"Con el Papa la conversación fue 100% franca": Los detalles del diálogo con Francisco de sacerdote chileno víctima de Karadima

"Estábamos en la Casa Santa Marta, él vive ahí, tú entras de repente a almorzar y el Papa está en su mesa almorzando, con dos sacerdotes. Y se sirve una ensalada. Y él pidió particularmente que cuando entre el Papa al comedor no se pare todo el mundo. Sin pompa, súper simple".

Con esa anécdota, el sacerdote Eugenio de la Fuente comenzó a narrar al programa Nada Personal de Radio Duna sus días como huésped del Papa Francisco en el Vaticano, como parte del grupo de sacerdotes víctimas de abusos de Fernando Karadima en la iglesia de El Bosque.

De la Fuente contó la dinámica de los encuentros, destacando la franqueza en que se realizaron. "El día sábado tuvimos la misa junto con él, el grupo, a las 4 de la tarde. Una misa muy profunda y muy sencilla, él en el altar y movía el libro de un lado para otro. Todo súper normal, como un cura de pueblo, súper sencillo. Llegamos después a una salita, y ahí hubo conversaciones personales del Papa con cada uno", afirmó.

De la Fuente indicó que no ingresó solo al encuentro con Francisco. "Nosotros elegimos tres personas que habíamos tenido una contemporaneidad muy profunda dentro de El Bosque, y preferimos hacerla los tres juntos, porque teníamos media hora en vez de diez minutos. Entonces, la verdad es que estuvimos 40 minutos con el Papa", planteó. "En un momento fue realmente muy emotivo, dice: 'Yo, en nombre de la Iglesia, les pido perdón por lo que han sufrido'", agregó.

Al ser consultado sobre las motivaciones que el Pontífice puede haber tenido para invitarlos, De la Fuente planteó que "tengo la impresión de que el Papa quiso hacer un ciclo con el tema El Bosque, y que éste es el fin de este ciclo. Lo que viene para adelante no lo sé, pero me da la impresión que él quiso hacer un ciclo con las tres víctimas laicas y después con los sacerdotes que experimentaron abuso".

"Con el Papa la conversación fue 100% franca. Yo no siento que haya nada en el tintero que haya quedado por decirse", fue el balance del sacerdote. "Es tremendamente humilde para explicar lo que le pasó, y, en el fondo, profundiza un poco más en esta idea de que realmente no tenía la información veraz y equilibrada para conocer lo que estaba pasando aquí en Chile", sentenció.