Nuevas políticas y medidas para fomentar “la diversidad” dentro de la familia real británica estarían siendo evaluadas a pedido de la Reina Isabel II, quien incluso se encuentra evaluando nombrar un “jefe de diversidad”. Esto a raíz de las acusaciones de racismo dado a conocer durante la entrevista de dos horas de los duques de Sussex junto a la presentadora Oprah Winfrey.

Según detalla la cadena británica BBC, la monarca no quiere avanzar más ya que ya existen medidas de incentiven la diversidad pero pero “no se ha visto el progreso deseado”. Por ello, la Reina habría pedido un examen “exhaustivo” de las políticas de diversidad racial, étnicas o de orientación sexual que son aplicadas al momento contratación del personal de palacio.

Previamente, el Palacio de Buckingham emitió una declaración donde manifestó preocupación y “tristeza” por las denuncias vertidas por Meghan Markle y el Príncipe Harry y aseguraron que serían tratadas en de manera privada por la familia.

“Si bien algunos recuerdos puede variar, son tomados muy en serio” por los miembros de la familia real pero serán abordados “en privado”, señala la misiva.

Luego de que el especial de dos horas conducido por Winfrey fuera transmitido en Estados Unidos y Reino Unido, el Palacio de Buckingham solo había emitida dicha declaración.

Posteriormente, el Príncipe William -hermano mayor de Harry Windsor- descartó que su familia fuera “racista” en declaraciones a la prensa. El segundo en la línea de sucesión al trono británico, se convirtió en el primer miembro de la realeza en abordar directamente la entrevista.

Uno de los momentos más polémicos de la entrevista fueron las declaraciones de la exactriz respecto a que durante tu primer embarazo habían conversaciones en el Palacio de Buckingham sobre el color de la piel de su hijo y cómo eso se vería.

Harry tampoco dijo quién hizo esos comentarios porque no se sentía cómodo hablando del tema. “Esa es una conversación de la que nunca voy a hablar”, aseguró y añadió, “ese fue un momento incómodo y quede impactado”.

Por su parte, Winfrey aclaró en CBS This Morning que ni la Reina Isabel II ni su marido, el Príncipe Felipe, formaron parte de las conversaciones.