Según la Corporación Nacional Forestal (Conaf), hasta este jueves son 850 las hectáreas que ya se han consumido en Curacaví (RM) a causa del incendio que arrancó a las 14:32 horas del martes pasado, cerca de la cuesta Barriga. Y aunque hasta aquí no ha afectado a viviendas ni ha cobrado la vida de personas, lo cierto es que la emergencia es la más grande de la que se tiene registro en la presente temporada y que pone en alerta a las autoridades, justo en un año en que se ha dicho que Chile está mejor preparado que años anteriores para combatir el fuego.
En tal sentido, el alcalde de Curacaví, Juan Pablo Barros (independiente pro UDI), coincide con esa última apreciación y señala que en realidad donde el país está al debe es en materia de prevención.
Con un incendio activo en su comuna, que históricamente se ha visto afectada por incendios, ¿ve efectivamente más preparado al país para enfrentarlos?
Diría que después de un 2017 complejo, donde no había capacidad para reaccionar, se tuvo un aprendizaje como país. Fue doloroso, pero de ahí en adelante empezamos a enfrentar con mejor capacidad de respuesta los incendios. Empezó a haber disponibilidad de brigadas, de recursos aéreos, de maquinaria y de gestión. Hoy la respuesta de Conaf frente a los incendios forestales es enviando todo de una vez, en vez de ir escalando recursos. Esto permite tener un ataque más efectivo del incendio.
¿Y en qué se está fallando?
El pasto creció producto de las lluvias, la masa ganadera ha disminuido, así que no se comen el pasto, que se seca, y hay más combustible. Y los incendios son más agresivos y violentos. Donde creo que estamos más al debe es en la prevención. Hoy hay recursos, pero lo ideal es que los incendios no se produzcan. Ahí hay bastante que avanzar. El tema es cómo llegar a las personas que muchas veces inician esto por negligencia y no tienen los resguardos.
¿Ve más medidas que años anteriores, como se ha dicho?
De 2018 en adelante el tema de medios y recursos ya estaba bastante cubierto. El incendio de acá en 2017 afectó muchas hectáreas, básicamente porque no había medidas de Conaf disponibles cuando se inició. La situación de Chile en cuanto a incendios uno la ve en el mundo, como en Estados Unidos. Por eso digo que donde falta esfuerzo es en la prevención. En términos de capacidad de respuesta, la hay. Y se valora y se agradece, pero no hemos podido establecer un trabajo más efectivo en términos de prevención y cómo evitar esos daños. Estamos al debe en cómo poder evitar los incendios, y ahí surge también un tema legislativo. A esa conducta negligente, dejando de lado el incendio intencional, legalmente no le pasa nada.
¿Ha sido buena la coordinación con las autoridades?
En general, sí. Hemos tenido buena comunicación. Curacaví tiene bastantes incendios y esto se ha mantenido de forma bastante transversal con todos los últimos gobiernos, con Conaf y Senapred.
¿Han llegado las ayudas necesarias?
Hemos activado albergues de manera preventiva, pero no ha sido necesario utilizarlos. Ahora monitoreamos el tema de animales y ganado en el sector, porque quedan sin alimentación ni agua, y a ellos los estamos atendiendo.