Hace un poco más de un mes, el Presidente Iván Duque cumplió dos años desde que llegó a la Casa de Nariño, el 7 de agosto de 2018. El balance de los expertos pone a su gobierno al medio si se compara con otras administraciones, puesto que no ha tenido grandes triunfos pero tampoco grandes errores. Sin embargo, Duque ha querido remarcar sus logros en materia de seguridad, economía, reducción de cultivos de coca y frente a la crisis migratoria de venezolanos, en una entrevista realizada por Nicolás Ibáñez, organizada por La Otra Mirada, en colaboración con la Universidad Adolfo Ibáñez y La Tercera.

Además, Duque entregó sugerencias a Chile sobre el proceso constituyente, y en un análisis de la situación regional, dijo que América Latina “más que estar en un debate entre izquierda y derecha, está en un debate entre demagogos y pedagogos”.

El Presidente colombiano se reconoce a sí mismo como de “extremo centro”, según sostuvo en la entrevista, ya que “al final del día, desafortunadamente, América Latina se ve en los prismas de izquierda y derecha y muchas veces terminan grandes sesgos ideológicos, grandes prejuicios participando en decisiones que en esencia tienen que buscar el mayor beneficio para la mayor cantidad de personas”. En ese sentido, Duque aseguró que sus años más ligados a la tecnocracia en sus cargos en el Ministerio de Hacienda de Colombia y en el Banco Interamericano de Desarrollo, así como su formación académica, le enseñaron que hay “muchos temas que no son de izquierda ni de derecha, son de sentido común y que necesitan menos política y más administración”.

Por eso, el Mandatario hizo la distinción entre el debate de izquierda y derecha y el de demagogos y pedagogos. “Creo que los políticos demagogos han destruido naciones enteras, los que se han dedicado a llegar al poder promoviendo la lucha de clases. Los pedagogos, que la tenemos más difícil, somos los que tenemos que contarles a la sociedad que más importante que las agresiones son las soluciones”.

En ese sentido, en relación con la serie de protestas y expresiones ciudadanas que se han generado en varios países de la región, Duque afirmó que “los problemas de las sociedades no se resuelven con protestas ni con paros, se resuelven con un espíritu de progreso”.

¿Cuentas alegres?

Sobre los dos años que ya lleva en el poder, Iván Duque cargó con sutileza contra el expresidente Juan Manuel Santos. Frente a los cultivos de coca, aseguró que él recibió un país con más de 200.000 hectáreas de plantaciones de hoja de coca, y que en el año 2015 el país tenía menos de 60.000 hectáreas, es decir, se triplicó en esos tres años.

Por otro lado, dijo que Colombia cuenta con las menores tasas de homicidios y secuestros en casi 44 años, y detalló que en lo que va del año, ha habido una reducción del homicidio de un 11%.

Respecto al proceso de paz, uno de los eventos más polarizadores de la historia colombiana, también expuso importantes diferencias con el gobierno de Santos. “Yo siempre he creído en la paz, pero solo se consigue cuando está acompañada de legalidad y de cero impunidad”, dijo Duque. En esa línea afirmó que ha trabajado de cerca con las zonas que resultaron más fuertemente golpeadas en el periodo del conflicto armado. “Yo he visitado casi cinco y pregunto cuántas ha visitado mi predecesor”, afirmó el Mandatario, que criticó que en el proceso de paz aún “no se ha dicho la verdad sobre el reclutamiento de menores, no se ha entregado información en la guerra contra el narcotráfico, no se conoce el paradero de muchas personas que fueron secuestradas”.

La integración regional también es uno de los temas prioritarios para Duque. El Jefe de Estado ha criticado a Unasur y aseguró que “fue creado con el propósito no de fortalecer la integración, sino de romperla, (porque) terminó convertida en una especie de vehículo de las aspiraciones dictatoriales del chavismo en Venezuela”.

Por ello, destacó la creación junto al Presidente Sebastián Piñera de Prosur en 2019. Así, dijo que “este no es un organismo ideologizado”. De hecho, el Presidente colombiano quiso dedicar unas palabras de reconocimiento hacia Piñera: “Es un estadista y es un hombre que de alguna forma es una especie de decano dentro del grupo de los Presidentes. Tiene un sentido entre lo pragmático, pero también convicción de futuro que es importante para alimentar las conversaciones de la integración”.

Proceso constituyente

El Presidente colombiano también quiso entregar algunas sugerencias frente al plebiscito de octubre y el proceso constituyente chileno. Colombia reformó su Constitución en 1991, la que ha vuelto a tener otras reformas en los últimos años.

“Una Constitución no puede ser ni de izquierda ni de derecha, tiene que representar, armonizar, aglutinar a la sociedad”, expresó el gobernante colombiano, que además aprovechó de resaltar la importancia, a su parecer, de “que no se afecten los valores conquistados. Creo que Chile tiene grandes conquistas que no se deben perder”.