Durante la madrugada de este lunes un artefacto explosivo detonó en las afueras del edificio de la Dirección General de Gendarmería en el centro de Santiago.

La propia institución emitió un comunicado detallando que “siendo aproximadamente las 02:47 horas de hoy, en el exterior de la Dirección Nacional de Gendarmería de Chile, ubicada en Rosas 1264, Santiago, se sintió un fuerte ruido provocado por la explosión de un artefacto explosivo instalado en las afueras del edificio, entre el acceso vehicular y el acceso principal”.

Por su parte, el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Hernán Larraín, se refirió a lo ocurrido haciendo un llamado a terminar con los hechos de este tipo. “En la madrugada de hoy, la Dirección Nacional de Gendarmería fue objeto de un atentado explosivo, afortunadamente sin víctimas humanas. Basta ya de la violencia. En nuestro país, solo con diálogo, solo con entendimiento, lograremos la paz. No queremos mas grupos pequeños, anárquicos, que vengan a destruir el Estado de Derecho democrático en Chile”, expresó el secretario de Estado.

La Fiscalía de Alta Complejidad y Crimen Organizado de la Regional Metropolitana Sur dictó las primeras diligencias para esclarecer lo ocurrido.

Se evalúan los daños y no hubo personas lesionadas.

Al lugar se trasladó personal del Grupo de Operaciones Especiales de Carabineros, además de efectivos del Laboratorio de Criminalística (Labocar) y el departamento OS9 de la institución.

Producto del suceso fue cortado el tránsito en calle Rosas entre Morandé y Teatinos, y según fue dado a conocer por el Ministerio de Transportes, la interrupción se extenderá por varias horas.

La detonación tiene lugar a días de conocerse la confesión de Francisco Solar respecto a su autoría en atentados explosivos ocurridos en la capital hace un par de años, entre ellos el frustrado ataque con una paquete bomba al exministro del Interior Rodrigo Hinzpeter.

La institución penitenciaria ha sido blanco de varios ataques. El 2018 se condenó a Kevin Garrido (21) y Joaquín García (25) por colocar una bomba en la Escuela de Suboficiales Gendarmería ubicada en San Bernardo en 2015. El 2010 una oficina de Gendarmería en Ñuñoa fue atacada con bombas molotov y en mayo de 2009 el anarquista Mauricio Morales falleció en las inmediaciones de la Escuela de Gendarmería en avenida Matta, luego que le estallara un artefacto explosivo artesanal hecho con pólvora negra.