Luego de tres jornadas de audiencia, el Juzgado de Garantía de La Serena estableció la medida cautelar de prisión preventiva para el capitán del Ejército José Faúndez Sepúlveda y sus subalternos Carlos Robledo Olguín y José Arenas Mancilla, tras ser formalizados por distintos delitos en el caso por la muerte de Romario Veloz en octubre de 2019.
Además, se dispuso arresto domiciliario para un cuarto funcionario del Ejército investigado, Milován Rojas Barrera.
La prisión preventiva fue establecida para el capitán de Ejército y dos conscriptos, Robledo y Arenas, imputados por homicidio simple y homicidio frustrado; y arresto domiciliario y prohibición de acercarse a víctima para el cabo Rojas, imputado por violencia innecesaria.
Se fijó un plazo investigación de 30 días.
El lunes se inició la audiencia en que se reformalizó la investigación en contra del capitán Faúndez y se formalizó a los otros tres involucrados.
Los imputados, el jefe de la unidad y tres de sus subalternos, fueron individualizados como los presuntos autores materiales del crimen.
El estudiante ecuatoriano Romario Veloz Cortez tenía 26 años el día de su muerte.
En diciembre de 2020 el capitán de Ejército José Faúndez Sepúlveda fue formalizado por los hechos que tuvieron lugar a partir de las 18.00 horas del domingo 20 de octubre de 2019, cuando un grupo de efectivos del Ejército acudió hasta el Mall Plaza La Serena por los saqueos que afectaban a las tiendas del centro comercial.
El abogado Nicolás Oxman, defensor de Faúndez, afirmó que su representado instruyó al personal a su mando explícitamente utilizar munición a fogueo. El profesional argumentó que se trata de una persona que estaba a cargo de cincuenta y tantos soldados que si hubieran disparado a su antojo el resultado no habría sido de tres tiradores posibles de seis disparos de balas reales en dos órdenes de tiro, sino que “lo que hubiese ocurrido es una matanza”.
Oxman dijo que los “disparos que se atribuyen a las personas formalizadas en la audiencia, no son sino consecuencia de excesos individuales y no son imputables a mi representado, sino insisto, la lógica manda que los resultados hubiesen sido totalmente distintos”.
“Ahora sabemos, sobre la base de los peritajes balísticos que derechamente aquí lo que ocurrió fue que alguien, las personas que dispararon, lo hicieron al menos con conocimiento de que estaban asumiendo un riesgo que no deberían asumir”, aseguró.
Además del oficial se formalizó a sus subalternos, Milován Rojas Barrera, Carlos Robledo Olguín y José Arenas Mancilla, quienes eran parte de la Unidad Fundamental de Emergencia (UFE 1) que operó esa jornada en la zona en el marco del Estado de excepción constitucional de Emergencia decretado por el Presidente Sebastián Piñera tras el estallido social.
Al cabo Robledo Olguín se le imputan los delitos de homicidio simple consumado y homicidio frustrado. Al soldado Arenas Mancilla se le imputa homicidio frustrado y a Rojas Barrera cuasidelito de lesiones graves gravísimas.
Según el relato de la Fiscalía, tras haber dado la primera orden de fuego, resultando herido en su abdomen Rolando Robledo, a las 18.22 Faúndez ordena una segunda ráfaga de tiros. Una de las municiones impactó y dio muerte a Romario Veloz. Posteriormente César Véliz fue herido en una pierna.