A casi un año desde que quemaron el Metro Pedrero, este miércoles, en el Séptimo Tribunal Oral de Santiago se inició el juicio en contra de Daniel Morales y su sobrino B.S.M. (17), acusados por la Fiscalía Oriente de prender fuego a la estación, el 18 de octubre de 2019. El Ministerio Público pide 20 años de cárcel para el adulto y 10 años de internación provisoria para el menor de edad.
B.S.M. fue el primer detenido por estos hechos, luego de 93 ataques a estaciones desde que comenzaron las manifestaciones por la crisis social. De ellas, ocho fueron completamente quemadas, entre las que está Pedrero, la que fue reparada en mayo tras sufrir destrozos avaluados en $ 615 millones.
“Vamos a hacer su atentado al Metro. Planearlo bien primero, y llegar y hacer certero todo. Todos encapuchados. Porque la estación la vamos a hacer cagar”.
“Estas son las palabras textuales del adolescente en el chat de WhatsApp incluido en su celular que portaba al momento de su detención. Esta es la invitación que le hace a su tío casi un día antes de ejecutar la acción, que se concreta el 18 de octubre, a las 22.14. Su tío aceptó la propuesta. Y la cumplió”, dijo el fiscal Omar Mérida, al comenzar los auto de apertura del proceso judicial.
Según el persecutor, esto da cuenta de que “no es un hecho espontáneo, casual, no es que durante una manifestación social haya aparecido un impulso. Aquí hay un concierto previo, clarísimo, como pocas veces se ve en juicio, una invitación a destruir”.
Señaló que luego los acusados ejecutaron el incendio, lugar donde había en ese momento cerca de 30 personas. “El adolescente actuó directamente sobre el único foco que existió en la estación, provocando que este fuego incipiente se transformara en un incendio ingobernable”. Y agregó que “probaremos que se jactó ampliamente de esto en redes sociales y que aquello fue lo que nos condujo a la identificación”.
Mérida dijo que mostrarán al tribunal peritajes telefónicos, videos, testigos y pruebas de bomberos.
Carlos Flores, abogado querellante del Ministerio del Interior, indicó que luego de quemar la estación, los acusados “celebraron en el lugar con cánticos y fotos, y eso fue puesto en páginas de la Garra Blanca oficial”.
Rodrigo Román y Lorenzo Morales, abogados del menor de edad y del adulto, respectivamente, negaron la participación de sus representados en el incendio. “La fiscalía no tiene testigos presenciales, solo hay cámaras de seguridad que los sitúan en el lugar y mensajería”, dijo Román. Añadió que en este caso “hay una presión política importante”.
En tanto, el defensor de Morales indicó que la fiscalía no tiene pruebas para probar la concertación entre ambos acusados, ni tampoco el dolo". Y agregó que en este caso “hay una intromisión del poder político”.
En la fiscalía estiman que el juicio podría extenderse por máximo tres semanas.