El venezolano Tirone González, Canserbero, era una estrella consolidada en la escena hip hop en español cuando, la madrugada del 20 enero de 2015, fue encontrado muerto al exterior del edificio Camino Real de la ciudad de Maracay, al suroeste de Caracas. La investigación de entonces determinó que el cantante se había suicidado, arrojándose desde el décimo piso del edificio.
Casi nueve años pasaron para que Natalia Améstica Moraga, la mujer que manejaba su carrera, terminara confesando que ella dio muerte al artista y a Carlos Molnar, su esposo y amigo del rapero. Ante la justicia contó que los drogó con un té con ansiolítico y los asesinó. Luego, su hermano Guillermo Améstica, junto a agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional, alteró la escena del crimen para simular el suicidio y responsabilizarlo por el homicidio de Molnar. La operación de encubrimiento se concretó a partir de un pago de 10 mil dólares, según la indagatoria del fiscal Tarek William Saab.
La historia de González, de su éxito y prematura muerte, está ligada a la de Carlos Molnar y de los hermanos Améstica. Acá lo nombres, su relación y sus actuaciones en el cinematográfico caso que investigó el Ministerio Público de Venezuela.
Canserbero: la estrella
Tirone José González Orama, nació en Caracas el 11 de marzo del 1988. Su infancia y adolescencia transcurrió en el estado Aragua. En la universidad local cursó estudios de derecho y ciencias políticas, pero los dejó para enfocarse en la música.
El artista encabeza la lista de los 50 grandes en la historia del rap en español que elaboró la revista Rolling Stone este año. “Sus canciones cuentan historias complejas y oscuras, son reflexiones sesudas en torno a la vida, la muerte, la injusticia y las calles”, señala esa publicación.
En 2013, colaboró con Mala Rodríguez en la canción “Ella”, del álbum Bruja, de la española.
Uno de sus temas más populares, “Pensando en ti”, de su primer disco Vida, supera las 20 millones de visitas en YouTube.
Estaba próximo a cumplir 27 años cuando lo mataron.
Natalia Améstica: la mánager
María Natalia Améstica Moraga era la esposa de Carlos Molnar y la mánager de Canserbero. Es madre de dos hijos.
Su testimonio, elaborado en base a falsedades para ocultar la verdad, dio pie a la tesis del suicidio del artista. Tras el crimen, aseguró a las autoridades que el rapero había “apuñalado a Molnar en reiteradas ocasiones, para luego suicidarse lanzándose por la ventana”.
Enseguida viajó a Chile para reconstruir acá su vida, hasta que fue requerida por la justicia venezolana.
Tarek William Saab: el perseguidor
En marzo de 2015, Tarek William Saab, oficiaba como defensor del pueblo y tras reunirse con la familia del cantante fue el principal instigador de la reapertura del caso, desacreditando la tesis del homicidio de Molnar en manos de Canserbero y el posterior suicidio del artista. “Intentamos avanzar en la investigación para dar una respuesta satisfactoria a sus familiares y seguidores pero no contábamos con la poca colaboración y el desinterés del Ministerio Público de la época”, declaró respecto a ese fallido primer intento.
Ya como el fiscal general de Venezuela, el funcionario de vistosos tatuajes cambió la investigación de Maracay a Caracas y ordenó la exhumación de los restos del artista y encabezó las labores para aclarar lo que pasó.
La exhumación reveló en los restos lesiones con un objeto cortante que no fueron informadas en la autopsia inicial. Los exámenes darían cuenta, según el persecutor, que la víctima fue apuñalada antes de caer.
En paralelo a esos análisis, el fiscal consiguió que la exmánager del cantante fuera entregada por Chile a la justicia venezolana y logró que confesara el crimen.
“Con premeditación y alevosía por motivos fútiles e innobles, asesinó a sangre fría a su pareja Carlos Molnar y a Tirone González. De la declaración de Natalia quiero destacar lo siguiente: ella ejecuta los homicidios por resentimiento y mucho odio hacia ambos”, señaló al informar de la confesión de Améstica.
Carlos Molnar: la otra víctima
Carlos Daniel Molnar González, también conocido como Stoperro, era bajista de la banda de reggae Zion TPL, amigo y colaborador de Canserbero.
Tenía 34 años cuando lo mataron. Ese día era el cumpleaños de una de sus hijas.
Guillermo Améstica: el coautor del crimen
Guillermo Améstica Moraga hizo carrera como productor musical de diversas bandas.
Se sabe que sobornó a funcionarios bolivarianos para montar una escena que apuntara al intérprete como el responsable de la muerte de Molnar.
Su dinero, nexos y amistades mantuvieron el caso enterrado por casi una década.
Asesinos tienen nacionalidad chilena
“Los antecedentes que disponemos es que la autora confesa tendría doble nacionalidad, nacionalidad venezolana y nacionalidad chilena y que el hermano que está también inculpado tiene nacionalidad chilena”, aseguró consultado por el caso en La Moneda el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve.
“Respetamos el actuar de la justicia”, señaló la autoridad, recalcando que la persecución de delitos se hace sin distinción de nacionalidad y “sin xenofobia”.
Esto luego que el fiscal Tarek William Saab dijera que en Chile existe “una xenofobia antivenezolana brutal”, asegurando que su país es distinto.
“Estamos ante dos extranjeros de origen chileno que matan a dos venezolanos, uno de ellos un genio de la música”, comentó el fiscal del caso.
El origen del crimen, también tendría relación con la gira que trajo a Canserbero a Chile a fines de 2014.
“El problema empezó en Chile un mes antes, cuando en plena gira supe, después de haber hecho la organización y comprar los pasajes para irnos para allá, que no iba a recibir pago por parte de Carlos”, señaló Natalia Améstica en su confesión en video.