La mañana de este lunes se llevó a cabo el procedimiento abreviado en contra de Luis Castillo, indultado por el Presidente Gabriel Boric a fines de 2022 y quien fue apresado por perpetrar un supuesto secuestro en diciembre de 2023 en Copiapó.
De esta forma, y tras llegar a acuerdo con el Ministerio Público, el imputado fue condenado a cuatro años y un día por los delitos de robo con intimidación y violencia, y manejo bajo la influencia de estupefacientes, pena que deberá cumplir de manera efectiva.
Misma pena se le impuso a su pareja, Camila Morales, quien al tener irreprochable conducta anterior pudo acceder a cumplir la sanción bajo libertad vigilada intensiva.
El viernes pasado, en tanto, las otras tres mujeres que participaron en los hechos fueron condenadas a seis meses de libertad asistida por robo con violencia.
Ante la determinación, el fiscal Sebastián Coya aseguró que “desde el mes de diciembre del año pasado los antecedentes de la carpeta investigativa que se expusieron en la audiencia de control de detención daban cuenta de ilícitos de robo y secuestro. Sin embargo, con la ejecución de las diligencias ordenadas por la Fiscalía se obtuvieron nuevos antecedentes que permitieron acreditar el delito de robo con intimidación y violencia y el manejo bajo la influencia de estupefacientes”.
Los hechos
Los hechos por los que los cuatro sujetos fueron condenados se remontan al 14 de diciembre, cuando durante la madrugada, la víctima de iniciales H.D.A.A concurrió al sector de Placilla Morales, ubicada en Av. Los Carrera esquina Pedro León Gallo, comuna de Copiapó.
En ese lugar, en primera instancia, una de las imputadas abordó el vehículo de la víctima, para posteriormente dirigirse al casino Antay, donde se encontraba el imputado Castillo Opazo, quien también subió al automóvil y juntos se trasladaron hasta la botillería conocida como “Chino Escuti”, donde adquirieron bebidas alcohólicas.
Tras ello, los dos imputados le pidieron a la víctima pasar por otros tres sujetos, trasladándose a un sitio eriazo tipo mirador, donde se mantuvieron hasta el amanecer.
De acuerdo con los antecedentes descritos por la Fiscalía, todos se mantuvieron consumiendo alcohol y drogas, y a eso de las 7-8 de la mañana le pidieron a la víctima que volviera a comprar más alcohol, aunque éste dijo que no tenía más dinero, momento en que Castillo lo agredió con golpes de puño en la cabeza.
Posterior a ello, como se relató, Castillo y las demás imputadas lo trasladaron hasta el maletero, encerrándolo en el interior del portaequipaje. Le quitaron su celular y lo mantuvieron retenido.
Los imputados, además, pretendían sustraer el vehículo de la víctima, avaluado en la suma de $8.659.701 y venderlo a terceros.
Para ello, según el Ministerio Público, los encausados comenzaron rápidamente a negociar su precio, sacándole fotos y enviando audios de WhatsApp al comprador, a la vez que mantenían retenida y amenazada e insultaban, como quedó registrado en audios.
Sin embargo, los sentenciados no lograron su cometido, ya que tras la denuncia de la pareja de la víctima, fueron interceptados por personal policial en un servicentro.
