irán es 2,5 veces mayor que el número oficial de muertos”.

El uso de mascarillas se ha vuelto obligatorio en espacios públicos en Teherán, donde la tasa de infección ha sido más alta, y hay multas por incumplimiento. Sin embargo, las autoridades se han quejado del escaso distanciamiento social entre la población. De hecho, el viceministro de Salud, Iraj Harirchi, dijo la semana pasada que el recuento de muertos pronto podría aumentar a 600 por día si los iraníes no respetan los protocolos de salud.