El nuevo asalto que se produjo este domingo en un mall, esta vez a la tienda MacOnline del Mall Plaza Egaña, por parte de un grupo armado, interrumpió el descanso de Katia Trusich. La abogada y directora de empresas, que fue subsecretaria de Empresas de Menor Tamaño durante el segundo gobierno de Michelle Bachelet, es desde 2019 la presidenta de la Cámara de Centros Comerciales, y está por estos días de vacaciones en Uruguay,
Desde allí Trusich aborda, telefónicamente, el momento que atraviesa la coordinación en materia de seguridad entre el gobierno, el Ministerio Público y los actores privados. Resalta que están trabajando permanentemente, pero también ve necesario integrar el reconocimiento facial como medida para avanzar en la protección de las personas. Al respecto enfatiza que la encuesta Cadem mostró, en la primera semana de diciembre, un 93% de apoyo al uso de dicha tecnología en centros comerciales.
¿Qué acciones están tomando los malls para hacer frente a los asaltos como el de Plaza Egaña?
-Hace ya un tiempo que nuestros asociados vienen invirtiendo de manera consistente en todo tipo de medidas de seguridad para asegurar que los centros comerciales sigan siendo lugares seguros, familiares, y donde las personas puedan hacer sus compras con tranquilidad. Sin embargo, la ola de delincuencia que hay a nivel país es un hecho público y notorio, y la verdad es que en esto somos víctimas -como muchas otras personas- de estas bandas que están actuando con cada vez mayor violencia.
¿Han tenido reuniones o conversaciones con la autoridad a raíz de este último episodio?
-Sí, estamos en conversación con el ministerio del Interior. Nosotros tenemos además una mesa de trabajo que viene desde hace ya varios gobiernos, funcionando con las policías, con el Ministerio Público y con la subsecretaría de Prevención del Delito, donde tenemos una agenda de trabajo y coordinación permanente. Pero dadas las condiciones de estos últimos eventos, estamos completamente a disposición para ir más allá, y seguir colaborando en integrar tecnología, cámaras de vigilancia y reconocimiento de personas para asegurar que no solamente los centros comerciales, sino que también sus inmediaciones puedan ser lugares seguros.
¿Qué significa ir más allá? ¿Aumentar el uso de tecnología, más inversiones o mejorar la coordinación con las autoridades?
-Nosotros hemos aumentado las inversiones en más de un 30% como sector en lo que es seguridad, solamente en el último año. Lo que estamos planteando ahora es coordinar la tecnología que tenemos, y en la que hemos invertido enormes sumas de dinero, para ponerla a disposición de las autoridades. Ya sea para integrar cámaras o para avanzar en el reconocimiento facial, que es una herramienta que se usa a nivel mundial para identificar personas que son buscadas por las policías y para contribuir, además, a la persecución penal que tiene que hacer el Ministerio Público.
¿Hay alguna señal que estén esperando de parte de las autoridades en este materia?
-Integrar estos recursos que nosotros ponemos a disposición de las autoridades y del Estado es una herramienta importante, porque entendemos que es difícil aumentar las dotaciones de carabineros y aumentar los recursos del Estado. Hay un enorme espacio en materia de gestión tecnológica que nos permitiría ser más eficientes a todos.
Obviamente el monopolio del uso de la fuerza y de armas está en manos del Estado, y creemos que, en ese sentido, podemos colaborar con los mecanismos tecnológicos con que hemos estado trabajando.
¿Entonces no ven el porte de armas por parte de guardias privados como una opción?
-Creemos que el porte de armas es prerrogativa de las policías, y el uso de armas por parte de guardias privados agrega un riesgo a la seguridad de la ciudadanía si no se cuenta con la capacitación y calificación suficiente para usar esas armas. No es una medida que nosotros promovamos. Más bien somos promotores que sigan en manos de las policías. En ese sentido, avanzar en una ley de seguridad privada sería un aporte a tener una mejor calificación y una mayor cantidad de guardias disponibles, en tiempo y en forma, no solamente para centros comerciales, sino que transversalmente para todas las industrias. Hoy día hay una escasez de guardias de seguridad privada, necesitamos que demore menos su certificación.
De todos modos siempre surgen voces en el Congreso que levantan esto como una opción, y por otro lado, ello choca con que los malls se transformaron en la nueva plaza pública. ¿Qué debe considerar entonces una ley para impulsar la profesionalización de los guardias privados?
-Hoy en día, la mayor urgencia es la cantidad de guardias privados disponibles. Ahí hay un tema. Respecto a lo que menciona, y más allá de los eventos aislados que han ocurrido en algunos centros comerciales, que son muy notorios por la visibilidad que tienen, en general las tiendas prefieren estar en centros comerciales porque son lugares muchos más seguros que las condiciones que tienen en la calle. Por tanto, hay que relevar esto en su justa dimensión.
Usted fue subsecretaria de Empresas de menor tamaño y conoce cómo operan los centros comerciales de cerca, ¿cómo describiría el cambio en este tipo de atracos? ¿Son más frecuentes, más violentos, mejor planificados, o todas las anteriores?
-Creo que esto es un fenómeno que se está dando a nivel nacional y transversalmente en todos los sectores. Está ocurriendo una mayor cantidad de delitos y cada vez más violentos también. Los hechos que han ocurrido en el último tiempo dan cuenta de una realidad país que requiere resoluciones de Estado, que los privados, por mucha inversión que hagamos, es difícil que podamos cambiar.
¿Qué pasa con los seguros que tienen las tiendas? ¿Qué cubren y cómo operan en estos casos?
-Más allá de la existencia de seguros ante robos, aquí de lo que se está hablando es de la seguridad. Eso es lo que realmente nos ocupa y la razón por la cual hacemos inversiones y dedicamos mucha energía. Más allá de si hay o no seguros que protejan las mercaderías, ése no es el foco de esta conversación y la preocupación que tenemos. Además, eso es resorte de cada tienda, de cada marca, y es algo en lo cual no tenemos injerencia. No es algo que nosotros podamos administrar.
¿Cuál es el mensaje que han recogido de sus socios, sobre esta oleada de asaltos en los centros comerciales?
-Nos sentimos víctimas, como muchas otras personas en Chile, de esta situación de delincuencia. Entendemos que hay siempre escasez de recursos para múltiples necesidades, pero creemos que hay una oportunidad real en la coordinación entre público y privados.