Una nueva medida anunció el gobierno para disminuir el porcentaje de personas que circulan por las zonas que se encuentran bajo cuarentena, en el marco de las medidas para intentar frenar la propagación del coronavirus. Ahora, la iniciativa apunta a las compras que se están realizando a diversas empresas y definir “la determinación exacta” de los bienes que son considerados esenciales y que pueden ser adquiridos, pese al confinamiento.
La elaboración de este listado quedó en manos del Ministerio de Economía, el que deberá establecer una especie de “catálogo” de los alimentos, medicamentos y otro tipo de productos esenciales de uso doméstico, los que se podrán distribuir por medio de plataformas de delivery.
Actualmente, de acuerdo al instructivo para desplazamiento del 19 de junio, se puede generar delivery de alimentos, remedios y bienes esenciales para el hogar. No obstante, en el Ejecutivo notaron que la definición era demasiado amplia y que bajo esta categoría se estaba despachando una gama muy amplia de productos. Este puede ser uno de los factores que influyen en que la movilidad en las áreas con cuarentena no se haya reducido todo lo que se proyectaba. En la Región Metropolitana, por ejemplo, durante el primer mes de confinamiento solo disminuyó un 35%.
La subsecretaria para la Prevención del Delito, Katherine Martorell, indicó que “creíamos que era suficiente esa descripción para que las empresas comprendieran qué era esencial”, y anunció que “dado que esto lamentablemente no es así, van a establecer este catálogo”. La subsecretaria añadió que “eso lo va a dar a conocer el Ministerio de Economía a la brevedad”.
Por otro lado, la ministra del Trabajo, María José Zaldívar, indicó que el gobierno revisará periódicamente si la interpretación o la aplicación de los criterios sobre bienes esenciales “ha tenido una suerte de extensión, que no era lo que se estaba buscando”.
Respecto de esta situación, el lunes el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), una de las ramas de la CPC, Manuel Melero, también criticó las malas prácticas, aunque hizo un llamado a la autoridad.
“El acto de infringir una norma es condenable, pero hay que entender que mientras más se dilate, mayores van a ser los artículos que van a tener que empezar a definirse como esenciales. Las autoridades deberían ampliar el criterio y redefinir lo que se considera esencial”.
Manuel Melero, presidente CNC
Melero profundizó sobre este punto, indicando que “el tema de las actividades esenciales y las que no es bien relativo y aleatorio, porque ¿qué es esencial y qué no? Al inicio de la crisis lo esencial eran los alimentos y medicinas, pero conforme ha ido avanzando empiezan a hacerse esenciales otras cosas”.
En el Ministerio de Economía afirmaron que si bien están trabajando en ese catálogo, es algo “complejo de definir”, ya que llegar a establecer qué es esencial para cada hogar no fácil. Por ello, no hay plazos para su publicación. Ahora bien, afirmaron que su estrategia apunta a la autorregulación de las empresas, así como fiscalización.
En ese sentido, resaltaron la mesa de trabajo público-privada que están desarrollando junto a la CPC. En esta instancia, el foco está puesto en la autorregulación de las empresas para el cuidado de sus trabajadores, con el objetivo de evitar malos usos relativos a los permisos y aplicar criterios restrictivos a la hora de definir la cantidad de personas que deben asistir a sus lugares de trabajo.
Fiscalizaciones
El anuncio de la creación del “catálogo” de bienes esenciales se realizó luego de las denuncias contra empresas que, según se investiga, habrían realizado irregularidades para continuar operando pese a las restricciones sanitarias. Por este motivo es que Martorell, Zaldívar y el director general de la PDI, Héctor Espinosa, anunciaron la creación de un número para que las personas denuncien a las compañías que están realizando malas prácticas. Una de estas, y que hoy es objeto de investigación del Ministerio Público, es adulterar el rubro ante el Servicio de Impuestos Internos.
Zaldívar indicó que “no puede ser que mañosamente yo modifique mi giro para estar haciendo algo que no corresponde. Y ese es un primer llamado a la responsabilidad de las empresas. No puede ser que se estén dando casos como el que conocimos ayer”.