Desde las 10.00 horas de este martes se realiza en el Juzgado de Garantía de Rancagua la formalización de los 18 detenidos por su presunta responsabilidad en el robo a la sucursal de la empresa de resguardo de valores Brinks que se efectuó la tarde del viernes 16 de agosto en la capital de O’Higgins.
El fiscal regional de O’Higgins, Aquiles Cubillos, trabajó con personal especializado del OS9 de Carabineros para presentar en audiencia los antecedentes para fundamentar la acusación.
Cubillos expuso que el atraco fue concretado por una “organización criminal interregional”, que operaba bajo una “estructura jerarquizada y permanente en el tiempo” y cuyos integrantes sostuvieron varias reuniones para llevar a cabo la planificación.
En su presentación, el persecutor finalmente reveló la cifra sustraída por la banda desde la empresa: $12 mil millones, que siguen siendo buscados, junto al resto del grupo. Se trata de uno de los mayores robos de la historia, aunque por debajo del llamado Robo del Siglo que también afectó a una empresa de valores en Independencia en 2017. Aquella vez, un grupo delictual escapó con un botín cercano a los $16 mil millones.
Antes de irrumpir en la empresa de Rancagua, la banda coordinó la quema de varios vehículos para interrumpir el tránsito en puntos estratégicos de la ciudad con la finalidad de facilitar su huida con el dinero. Cada integrante de la organización tenía un rol asignado.
De acuerdo al Ministerio Público, hubo 21 los vehículos involucrados y fueron quemados siete.
Según las estimaciones que ha hecho el equipo investigativo, la banda estaba integrada por entre 25 y 30 personas que habrían intervenido en las distintas acciones que se llevaron a cabo el viernes para perpetrar este robo que se efectuó cerca de las 13.00 horas del viernes 16 de agosto.
A los detenidos se les imputan los delitos de robo con intimidación, asociación criminal, porte ilegal de arma prohibida, siete delitos de incendio, porte de elementos incendiarios y 19 delitos de receptación de vehículos motorizados.
Entre los 18 formalizados figura una cajera de la empresa, identificada con las iniciales X.P.F.N. y un guardia de seguridad, de iniciales O.A.O.O., los que también habrían formado parte de la banda. El tribunal prohibió dar a conocer los nombres y publicar fotografías con los rostros de los imputados.
Dos de los imputados debieron comparecer desde el hospital ya que fueron heridos en una balacera que tuvo lugar en un sitio eriazo, durante el operativo que realizó Carabineros para detener a los involucrados en el robo.
La Delegación Presidencial de O’Higgins se hizo parte como querellante.