De la mano con el aumento de la circulación de virus respiratorios y en particular de la Influenza, sostenidamente durante los últimos días la ocupación de camas críticas de los diversos recintos sanitarios ha ido al alza, incluso a pesar de la reconversión de camas que se ha comenzado a dar en el sistema integrado entre el sector público y el privado: acorde al reporte diario del 28 de mayo del Departamento de Planificación Presupuestaria y Gestión de la Información del Minsal, el sistema en su totalidad muestra un 92,9% de ocupación en las camas de adultos -0,9% más que el día anterior- en sus 4.301 camas habilitadas.
En detalle, el reporte señala que el sector público presenta un 93,8% de ocupación (-0,4% que el día anterior) en sus 2.853 camas, mientras que el sector privado tiene un 91,3% de 1.448 camas, lo que implica un alza del 3,5% respecto del lunes. Además, se señala que hay un 17,1% de patologías respiratorias en camas críticas, de las cuales un 20,8% está en UCI, y el 15%, en UTI. Asimismo, se señala que el 62,7% de los pacientes en UCI están con ventilación mecánica, donde un 27% de ellos es por causas respiratorias.
“No hay una información actualizada y a pesar de que se confirma un nivel altísimo de ocupación, se señala que muchos de los pacientes no están ahí por influenza, lo que es pobre”, advierte al respecto el exministro de Salud, Jaime Mañalich.
En tanto, al ver las cifras de camas críticas pediátricas habilitadas en el sistema integrado, estas muestran estar mucho menos presionadas que las de adultos, puesto que a nivel general tienen un 74% de ocupación en las 731 habilitadas, e incluso el sector público tiene una ocupación del 74,9%. Las camas de neonatología, en tanto, llegan al 72,6% de ocupación (78,5% en el sector público y 48,2% en el privado).
Desde el Hospital El Carmen, por ejemplo, reseñan que en su caso en el Servicio de Emergencia Adulto el número de consultas respiratorias no ha aumentado más allá del 30% y en el Servicio de Emergencia Infantil la consulta es entre el 45 y el 50%, pero todavía con una baja tasa de hospitalización. Y que hasta aquí no se han complejizado camas, es decir, evidencian una una mayor circulación, pero sin cuadros graves. Eso sí, advierten que en su recinto el virus más prevaleciente es el de la influenza A y rinovirus, mientras que el sincicial y el coronavirus presentan número marginales.
En tanto, Rubén Gennero, director del Hospital de La Florida, reseña que en su caso han experimentado una campaña dura en la que han identificado que se adelantó el brote de influenza en pacientes adultos, lo que los tiene “bastante exigidos” en la atención de urgencia. Eso ha llevado a que una mayor proporción de pacientes está quedando hospitalizada, lo que los ha llevado a aumentar en un 33% las camas UTI. “Tenemos una ocupación alta, pero aún no tenemos el dilema de la última cama. Tenemos camas y ventiladores”, asegura, además de agregar como factor clave en no ver llegar tantos niños de urgencia, el gasto del Minsal en Nirsevimab, el remedio para enfrentar el sincicial.
Como sea, las cifras del informe diario, además, dejan en evidencia la velocidad con que tanto el sector público como el privado han comenzado a reconvertir camas para ampliar sus respectivas capacidades y así hacerle frente al alza de contagios: el 23 de mayo el sistema integrado tenía 4.189 camas de adultos habilitadas, de las cuales 2.841 eran públicas y 1.348 privadas, es decir, en cinco días el sistema en su conjunto logró ampliar su capacidad en 112 camas (+2,6%), pero de ellas solo 12 las aportó el sistema público, y 100 el privado, es decir, crecieron respectivamente en un 0,4% y un 7,4%.
Según algunos actores del mundo sanitario público, los recursos han incidido en la velocidad de reconversión. Por ejemplo, desde la Municipalidad de La Florida reseñan que en comparación al año anterior, el Hospital de La Florida recibió un 84% menos de recursos para esta campaña de invierno. Y que en el caso de la Corporación de Salud y Educación de la comuna, agregan, el Minsal le asignó menos de la mitad de recursos en comparación a los años anteriores, “lo que genera un déficit muy significativo para que los equipos municipales puedan abordar el alza de contagios y enfermedades respiratorias que habitualmente se presentan en este época”. En medio de esto, el municipio decidió ofrecerle al hospital una inversión de $ 100 millones para financiar una Unidad Primaria de Emergencia.
