Tres ejecutivas de la farmacéutica china Sinovac Biotech detallaron al gobierno del Presidente Gabriel Boric problemas para llevar adelante su plan más ambicioso en Chile.

El pasado jueves 17 de noviembre al mediodía, representantes del gigante chino, que junto a Biotech produjo una de las vacunas para combatir el Covid-19 a nivel global, asistieron a una reunión con el ministro de Economía, Nicolás Grau.

En el encuentro la gigante asiática, que resultó ser pieza clave como proveedor de las dosis en la pandemia, estuvo representada por Deyu Jiang, Min Liang y Virginia Garretón, gerenta general, directora de administración y vicepresidenta de asuntos corporativos de Sinovac Biotech Chile, respectivamente.

“Quisiéramos presentarle al ministro y a los colaboradores que considere pertinente, las dificultades que hemos experimentado en Chile para llevar adelante inversión de alta tecnología y particularmente para la instalación de capacidades de producción de vacunas”, consignó el acta oficial del encuentro.

“Creemos que nuestra experiencia puede servir para el diseño de políticas públicas de reinversión en industrias tecnológicas. También, quisiéramos compartir nuestra experiencia con políticas implementadas en otros países de Latam, que pueden ser un referente interesante”, añadió el mismo documento al que tuvo acceso Pulso.

Corría finales de abril de 2021, cuando en un conversatorio organizado por la Facultad de Comunicaciones de la Universidad Católica en conjunto con el Instituto de Inmunología e Inmunoterapia (IMII), el rector de esa casa de estudios, Ignacio Sánchez, develó que la farmacéutica tenía planes para establecerse en el país y contar con una “mirada regional”, y además, avanzar en la producción nacional de vacunas contra el Covid-19.

La noticia fue un hito a nivel regional. Se trata de la primera fábrica de manufactura y envasado de vacunas de Sinovac. No sólo significa una potente inversión, sino que también en paralelo, la iniciativa de la firma conlleva un polo de investigación y desarrollo.

El pasado 13 de mayo, autoridades de gobierno, parlamentarios, empresarios y miembros del mundo científico dieron inicio a la construcción de la planta de Sinovac Biotech Chile en la comuna de Quilicura, al norte de la Región Metropolitana.

En el acto, Sinovac detalló que el proyecto considera una inversión de US$100 millones y que tiene la capacidad de producir hasta 50 millones de dosis al año para enfermedades como Covid-19, influenza, hepatitis A y otras en el futuro, las que se podrán distribuir con mayor celeridad, tanto en Chile como al resto de la región.

El plan de la compañía china era comenzar la producción a fines de 2022, pero su plan presentaría atrasos debido a temas de diseño. “Ellos querían instalar una planta prefabricada en la propiedad de Quilicura, pero obviamente en Chile no es tan aplicable el copiar y pegar. Entonces, creo que están en etapa de diseño y todavía están con etapas de habilitación”, explicó un cercano al proyecto.

Respuesta oficial

A raíz de las dificultades expuestas por Sinovac, Pulso envió consultas al ministro Grau y desde el Ministerio de Economía enviaron una declaración institucional:

“Nos hemos reunido con Sinovac, así como también con otras empresas de distintos rubros, para conversar sobre el escenario para la inversión en Chile. La inversión extranjera es un componente importantísimo para la recuperación de la economía y la transición hacia una economía más verde basada en el conocimiento. Estamos trabajando activamente a través de InvestChile para atraer a compañías con proyectos que sean un aporte positivo en la calidad de vida de los chilenos y chilenas, junto con el plan Invirtamos en Chile que busca abordar los principales desafíos para la inversión en el país”, dijeron desde la cartera.

Problemas

En al menos tres ocasiones, representantes de Sinovac Biotech han manifestado su preocupación a autoridades chilenas durante 2022, según la plataforma de InfoLobby, que es administrada por el Consejo para la Transparencia.

La primera de ellas ocurrió el 15 de marzo en una audiencia con el director (s) del Instituto de Salud Pública (ISP), Heriberto García.

Según el acta, desde Sinovac preguntaron al ISP por los permisos que necesitaban para poder ingresar a Chile productos que actualmente se encuentran en China en fase preclínica y que no tienen registro en ningún país. Estos productos serían utilizados por alguna universidad para investigación.

En la reunión, el ISP les indicó que para ingresar estos productos al país deben solicitar un permiso en Aduanas. También consultaron si ellos podían registrar un producto nuevo con estudios clínicos realizados en otros países, a lo que el ISP respondió que “es posible cuando los antecedentes proporcionados son suficientemente robustos”.

La segunda, tuvo lugar el 25 de marzo, y fue ante la municipalidad de Quilicura. Según el registro del encuentro, los ejecutivos de la farmacéutica expresaron el interés en mostrar al municipio “los desafíos de gestión de basura ilegal que debemos enfrentar en los alrededores de nuestra planta, la precariedad de los accesos públicos, y conocer mecanismos que puedan existir en la comuna para coordinarnos con las instituciones pertinentes para temas de seguridad que prevemos podrían presentarse en el futuro”.

Posteriormente, el 10 de mayo acudieron a la Delegación Presidencial para sostener una reunión con el jefe del Programa de Orden Público y Seguridad de la Región Metropolitana, René Martínez. En la cita, Sinovac sostuvo: “Nos interesa conversar con la delegada la situación de seguridad y delincuencia que se vive en la comuna de Quilicura. Este es un tema que hemos conversado con la alcaldía y cuyas consecuencias nuestros trabajadores están viviendo dolorosamente también, al igual que los demás habitantes de la comuna”.

Desde Sinovac Biotech Chile declinaron responder consultas sobre este artículo.