Presidente de Bolivia analiza destitución de ministro tras censura por escándalo de autos robados en Chile

El Presidente boliviano Luis Arce analizaba el miércoles la posible destitución de su ministro de Gobierno tras recibir un duro revés en la Asamblea Legislativa, que censuró al funcionario por un escándalo de automóviles robados en Chile con el apoyo de diputados disidentes del oficialismo.

La censura al ministro Eduardo Del Castillo se produce en medio de fuertes disputas entre Arce y el expresidente Evo Morales, jefe del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS), que han fracturado a la mayoría oficialista en el Legislativo.

Los legisladores opositores y los oficialistas disidentes han pedido a Arce que destituya a Del Castillo y dé un golpe de timón a su gobierno, que enfrenta denuncias de corrupción y un escandalo de narcotráfico, tras el decomiso en España de casi media tonelada de cocaína sin que hasta el miércoles se haya identificado al propietario de la droga.

Esta es la primera censura de un ministro de Arce que en mayo cumplió la mitad de su mandato de cinco años. Del Castillo es uno de los ministros más cuestionados pero salió airoso de tres interpelaciones anteriores.

En tanto, crece la presión para su destitución. En Twitter el expresidente y líder del principal partido opositor Carlos Mesa felicitó a su bancada por la censura y dijo que el Presidente Arce “debe cumplir el mandato constitucional”. A su vez, el encarcelado gobernador opositor Luis Fernando Camacho señaló en la misma red social que “el presidente debe demostrar al país que no es cómplice de Del Castillo”.

La Constitución establece que la censura implica la destitución del ministro, aunque una sentencia constitucional de abril permite designar al ministro censurado en otra cartera, dijo el exmagistrado Marco Antonio Baldivieso.

Del Castillo fue censurado por 101 votos en su contra y 42 a su favor. Esta vez las dos bancadas opositoras Comunidad Ciudadana y Creemos sumaron sus votos a los del ala disidente del MAS, algo que no había sucedido antes.

El caso de los automóviles robados puso en una situación incómoda a Arce después de conocerse que le regaló una camioneta robada en Chile a un sindicato agrícola afín a su gobierno. Después se denunció que otro auto robado en ese país estaba en poder del Legislativo. La policía, que está bajo el mando del ministro de Gobierno, decomisa automóviles ilegales y los entrega a la presidencia para que los done. Del Castillo dijo que no se sabía que esos vehículo habían sido robados.

Morales ya había demandado antes la renuncia del ministro pero no consiguió que Arce escuchara su pedido, lo que profundizó la disputa interna en el MAS.

Arce y Morales se disputan el liderazgo del partido de cara a las elecciones de 2025. En los últimos días el exmandatario acusó al gobierno de pretender armarle una trampa judicial para sacarlo de la carrera.

Morales renunció en 2019 tras 14 años en el poder en medio de un estallido social que dejó 37 muertos tras unas elecciones denunciadas por fraudulentas por la Organización de los Estados Americanos (OEA) en las que buscaba un cuarto mandato consecutivo. Impedido de participar en las elecciones de 2020 eligió de candidato a Arce, su ministro de Economía por 11 años.

Para los analistas Morales y Arce ya están en campaña y a medida que se acerquen los comicios de 2025 las discrepancias se profundizarán. La votación contra Del Castillo demuestra que Arce no tiene mayoría en el Legislativo, aunque es probable que las dos facciones del MAS vuelvan a unirse cuando haya intereses comunes involucrados, dijo el analista y exdiputado Carlos Borth a radio Panamericana.