Los recursos aparentemente de menos a los que hace referencia la comuna conducida por Rodolfo Carter (Ind.), son los contenidos en la Ley de Presupuesto y que consideran un monto extra para la campaña de invierno, a través de una glosa, que tiene una partida para atención primaria y otra para hospitales. Respectivamente, el Minsal traspasa esos fondos a las municipalidades y a los hospitales, en cuyo caso se usan generalmente para reconversión de camas, reforzamiento de urgencias o contratación de personal de refuerzo, entre otras cosas. El presupuesto para esa glosa a nivel país este año fue de $ 6.389 millones de pesos (+3,5% respecto de 2023) y en las entrañas del mundo sanitario dicen que puede ocurrir que se hayan destinado de una forma distinta este 2024.
Al respecto, el director del Hospital de La Florida explica que la partida presupuestaria inicial para campaña de invierno, si se compara con el presupuesto que finalmente se usó el año pasado, “ciertamente” es menor en su caso. Y que por ahora, por instrucción del gobierno central, utilizan recursos operacionales para hacerle frente a la campaña, algo que en todo caso dice es habitual y que al final del ejercicio presupuestaria anual debiesen reconocerles y “devolverles”. Además, aclara que la colaboración del municipio no es por falta de recursos, sino para aumentar las medidas sanitarias de forma conjunta.
Jorge Cantero, director del Hospital de Curicó, dice que el crecimiento en habilitación de camas tiene que ver con la dotación de recursos humanos, y que en tal sentido el Minsal ha ido otorgando recursos, los que en la medida que son entregados permiten ir abriendo camas. “Dado este nuevo escenario epidemiológico y anticipándonos a esa situación, con recursos propios y de manera transitoria, hemos ido adelantándonos y habilitando más camas en espera de que lleguen los cargos aún pendientes”.
El Minsal
Consultados específicamente por la estrategia de reconversión de camas y la integración del sistema privado para aumentar la capacidad del sistema y atender a los pacientes que se compliquen por influenza en las próximas semanas, desde el la Subsecretaría de Redes Asistenciales aseguran que se ha estado trabajando desde noviembre del año pasado a través de su Campaña de Invierno 2024, estrategia que se implementa para el funcionamiento de la red asistencial. Y que en esa línea se han implementado capacitaciones para profesionales y técnicos, además de reforzar la Unidad de Gestión Centralizada de casos a nivel central “para robustecer el sistema de traslados”.
Asimismo, reseñan que siguen realizando vigilancia epidemiológica, virológica y fortaleciendo la red asistencial, que incluye la participación de distintos actores, así como haber decretado Alerta Sanitaria el 13 de marzo, “que otorga facultades extraordinarias para enfrentar el aumento de virus respiratorios estacionales y faculta a la subsecretaría para coordinar la red pública y privada del país”.
“Se han realizado reuniones semanales tanto con los servicios de salud y seremis como con privados para monitorear la demanda asistencial y tomar definiciones en forma oportuna, las cuales se han ido implementando progresivamente de acuerdo a las realidades locales y contextos macrorregionales”, añaden, lo que “por su puesto” ya ha iniciado la reconversión o complejización de camas.
La Tercera, además, consultó particularmente sobre la reducción de recursos que mencionaban desde La Florida, así como si hay redestinación de recursos, ante lo que desde la subsecretaría contestaron que lo principal es el fortalecimiento de los programas de salud respiratoria y los dispositivos de urgencia del nivel primario. “En este sentido se consideraron recursos para reforzar recurso humano profesional y técnico, lo que incluye financiamiento para horas médicas para aumento de disponibilidad de consultas de morbilidad en Cesfam y SAPU; horas de enfermería para apoyo de vacunación e inmunización; horas kinésicas para refuerzo y extensión horaria salas IRA Y ERA y SAPU, y refuerzo de horas TENS para apoyo de vacunación e inmunización”.