A más de un año de que fueran retiradas para su restauración, el emblemático par de esculturas de leones de Providencia regresó a este lunes a su habitual ubicación frente a la Catedral Castrense.
“Había dos leones originales que eran franceses y los tenía don Ricardo Lyon a la entrada de su chacra, y luego los donó a la Municipalidad de Providencia y así le dieron el nombre a todo este sector. Los originales se perdieron y realmente no se sabe qué pasó con ellos, pero se hicieron réplicas, que son las que están aquí. Estaban en muy malas condiciones y, aprovechando la ampliación de este paseo peatonal, los enviamos a restaurar”, explicó la alcaldesa Evelyn Matthei, destacando estas obras que dan nombre a la avenida Los Leones y que son parte del patrimonio histórico de la comuna.
La jefa comunal expresó su satisfacción por el retorno de las esculturas y llamó a la ciudadanía a cooperar con su cuidado.
“Hay otras ciudades que tienen mucho respeto por sus monumentos, por lo que llamo a cuidarlos, porque la ciudad es para todos”, dijo.
Según información del Archivo Histórico de Providencia, las estatuas originales fueron hechas en bronce por el escultor francés Antonie Louis Barye (1765-1875). Los leones que se ubicaban en la plazuela del mismo nombre habrían sido destruidos, sin embargo, debido a su importancia para Providencia, el 5 de enero de 1956 el municipio inició el proceso para replicarlos y en 1958 se instaló la primera escultura y dos años después, la segunda. El desfase entre uno y otro se debe a problemas con la fundición a cargo de esta tarea.
Con seis décadas ya desde su instalación, el año pasado el par de monumentos fue retirado para una renovación, en el marco de la ampliación del paseo peatonal del sector.
Desde el municipio explican que los dos leones fueron ubicados ahora en unos nuevos basamentos, de dos metros de altura, con una moldura de base de hormigón más pequeña, con el fin de dejar un espacio abierto y amplio para que peatones puedan transitar con mayor comodidad.
La restauración fue realizada en el taller Montes Becker, con gran experiencia en trabajos en monumentos de gran tamaño. Este estudio es el mismo que se encargó del monumento al general Manuel Baquedano.
Luis Montes Becker, a cargo del proyecto de restauración del par de esculturas felinas, precisó que los trabajos consistieron en “limpiar en su totalidad cada uno de los leones para posteriormente hacer un diagnóstico más preciso de los daños que tenían, desde el punto de vista superficial y estructural”.
“Luego de soldar y estructurar internamente las esculturas, se repusieron las partes volumétricas que no tenían y se hizo un trabajo escultórico para poder acentuar los detalles y volúmenes repuestos”, detalló.