Intentaron adulterar las patentes, pero las combinaciones de letras y números, asociados a las marcas de los vehículos fueron el rastro perfecto para que oficiales de la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (BIPE) de la PDI pudieran reconstruir la ruta que hicieron la noche del martes 6 de octubre. El levantamiento de cámaras de seguridad públicas y privadas fue clave para que los policías pudieran dar con las identidades de quienes esa jornada se concertaron para ir hasta el domicilio de la fiscal de Alta Complejidad Centro Norte, Ximena Chong, y dejar una carta con una amenaza de muerte motivada por la formalización por homicidio frustrado que la investigadora protagonizó dos días antes en contra de un carabinero que impulsó a un adolescente al río Mapocho en medio de una jornada de manifestaciones.

Este viernes, la jueza Tatiana Escobar decretó la prisión preventiva de Pablo Martínez Castro, uno de los ocho imputados por las amenazas de muerte contra la investigadora, pero que además se le imputó la tenencia de una arma de fuego prohibida. En su domicilio de Quinta Normal la policía, en medio de allanamientos por su detención, encontró una subametralladora UZI. El fiscal regional Centro Norte (S) Francisco Jacir apelará a la decisión que adoptó el tribunal en una audiencia que en algunos pasajes fue secreta para el público y que al finalizar sólo aplicó prisión preventiva para uno de los ocho formalizados. ¿Cómo logró la PDI dar con las identidades de los imputados? Según se desprende de la indagatoria, la cantidad de cámaras de seguridad con la que cuentan las comunas de Providencia, Las Condes y Vitacura permitieron reconstruir la ruta de quienes hoy son sindicados como miembros de un grupo de extrema derecha que buscaba amedrentar a Chong.

Testigos a quienes se le tomó declaración y las imágenes levantadas permitieron establecer primero la cantidad de automóviles y personas involucradas. La fiscal Chong y su hijo hacían referencia a dos hombres que montados en una moto dejaron un sobre en el buzón de la casa tras hacer sonar varias veces el motor de sus vehículos. Pero no eran dos. Eran ocho las personas que ese día vigilaban a sólo metros la casa de la Jefa de Alta Complejidad. La BIPE estableció la presencia de tres vehículos y dos motos que en una especie de “caravana” se trasladaron por el sector oriente ese día. Durante la audiencia, el fiscal Jacir detalló que el primer auto individualizado fue el del imputado Fernando Hasler, quien ese día manejaba un auto marca Hyundai, modelo Santa Fe. También las imágenes registraron un Volvo gris de propiedad de Solange Aravena y un automóvil Hyundai modelo Veloster blanco asociado a la también imputada Paula Narváez. Las motocicletas identificadas son de Daniel Goldberger y Pablo Martínez.

Al rastrear la ruta, la policía se dio cuenta que esa noche todos los imputados se juntaron en una oficina de avenida Apoquindo a la altura del 6000 en la comuna de Las Condes. “Ahí se planificó el delito”, dijo el fiscal Jacir. De la revisión del libro de ingreso y cámaras de seguridad de ese recinto, se determinó las identidades del resto de los imputados, los copilotos: Gabriel Jara, Benjamín Zaragoza y Osvaldo Urcola.

La ruta de la caravana

A las 18:00 horas ese día, según lo que se expuso ante el tribunal, los imputados llegaron hasta una oficina de Las Condes que era ocupada por uno de los comandos del Rechazo, grupos que participaban de marchas en contra de la posibilidad de escribir una Nueva Constitución. Dos horas y 50 minutos estuvieron en el recinto y a eso de las 20:55 abordaron los vehículos con rumbo a la casa de Chong. De eso quedó registro en múltiples imágenes de las cámaras de seguridad de Santiago. Al llegar los imputados a las inmediaciones del domicilio de la investigadora, el grupo se dividió y cada auto tomó un rumbo distinto. Mientras los motoristas dejaban la misiva que en un sobre simulaba ser del FPMR, el resto de los vehículos se mantenía en constante movimiento por el lugar. Goldberger y Martínez fueron quienes dejaron la carta. Al finalizar su cometido, todos tomaron distintas direcciones.

El fiscal Jacir dijo en audiencia que los imputados planificaron el delito, y distribuyeron funciones, lo que consistía en observar desde distintos puntos de vista el lugar procurando que el mensaje llegara a manos de la fiscal Chong e intentando no ser detectados por las personas que transitaban a esa hora en el sector. “En relación a las vigilancias realizadas a los imputados, se estableció que estos participan activamente en las marchas del Rechazo”, dice un informe de la BIPE que da cuenta de fotografías de los imputados en manifestaciones en Las Condes y de su pertenencia a una facción de Vanguardia, un grupo de extrema derecha.

Las otras amenazas

La investigación por las amenazas de muerte contra la fiscal Chong comenzaron dos días antes de este hecho. El 4 de octubre y mientras formalizaba al carabinero Sebastián Zamora por homicidio frustrado en contra de un adolescente de 16 años que impulsó al río Mapocho, recibió el primer amedrentamiento a través de Redes Sociales. El usuario ‘Reimon Reddintong” escribió: “Que empiece a caminar mirando para atrás mejor” y luego difundió el domicilio particular de la investigadora. La situación hizo que el fiscal regional Xavier Armedáriz abriera una causa de oficio y se designó a Jacir quien ordenó rondas para seguridad de la abogada y su familia.

Fue ahí donde se produjo el hecho que fue formalizado esta semana. Chong por esos días seguía siendo blanco de los hostigamientos y amenazas de muerte a través de sus redes sociales. “Pronto te vas a ir mujer y vas a caer tú y tu afán de eliminar Carabineros, recuérdate nomas la vida se te hará imposible”, fue uno de los tantos mensajes que recibió. Sin embargo lo de la carta determinó una vigilancia continua de la PDI en su casa. Fue así como el 7 de octubre se produjo un incidente que involucró al teniente coronel de Carabineros Fredy Vergara, quien fue controlado en las inmediaciones de la casa de Chong luego que vestido de civil y montado sobre una moto hiciera un gesto, según la PDI, frente al domicilio de la investigadora. El policía negó saber que por ese lugar vivía Chong.

Interrogado por la PDI en esta investigación dijo que ese día quería ir rumbo a hacerle un arreglo a su motocicleta y se perdió en las calles y decidió entonces devolverse y seguir la ruta cotidiana de su trabajo. “¿Por qué bajó la velocidad frente a la casa de Chong?” le preguntó un comisario de la BIPE exhibiéndole un video, ante lo que el oficial de Carabineros aseguró que “Es debido a que se encontraba un vehículo que me llama la atención estacionado contra el sentido de mi circulación y miré buscando señalización que indicara la dirección de las calles, sin saber el domicilio de residencia de la Fiscal”.

Consultada sus redes sociales, dijo que tenía instagram, Linked In y un Facebook falso bajo el nombre “Freddy Charles Krueger”. “Debo hacer presente que no tenía conocimiento que vivía la fiscal Chong en ese lugar”, sostuvo.

El 10 de octubre hubo otro incidente del que dejaron registro los PDI. A las 2:00 horas y mientras hacían punto fijo en casa de Chong una ambulancia particular transitó por el lugar. Luego dos sujetos vestidos con ropa de camuflaje tipo militar se bajaron y le preguntaron a los policías “¿Acá vive la fiscal Chong?”, “¿Ustedes son los de la Unidad de Derechos Humanos?”. Ante el extraño episodio los efectivos de la BIPE controlaron la identidad de ambos sujetos quienes dijeron que estaban ahí por curiosidad. No resultando blancos de la investigación, los dejaron ir.