La ministra del Interior y Seguridad Pública, se refirió al emplazamiento que el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, hizo al gobierno tras la suspensión de clases en una decena de colegios de la Ciudad Puerto ante el funeral “de alto riesgo” de un delincuente conocido como El Ñaju que fue enterrado en Playa Ancha esta tarde.
“Sinceramente no necesitamos ningún emplazamiento del alcalde, lo que necesitamos es hacer un trabajo colaborativo”, expresó Tohá.
El llamado del jefe comunal fue a mejorar la seguridad en Valparaíso. Varios establecimientos decidieron suspender labores de forma preventiva. Durante el velorio del sujeto, que fue acribillado justamente frente a un recinto educacional, sus cercanos lanzaron fuegos artificiales y se reportaron tiros al aire.
“Decir a las autoridades de un establecimiento, sus equipos de profesores, de asistentes de la educación, los apoderados y apoderadas, nosotros entendemos la preocupación y entendemos cuando se toman medidas para proteger a los niñas y las niñas, pero tenemos que encontrar una manera de enfrentar estas preocupaciones reforzando la atención que damos desde el punto de vista de la vigilancia policial y mejorando la coordinación para que los colegios no sean afectados”, expuso la ministra Tohá al ser consultada por el tema en el Congreso.
“No podemos permitir que el narcotráfico decida el calendario escolar. En Chile no vamos a aceptar que eso suceda y, por lo tanto con la empatía y la solidaridad con los colegios que se sintieron amenazados hoy día, tenemos que prepararnos para que cuando haya una próxima oportunidad, tengamos disposición de personal, hagamos todas las medidas de protección necesarias alrededor de los colegios, pero no sacrifiquemos la actividad escolar por la agenda del narcotráfico. Eso no es admisible en Chile”.