Este jueves se dará fin a la toma estudiantil del campus Juan Gómez Millas de la Universidad de Chile, ubicado en Ñuñoa.
Esto, a partir de un acuerdo entre los representantes del alumnado y autoridades de la casa de estudios.
El acuerdo considera una recalendarización de las actividades académicas en el campus, incluyendo una marcha blanca y la posibilidad de la “eliminación extraordinaria de ramos”, indicaron los estudiantes en un comunicado difundido en forma interna.
En el comunicado, dicen considerar que los temas pactados “son los mejores para garantizar el bienestar académico y estudiantil en el porvenir de las movilizaciones y la vuelta a clases”.
“Esto no se acaba aquí y como hemos descubierto en esta movilización, hay problemáticas de raíz por las cuales debemos seguir luchando”, aseguraron.
Según lo convenido entre las partes, este miércoles va a ingresar al campus personal de seguridad y funcionarios de la Contraloría universitaria para hacer una evaluación.
El jueves será entregado el campus por los participantes de la toma a las 08.00 horas y el retorno a clases presenciales será el lunes 1 de julio.
Los estudiantes de Artes, en tanto, optaron por mantener la toma de una de las sedes de su facultad en el campus, en el pasaje Las Encinas.
En Artes, reclaman por un “un abandono económico y administrativo que se ha extendido por años”, acusando deterioro de sus instalaciones e infraestructura.
Se mantiene también el “acampe” en el Patio Domeyko de la Casa Central, en Alameda, en demanda por el fin de los convenios del plantel con instituciones israelíes.