La mañana del 30 de octubre de 2020, en plena pandemia del Covid-19, el cabo de Carabineros Eugenio Nain Caniumil acudió a un procedimiento por un corte de ruta en Padre Las Casas y no volvió con vida. Tenía 24 años, una hija de entonces siete meses y un niño que tenía cinco años y que quiere ser carabinero como su padre, uno de los más de 1.200 mártires de la institución uniformada. A modo de homenaje, Nain recibió un ascenso póstumo al grado de suboficial mayor. El Congreso, en tanto, aprobó una ley que respalda el actuar policial y que fue bautizada con su nombre.

A tres años del crimen, este martes, el Tribunal Oral en lo Penal de Temuco dio a conocer la pena de 32 años de cárcel que Luis Kallfulican Tranamil Nahuel deberá cumplir por el homicidio del uniformado. En tanto, en calidad de prófugos, se mantienen Francisco Javier Painevilo Maldonado y Carlos Esteban Cancino Tapia, los otros dos comuneros sindicados como responsables de los disparos que dieron muerte al carabinero.

“Lo último que se pierde es la fe y mientras yo tenga fe, confío en que se va a hacer justicia 100% por mi marido y mis hijos”, aseguró en las afueras del tribunal la viuda del carabinero, Dahianna Pereira, manifestando su confianza en que la Fiscalía de La Araucanía y las policías logren ubicar a los otros implicados.

Pereira reconoció que esperaba una condena mayor y comentó que “los que mandan son los jueces”.

“La verdad que los 32 años sí me sorprendió, porque esperábamos un poco más de años. Pero, tampoco son pocos”, señaló.

La mujer entregó un relato sobre sus vivencias y luchas tras el deceso de su marido y valoró el inminente cierre de este proceso.

“Siento paz, es algo que se liberó y lo único que pienso es en mi hija, en mi hijo, que mi hijo sí sufrió, fue una pelea dura por él. Y ahora puedo llegar a la casa y decirle: tu papá por fin tuvo justicia, abrazarlo”, expresó emocionada Dahianna Pereira, antes de excusarse de seguir haciendo declaraciones por la dificultad que le provoca hablar de sus hijos.

“Ahora recordarlo por siempre, tenerlo presente en las vidas de mis hijos y tratar de avanzar”, cerró la viuda.

Su abogado, Luis Candia, precisó que la lectura de penas corresponde al cierre de una etapa, acotando que el caso no ha concluido y que la defensa anunció que va a impugnar la sentencia por un recurso de nulidad.

“Pero estamos seguros que va a ser rechazado el recurso, porque lo que se logró acreditar durante el desarrollo de más de 20 jornadas de juicio fue absolutamente contundente”, afirmó el profesional.

Desde el Ministerio Público, en tanto, señalo el fiscal de la Unidad de Alta Complejidad de La Araucanía, Carlos Bustos, sostuvo que la condena era histórica en cuanto a la investigación de los delitos de la llamada violencia rural.

“Valoramos la sentencia y la cantidad de años que se le ha impuesto al condenado”, sostuvo el persecutor.