Obispo Durán queda inhabilitado temporalmente de la dirección nacional de la Primera Iglesia Metodista Pentecostal

Tras una reunión que se prolongó por casi tres horas en las oficinas administrativas de la Catedral Evangélica, y con la presencia del obispo Eduardo Durán Castro, el pasado martes 30 de abril el directorio de la Primera Iglesia Metodista Pentecostal decidió inhabilitarlo temporalmente del cargo. Por un periodo de cuatro meses estará a la cabeza de la iglesia a nivel nacional el vicepresidente y pastor Daniel Balladares Benavides, junto con el directorio.

Este tiempo se entregó para que el obispo pueda "solucionar su problema jurídico" con la Catedral Evangélica, donde la junta oficial de diáconos busca destituirlo como pastor gobernante. Este proceso se inició luego de que Durán informase que se iba a separar de su esposa para contraer matrimonio con otra mujer. A esto se suma la investigación por presunto lavado de activos que el Ministerio Público indaga en su contra.

"En ningún caso nosotros hemos aceptado la continuidad, al contrario, queremos que esto se solucione lo antes posible, pero era necesario dar este plazo", explicó a La Tercera el secretario nacional Tito Maturana.

El 30 de agosto se cumplirán los 120 días que le entregó la directiva nacional para que el obispo regularice su situación, por lo que ese día se designará la fecha y el lugar de la conferencia extraordinaria de pastores. En ese momento, según Maturana, "vamos a comunicar nuestra decisión como directorio, para continuar los caminos jurídicamente ya aceptados, y vamos a resolver la situación con respecto del señor obispo".

Maturana, además, señaló que "quisiera aprovechar de pedir perdón a la iglesia a lo largo del país, y a todas esas familias que fueron afectadas. Pedir perdón a nuestros hermanos de todo esto que hemos sufrido y que tanto nos hemos avergonzado".