El accidente ferroviario del pasado jueves 20 de junio ha causado conmoción tanto a nivel nacional como internacional. Y es que debido a la magnitud del evento, que involucró a un tren de la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE), que se encontraba en una prueba de velocidad sin pasajeros, y otro de la compañía de Ferrocarril del Pacífico S.A. (Fepasa), que viajaba hacia el norte con material de carga, dos personas de la última máquina fallecieron y otras nueve, que viajaban en el tren de EFE, resultaron heridas. Cuatro de ellas de origen chino.
El incidente ocurrió a eso de las 00:15 horas cuando el tren de la compañía Fepasa circulaba con la carga de sur a norte, mientras que por la misma línea -pero en sentido contrario- se enfrentó con la máquina de EFE y sus trabajadores, quienes se encontraban realizando las últimas pruebas para los nuevos trenes que serían utilizados próximamente en el recorrido de Santiago a la Región de O’Higgins.
En ese trayecto los trabajadores chinos se encontraban en representación de la Corporación de Material Rodante de Ferrocarriles de China (CRRC), empresa estatal china encargada de fabricar los trenes para EFE tras ganar una licitación por parte del Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones (MTT) en 2022. Su rol dentro del proyecto era de técnicos encargados de verificar el funcionamiento de los distintos softwares de los trenes y revisar los parámetros cargados al sistema.
Su testimonio de los hechos resultó una pieza fundamental en la audiencia de formalización en contra de los dos detenidos por el accidente ferroviario el sábado pasado -el maquinista y el encargado de control de la empresa EFE, R.L.S. y J.M.M.-, quienes fueron imputados por cuasidelito de homicidio en el Juzgado de Garantía de San Bernardo.
Durante la audiencia, la fiscal Pamela Torres, quien está a cargo de la investigación, leyó un testimonio de uno de los testigos de nacionalidad china presentes en el accidente, traducido por un profesional designado durante el viaje y cuyo trabajo era lograr una comunicación efectiva entre los trabajadores extranjeros y sus pares nacionales.
“Al lado mío, dos asientos más allá, un técnico chino, el señor Ma. Cuatro asientos atrás mío estaba el señor Wu. El tercer técnico estaba en otra cabina, que sería el señor Chang. Y el tren tiene cuatro coches, incluida la cabina del maquinista”, afirmó en su testimonio el técnico chino. Señaló también que estaban junto a ellos en el tren dos maquinistas y tres personas del proyecto de ferrocarriles.
El testigo chino señaló durante la declaración que la prueba de esa noche consistía en medir el ruido de la máquina a 120 kilómetros por hora; que esta inició su viaje a las 21:00 horas en punto y se repitió durante todo el trayecto hasta la hora del incidente, a eso de las 00:00.
Durante la declaración se le consultó cuándo logró percatarse de que un tren venía en sentido contrario: “Yo estaba sentado contra la sala de conducir. Recién me di cuenta cuando el maquinista gritó ‘¡Corre!’. Me paré y salí corriendo hacia el lado contrario de la sala del maquinista”, agregó.
El técnico, además, afirmó a la fiscal que alcanzó solo a correr tres o cuatro asientos cuando sintió el golpe de los trenes.
A eso también agregó no haber sentido que el maquinista bajó la velocidad al momento del impacto y que tampoco sintió que hubiesen apretado el freno de manos.
En cuanto al rol que cumplían los otros tres técnicos, el trabajador chino aseveró que todos estaban de apoyo en labores de sonido para la máquina.
La Tercera solicitó a la Empresa de Ferrocarriles del Estado actualización del estado de salud de los cuatro pasajeros chinos involucrados en el accidente de trenes. Hasta el cierre de esta edición no se tuvo respuesta.