Los aires de cambio se están sintiendo en el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH). Y es que con la llegada ya formalizada de tres de los cuatro nuevos consejeros -la licenciada en Ciencias Jurídicas y Sociales Constanza Valdés, la abogada Lieta Vivaldi y el abogado Francisco Ugás-, las fuerzas al interior del organismo se rebarajaron y la mayoría quedó en manos de quienes cuentan con el apoyo del actual gobierno, con lo que se prevé un complejo término de gestión para Sergio Micco como director de la institución.
De hecho, a sólo 16 días de que el abogado DC cumpla su periodo a la cabeza de la entidad, cinco de los ocho consejeros presentes en la sesión de ayer lunes plantearon la necesidad de que Micco renuncie, dadas las fuertes críticas que suscitó su labor en relación con el estallido social y las acusaciones de violaciones a los derechos humanos a Carabineros.
Como sostuvieron por medio de la carta que firmaron Constanza Valdés, Lieta Vivaldi, Consuelo Contreras, Francisco Ugás y Yerko Ljubetic -tres de los cuales se estrenaron recién durante la pasada jornada en el cargo-, el aún director sería el responsable de la profunda crisis que vive el organismo, afectando “su trabajo, legitimidad y que ha significado una vulneración de derechos fundamentales de sus trabajadores”.
“Se han intervenido unidades estratégicas, se han producido renuncias masivas, auto despidos, remociones de jefaturas de forma arbitraria y prácticas antisindicales, entre otras, han sido algunas de las acciones que han afectado el trabajo interno del Instituto”, argumentan los representantes, agregando que “la relación con un gran sector de la sociedad civil, y especialmente aquella que forma parte del registro del INDH, es, también, prácticamente inexistente”. Lo mismo ocurría, a juicio de ellos, con los débiles lazos que se han establecido con otros Poderes del Estado.
De acuerdo con los consejeros firmantes, la crisis institucional “ha sido consecuencia de una administración negligente y deficiente suya. De esta manera, el INDH ha dejado de cumplir su mandato legal y esto ha impactado negativamente, sobre todo en un contexto donde han existido violaciones sistemáticas a los derechos humanos, desatendidas por el Estado, y ante las cuales tenemos un deber institucional que nos obligan a actuar de manera más consistente y eficaz”.
Y continúan: “En tal sentido, y fundados en lo señalado y, especialmente, en la responsabilidad y debida diligencia con que debemos actuar dada nuestra calidad, le solicitamos a Ud. su renuncia inmediata al cargo de Director Nacional de la institución. Estamos convencidas y convencidos que debemos dar paso a una nueva administración, que pueda recomponer los lazos con la sociedad civil, y con las funcionarias y los funcionarios; recuperar la confianza de la ciudadanía; y, tenga la capacidad para dirigirnos a nuestro primordial objetivo: promover y proteger los derechos humanos en nuestro país”.
Según lo detallado por los firmantes, Fernando Pairican -el consejero nombrado por el Presidente Gabriel Boric- no habría suscrito el documento porque aún el decreto que formaliza su incorporación no ha sido presentado por el gobierno. Y de hecho, esa situación, sumado a que la Cámara aún no designa al sucesor de Eduardo Saffirio -quien culminó su gestión hace algunos días-, habría hecho que quienes promueven la salida de Micco no tuvieran la mayoría absoluta y no pudieran concretar su anhelo.
De todas maneras, el punto político y comunicacional se hizo y, en ese sentido, el abogado DC acusó recibo. Como complementaron fuentes conocedoras de la discusión que se dio en la sede nacional del INDH, el aún director habría expresado que está dispuesto a dar un paso al costado en la medida que se obtenga la citada mayoría. Esto -subrayaron los mismos personeros- porque él entendía que habría un cambio en las posiciones y una pérdida de confianza.
Cabe precisar que en la sesión tampoco estuvo presente el consejero Carlos Frontaura, quien presentó sus excusas.
Nuevo recurso
Si bien lo ocurrido en torno al futuro de Micco captó parte importante de la sesión, al igual que lo referente a la bienvenida de los nuevos integrantes del Consejo, lo cierto es que en la tabla de la jornada hubo otro punto que también implicó debate: presentar o no una acción de protección por lo que ocurre en la denominada zona de sacrificio de Quintero y Puchuncaví.
En ese sentido, los consejeros presentes aprobaron interponer un recurso en ese sentido y enviar una misión de observación a la zona. Esto, por los daños que ha implicado la contaminación en la salud de las personas y la eventual inacción del Estado ante ello.
Los detalles, de acuerdo con lo acordado, se analizarán la próxima semana.