“La razón es muy sencilla: el gobierno estratégicamente trabajó dos líneas de acción paralela”. Así empieza explicando la expresidenta del Tribunal Constitucional (TC), Marisol Peña, el por qué no participó del segundo requerimiento ingresado por el gobierno para que se declare inconstitucional el tercer retiro del 10% de los fondos previsionales y así evitar que éste finalmente se efectúe. La abogada había sido la persona elegida por el Ejecutivo para encargarse de esta presentación. Sin embargo, al final el Ejecutivo decidió, para este segundo intento de La Moneda, encargar el patrocinio del requerimiento al tribunal al constitucionalista, Gastón Gómez.
¿Por qué Peña quedó fuera? La constitucionalista explicó que “en primer lugar, considerando que eran cinco las mociones parlamentarias que originalmente pretendían materializar el tercer retiro de los fondos previsionales, de los cuales tres se referían a disposiciones transitorias de la Constitución y dos modificaban disposiciones permanentes, el encargo que me efectuó el gobierno fue preparar un documento relacionado con la modificación eventual a disposiciones permanentes de la Constitución, lo cual fue rechazado por la Cámara en su sesión del jueves pasado, aprobando subir al Senado las modificaciones vías disposiciones transitorias de la Constitución para materializar este tercer retiro”.
“Si se hubiera aprobado la modificación vía disposiciones permanentes, indudablemente habría sido yo la que estaría pronta a alegar ante el Tribunal Constitucional y no el abogado Gastón Gómez, que estaba trabajando en la otra línea”, aseguró Peña.
En ese sentido, descartó que el gobierno haya decidido que ella no alegaría este requerimiento por supuestas diferencias que había tenido al interior del TC con la actual presidenta del organismo María Luisa Brahm, tal y como algunos de los jueces interpretaron frente a este cambio de estrategia.
Brahm fue jefa de asesores del segundo piso de La Moneda durante el primer periodo presidencial del Presidente Sebastián Piñera.
Respecto a cómo ve el escenario en este nuevo requerimiento del gobierno, la abogada señaló que hay una gran ventaja estratégica: “A diferencia de la vez pasada, con el segundo retiro, aquí hay una sentencia, vale decir un precedente muy fuerte. El TC ya se manifestó por la inconstitucional de disponer un retiro de fondos previsionales vías disposiciones transitorias, y lo hizo por razones que a mi juicio son muy contundentes”.
También destaca “el hecho de que no hay ningún proyecto de ley paralelo a la reforma constitucional que se está tramitando y eso es una de las razones levantadas por los ministros disidentes en el fallo de diciembre pasado para rechazar el requerimiento del Presidente de la República”. Por lo tanto, cree que en este caso los ministros disidentes han perdido un argumento.