Abogado de Jadue desliza que prisión preventiva puede ser utilizada como herramienta para “alterar la votación” de una alcaldía
Juan Carlos Manríquez, señaló que la medida cautelar "puede traer aparejada la mala costumbre de que todos los bloques políticos hagan lo indecible por mantener 46 días presos al alcalde del lado que no le guste".
El abogado Juan Carlos Manríquez, defensa del alcalde de Recoleta, Daniel Jadue (PC), quien se encuentra en prisión preventiva en el marco de la investigación sobre delitos de corrupción mientras presidía la Asociación Chilena de Farmacias Populares (Achifarp), deslizó la teoría de que la medida cautelar de reclusión puede ser utilizada como una herramienta política para que cualquier alcalde deje sus funciones. Declaraciones a tan solo días de que el militante comunista deba cesar su cargo en la alcaldía por mantenerse fuera de sus funciones por más de 45 días.
Sobre la posibilidad de que Jadue no continúe a la cabeza de Recoleta, indicó que “en este caso se ha adelantado dos estadios el efecto práctico, en el que una persona cesa. Ya el efecto está, cesar en el cargo. Si lo va a perder o no es un debate que tiene que producirse en sede constitucional o electoral. Pero el efecto ya está producido”.
En esa línea, remarcó: “Estoy probando que la prisión preventiva de un actor político –alcalde– por más de 45 días, sea del color político que sea, va a seguir con estas mismas consecuencias. Puede traer aparejada la mala costumbre de que todos los bloques políticos hagan lo indecible por mantener 46 días presos al alcalde del lado que no le guste y alterar la votación”.
Manríquez destacó en conversación con Radio ADN que “ese acto de garantía (prisión preventiva) no puede traer aparejado otras pérdidas mayores o más considerables, como por ejemplo, la pérdida de los derechos políticos, alterar una votación del alcalde que sea, republicano, la UDI, izquierda, PC, como quiera que sea”.
El legista también se refirió a los recursos judiciales que presentó ante la Corte Suprema y de Apelaciones: “Si el tribunal no quiere escuchar los antecedentes, bueno, ¿qué va a hacer usted? Usted tiene que acatar nomás en la audiencia. Si el juez dirige bien o mal, usted obedece y tiene disidencias, respetuosamente, a través de los recursos de las cortes que corregir y eso también se puede corregir, pero los plazos en este minuto ya están pillados porque el de amparo en la Corte Suprema ya pasó de la fecha de hoy día. Por eso, uno en la defensa técnica tiene que entender que lo que está tratando es de resolver un problema técnico, jurídico y no necesariamente político”.
Y añadió que “Por esto mismo, el umbral de la tolerancia y la frustración tiene que amanecer todos los días muy trabajado. Porque estos no son problemas personales, son problemas, digamos, procedimentales que son irritantes, es cierto”.
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